Una cálida bienvenida

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Esperando a que abrieran la puerta mi corazón latía muy de prisa, en eso la puerta comienza a abrirse y una tenue luz se asoma desde la sala de esa casa y una nota en el suelo que dice -Entra con cuidado- y un corazón con un beso marcado en el papel.

Me fijo con cuidado a ver si logro observar algo de lo que hay dentro pero lo que logro ver es muy poco con tan baja luz.

Caminando despacios y observando hacía los lados, entro en la casa y a los pocos pasos después de la puerta algo cubre mi rostro y todo se vuelve negro, respiro mas rápido cuándo escucho una voz que me susurra al oído -tranquilo nada malo pasa-

Eduardo _¿Eres tú?_ pregunto algo confundido pero la respuesta era obvia.

Lisa _Esperabas que fuera alguien más_

Esa voz hizo que me tranquilizara y mi respiración se calmó, destapan mi rostro y veo su hermosa cara, sus lindos ojos cafes y su cabello lasio.

Eduardo _¿Para que querías que viniera?_ Pregunto algo nervioso.

Lisa _No lo se, me sentía sola y te extrañaba_

¿Me extrañaba?, me preguto en mi mente.

Eduardo _Y que quieres que hagamos_

Lisa _No lo se, tenemos la casa para nosotros solos por el resto de la noche, mis padres no llegarán hasta mañana al medio día, podemos hacer lo que queramos_

Mi corazón latió muy de prisa cuándo escuché eso pero en mi mente ya sabía lo que pasaría esa noche y si algo sabía era que no lo desaprovecharia.

Lo primero que hacemos esa noche fue buscar algo de comer, había salido muy de prisa de casa y tenía hambre, vamos a la cocina sin perdernos de vista el uno del otro.

Luego de una hora de comer, ver televisión y charlar un poco nos arrecostamos en el sofa, ella estaba mucho mas cariñosa que de costumbre y rápido se acerca a mi hasta darme un cálido abrazo y quedar su cara a pocos sintimetros de la mía hasta que sucedió lo que tenía que pasar.

Nos juntamos en un largo beso en en ese momento no pensé en nada, mi mente quedó en blanco y sólo disfrutaba el momento deseando que nunca terminará.

A la mañana siguiente recuerdo poco de lo que pasó, de lo único que si se es que una bella mujer amaneció al lado mío una gran cama y una habitación muy desordena.

Al fijarme en la hora marcaba 9:26a.m. y Lisa había dicho que sus padres llegaban al medio día asi que aún tendría algo de tiempo para marcharme sin que ellos se dieran cuenta.

Después de veinte minutos ella despierta con una hermosa sonrisa y me dice -Buenos días- yo le contesto de la misma forma el saludo y así nos levantamos a desayunar y yo a alistarme para salir antes de que llegarán sus padres.

Al estar a punto de salir de su casa se despide de mi con un beso una frase -Esto hay que repetirlo- y yo con gustó le respondo que sí, me marchó de su casa repasando en mi mente todo lo que había sucedido y pensando

~Esto apenas esta comenzando~

Mi Ultimo DíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora