Capítulo 5 - Amigos

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— ¿Hanji? ¿Levi? ¡Cuanto tiempo sin veros!

— Nos alegras que hayas vuelto. Venga va, os invito un refresco y nos ponemos al día. No tengo mucha clientela a esta hora, así que podemos charlar libremente. El enano ya se ocupará del negocio.

— Te odio, cuatro ojos.

— Pues bien que te casaste con esta cuatro ojos.

Hanji se abalanzo hacia nosotros y nos dio un fuerte abrazo. Levi se nos quedó mirando

— Chicos, como me alegra veros de nuevo juntos. ¿Para cuando la boda?

— ¡H-hanji! ¡Eren y yo solo somos amigos!

— Pues pronto lo dejarán de serlo~

— Cuatro ojos, deja a los mocosos en paz

— Vaaaale, enano gruñón

— Tch

Hanji, Historia y yo nos quedamos hablando sobre los hechos que nos habíamos perdido. Parece que Levi y Hanji se casaron y ella está embarazada de dos meses.

Nos lo pasamos muy bien, como en los viejos tiempos

Hace 11 años

— Eren, iremos a comer a donde un amigo nuestro, vete a cambiar

— Eh...No quiero ir a un lugar donde hay adultos borrachos.

— Historia vendrá.

— Ya voy a vestirme. Me podíais habérmelo dicho antes. Es que pasaba de ir a un lugar sin nadie con quien hablar, ya que los adultos habláis de vuestros temas.

Me vestí y fuimos a un bar.

— ¡Grisha! ¡Carla! ¡Bienvenidos!¿Ese es su hijo?

— Hola Hanji, este es Eren, mi hijo.

— Hola Eren, soy Hanji Zoe y ese enano gruñón de allá es mi mejor amigo Levi Ackerman. Un placer conocerte.

— El gusto el mío. ¿Donde está Historia?

— ¿Historia? Ah, te refieres a la niña rubia. Esta en esa sala de allá. — Dijo señalando un rincón de la sala.

— Gracias...

— De nada. Anda, ve a jugar con ella.

— ¿¡¿CUATRO OJOS CUANTAS VECES TE TENGO QUE DECIR QUE NO TE QUEDES HABLANDO?!?¡TENEMOS MUCHA CLIENTELA HOY!

— Ya voooooooyyyyy.

Que recuerdos esos. A partir de ese día nuestros padres nos llevaban allí para pasar la tarde mientras ellos se tomaban unos tragos. Esas eran unas tardes muy divertidas.

— Eren, se hace tarde, me tengo que ir a hacer unos recados que me pidió mi madre.

— Oh, bueno, adiós. Yo también me tengo que ir. ¡Nos vemos mañana!

— ¡Adiós Eren!

Me despedí de Historia y me fui a casa. Cuando llegué, vi a Armin jugando videojuegos que se había comprado hoy.

— Hola Armin, veo que andas estrenando juegos.

— Si, el Wings of freedom está muy bueno, he matado muchos titanes.

— Interesante... ¿Y Mikasa?

— No se la verdad, salió hace una hora todavía no ha vuelto a casa.

— ¿En serio?¿Ni si quiera te dijo donde se fue?

— Me dijo que se iba a hacer unas compras. Recuerda que ella se queda mirando las bufandas de ese local llamado Sasageyo.

— Ah si, es cierto. Creo que no tardará en venir.

— Si, tienes razón.

En otro lugar de la cuidad

— EY TU, RUBIA ASQUEROSA.

— ¿Eh?

— Sí tu, estúpida.

— Oye, no me hables así, no te hecho nada.

— ¿NADA?

Una azabache apareció de la nada y agarró del cuello a la rubia. Gracias a ese acto, la rubia pudo identificar a su agresora

— ¿Mi...kasa? ¿Por que haces esto?

— ¿No crees que es obvio? Llevo bastantes años enamorada de Eren y aproveché el poder estar con el durante todos estos años. Ahora, una perra como tu, viene a quitármelo después de dejarlo abandonado por bastantes años. Venga ya, el no se merece ni una pizca de tu atención.

— Yo...

— Callate, no te he dado permiso para hablar. Y que quede claro que no vas a decir nada de lo que va a pasar aquí.

— No...Por favor...No me hagas nada, prometo no decírselo a nadie...

— Así me gusta.

Mikasa me comenzó a dar a golpes en todas las partes de mi cuerpo. Puñetazos, patadas, cachetadas...

Por favor Eren...Salvame

CONTINUARÁ

La flor que vimos en Mayo - Shingeki No Kyojin - ErekuriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora