La flor que vimos en Mayo - Shingeki No Kyojin - Erekuri

Capítulo 6 - Autoengaño de ella

Me encontraba leyendo unos cómics que encontré en la estantería de Armin. Fue lo único que se me ocurrió en ese momento. Escuché como alguien abrió la puerta de casa.

— Ya estoy en casaa~

— Oh Mikasa, ya has llegado, llevamos esperándote cuarenta minutos.

— Eh, si... Estaba mirando ropa en el centro comercial y me entretuve con el apartado de las bufandas, lo siento por preocuparos.

— Mikasa mirando bufandas, un clásico.

Por alguna razón la voz de Mikasa me parecía falsa, como si estuviera mintiendo. Bueno, seguro que son imaginaciones mías.

- Eren, te traje unas galletas de vainilla. Las vi a un precio bastante bueno y pensé que no estaría mal comprarlas

— Gracias Mikasa, como se nota que me conoces. Me encanta el sabor a vainilla~

— Eren, sabes perfectamente que yo siempre estaré para ti, no otras.

Mikasa me abrazó y le correspondí. Pero sentía que ella no era la persona que deseaba abrazar en ese momento.

Era ella...

(N/A: Esta wea se vuelve Kuzu no honkai, los que vieron ese anime entienden)

— Oye Eren, te veo pensativo... ¿Pasa algo?

— Ah, no pasa nada, tranquila.

— Vale...

— Eren, Mikasa, la cena ya está lista.

— Ya vamos. — Dijimos Mikasa y yo al unísono.

. . .

— ¿Y Mikasa, viste alguna bufanda que te interese? — Dijo Armin mientras cortaba su trozo de carne.

— Para serte sincera, no. En esta temporada las bufandas no se están tomando mucho en cuenta. Esto una gran falta de respeto hacia la gente amante de las bufandas. — Dijo con un aire medio enfurecido.

— Oh, que mala suerte. Bueno, yo tuve buena suerte y me pude comprar los videojuegos que salieron esta semana. Pronto tendré que subir mis reseñas a YouTube. — Le respondió el rubio con un aire victorioso. — ¿Y tu Eren?

— Yo... Pues yo solo fui a un bar de unos amigos con Historia. Nada más, es que no ha sido el mejor día de todo el año, la verdad. — Enseguida recordé al Levi observándome con una mirada asesina después de haber derramado mi zumo esta tarde. Definitivamente, hoy no era mi mejor día del año.

Y eso porque no sabía lo que pasaría el día de mañana

. . .

— ¡EREN! ¡TE DESIERTAS AHORA MISMO O TE DARÉ PATADAS HASTA QUE DESPIERTES! ¡TU DECIDES!

— Ya voy Mikasa... — Mikasa no era muy delicada que digamos, así que sería mejor evitar sus patadas.

— Vaalee. Te dejo veinte minutos para prepararte. Si no estás listo, nos vamos sin ti. Y voy en serio.

— Ya veras como voy a salir a tiempo.

Mikasa y Armin se fueron sin mi, de nuevo. Esas sábanas son demasiado cómodas.

Mientras iba de camino al instituto, sentí como alguien me agarraba del hombro.

— Oye Eren.

— ¿Ymir? ¿Que haces aquí? ¿Como es que todavía no has llegado a clases si siempre eres de las más puntuales?

— Eso no importa ahora. He venido a avisarte de una cosa.

— ¿De que estás hablando? ¿A que te refieres?

— Quiero que me ayudes a convencer a Historia de que no se deje engañar a si misma y que nadie puede hacer que deje de gustarle algo.

— ¿Por que eso? ¿Que le pasó a Historia?

— Ya te darás cuenta con el paso del tiempo.

— ¿No podrías ser un poco más específica?

— No, no puedo. Bueno, olvidalo, adiós.

— Per...

Ymir se había ido. Después llegué a clases. Había una aura diferente.

Toda la gente rodeaba a Reiner e Historia. ¿Que han hecho esos dos para ser rodeados por una clase entera.

— ¿Que bonitos se ven, no Mikasa? — Escuché decir a Sasha.

— Se ven lindos.

— ¡Si! Aunque creo que Historia quedaría mejor con Eren. Ellos sí son uno para el otro.

— ¿Con Eren? No los veo juntos la verdad. — Dijo Mikasa con un tono un poco molesto.

Esa conversación de Sasha y Mikasa causó un leve sonrojo en mis mejillas.

Pasaron las clases y no lograba concentrarme. Quise aclarar mis dudas y fui donde estaba ella.

— Oye Historia...

— Ah...Eren...Tengo prisa, así que si me disculpa...

— ¡Espera! — Cogí el brazo de Historia. — ¿Es verdad que estás saliendo con Reiner?

— Si, es verdad.

CONTINUARÁ