26.

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─¿Estás nervioso? ─ Le pregunté a Niall mientras íbamos camino al recinto en el que se llevaría a cabo el último concierto de su primer tour como solista.

─Un poco, pero también emocionado, parece que fue ayer cuando el tour comenzó. ─ Él contestó jugando con mis dedos.

─Todo saldrá bien, además, estarás de regreso en Estados Unidos el próximo año para comenzar el siguiente tour. ─ Recordé. ─ Y ve el lado positivo, tendrás un par de meses de descanso lo que significa que podremos regresar a casa y podrás relajarte aunque sea por un tiempo.

Él puso su brazo alrededor de mí, me acercó a él y besó mi frente. ─Eso es en lo que no he podido dejar de pensar. No puedo esperar para por fin tener algo de tiempo libre para poder estar contigo y tal vez vayamos a visitar a nuestras familias o podemos irnos de viaje a dónde tú quieras y tomarnos unas vacaciones, solo nosotros dos. ─ Él murmuró mientras recargaba su cabeza sobre la mía, haciéndome sonreír.

Había decidido quedarme en casa por la mayor parte de este tour, así que mientras él estaba ocupado con la gira, yo me quedé en Londres y me hice cargo de la casa. Así fue hasta el momento en el que tuve que verlo de nuevo, y él, siendo el gran novio que es, se había encargado de comprarme un vuelo desde Londres hasta Los Ángeles para que pudiera acompañarlo en los últimos conciertos de la gira.

Las únicas cosas que aún se interponían entre Niall y su regreso a casa eran el último concierto de la gira y su presentación en los TCAs. Y siendo honesta no podía esperar a que ambos eventos terminaran para finalmente poder tener a Niall conmigo en casa por un par de meses.

Llegamos al recinto del concierto y pronto nos encontramos con su banda y las personas del staff. Comenzamos a platicar y bromear entre todos y yo deseé haberme unido antes a la gira porque realmente pasaba un buen tiempo alrededor de todos ellos.

Era hora del soundcheck y más gente comenzó a llegar al lugar mientras Niall y la banda se preparaban. Después de que terminó el soundcheck, Niall y yo fuimos directo a su camerino para poder relajarnos y tener un rato a solas.

Estando en el camerino Niall se preparó una taza con jugo de limón y té de jengibre y comenzó a hacer gárgaras con él a la vez que caminaba de un lado a otro.

─Eso es asqueroso. ─ Reí mientras lo miraba.

─ ¿Qué? Se supone que es para ayudar a mi garganta. ─ Se defendió.

─Sí, cuando lo bebes, todo eso de las gárgaras en innecesario.

Él se sentó a mi lado y cruzó sus piernas a la vez que llevaba la taza a sus labios y levantaba su dedo meñique.

─¿Así le parece bien, señorita? ¿Es correcto beberlo de esta forma? ─ Él preguntó con un acento británico claramente fingido.

─Niall, eres muy raro. ─ Reí mientras lo miraba tratando de actuar como un hombre británico elegante.

─Pero ese es el motivo por el que usted me adora así que...─ Él dijo aún con el acento británico.

─Bien, detente. Quiero a mi novio irlandés que hace gárgaras con su té y dice cosas sin sentido de vuelta.

Niall sonrió y dejó la taza sobre la mesita de centro.

─Entonces trae tu trasero aquí y dale a tu hombre irlandés algo de amor. ─ Él mencionó, esta vez haciendo su acento irlandés lo más marcado posible.

Reí y me senté en su regazo para después besarlo.

Pasaron los minutos y nosotros seguíamos con el beso, Niall se había encargado de profundizarlo y sus manos estaban sobre mi trasero, dándole pequeños apretones de vez en cuando, por otro lado, yo tenía mis manos detrás de su nuca mientras jugaba con el cabello corto que se encontraba en esa parte.

Imaginas | NHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora