Sanada Uchiha- Liberación del Odio.

Destierro.

*3 Años despúes.

Una figura saltó sobre un río esquivando varios shuriken y luego comenzó a pasar por sellos de manos "¡Estilo de Fuego: Jutsu Bola de Fuego!" Una enorme y poderosa bola ardiente salió del joven pelinegro, esta ardió en dirección a la otra figura que estaba al borde del río pasando por sus propios sellos "¡Estilo de Madera: Muro de Madera!" Frente a Hashirama se creó un gran muro de madera que apenas resistió la potencia del fuego, pero finalmente ambos ataques cesaron sólo dejando un muro quemado.

El Senju saltó en dirección al Uchiha y ambos chocaron en el aire con una patada, Sanada sonrió estabilizándose para tomar a Hashirama del pie, lo atrajo hacia el y le propinó un fuerte puñetazo en la mandíbula que envió al Senju a estrellarse con el muro de madera rostizado. Sanada estaba a nada de pasar por sellos de manos nuevamente, pero cuando aterrizó en el agua notó que el cuerpo de su contrincante derribado se convirtió en madera.

"Yo gano" dijo Hashirama con una sonrisa, estaba detrás del Uchiha con un kunai apuntando a su cuello. Sanada suspiró y comenzó a caminar hacia la orilla junto a su amigo.

Los años pasados habían sido los mejores para el Uchiha, después de conocer a los hermanos Senju no había dejado de entrar junto a ellos y su hermano Madara. ya conocían sus respectivos clanes y los únicos que se separaron después de la revelación fueron Madara y Tobirama, pues no aceptaban estar cerca de sus potenciales enemigos, sin embargo, Hashirama y Sanada seguían siendo tan amigos como siempre, entrenaban juntos cada día que el Senju no tenia compromisos, Sanada por otro lado jamás los tenia, ya que para su Clan seguía siendo un inútil.

"Aún no puedo derrotarte, no importa lo mucho que mejore, no soy capaz de hacerlo" murmuró Sanada con fastidio, pues superar a Hashirama era su objetivo; entrenaba cada parte del día para cumplir con su meta, recibía ayuda de Madara y siendo hijo del Líder del Clan tenia acceso a las bibliotecas Uchiha, pero ni con todo eso era capaz de derrotar a su amigo.

"Bueno, siempre seré mejor que tú" respondió el Senju con arrogancia fingida. Las cosas para Hashirama no habían ido tan bien; su relación con Tobirama era cada vez mas distante debido a su amistad con el Uchiha, todo empeoró cuando hace unos meses su otro hermano Itama había muerto en batalla, Tobirama había llegado aquí furioso y atacó a Sanada con todo, sin piedad alguna, pero sorprendentemente el Uchiha había logrado mantenerse al día con su hermano, terminando la batalla en un empate. Desde ahí el peliblanco no había vuelto a hablar con Hashirama.

"Algún día despertaré mi Sharingan y verás" gruñó el Uchiha ahora de once años.

"Hablando de eso... ¿Madara ya tiene los tres niveles?" Preguntó el Senju tomando asiento en una roca.

"Si... Nii-san de hecho ya esta liderando escuadrones por todos lados, es por eso que ya apenas puedo entrenar con el" contestó Sanada con una pequeña sonrisa "Es totalmente diferente a mi"

"Vamos, sabes que ya no eres aquel chico débil y hasta él te lo ha dicho... ¿cuándo piensas mostrarle a tu Clan de lo que eres capaz?¿No era tu sueño liderar a los Uchiha?" Cuestionó Hashirama con curiosidad.

"Veo ese sueño demasiado lejano, hasta que no despierte el Sharingan jamás seré capaz de vencer a Nii-san... todos saben que el será el siguiente Líder y si no lo es, Tou-san dice que lo será Izuna" comentó Sanada con el ceño fruncido "He estado pensando en otras cosas últimamente"

"¿Oh si?... ¿Tú pensando?" Bromeó el Senju entre risas.

Sanada rió mientras empujaba a su amigo "Quiero conocer el mundo, sólo conozco una diminuta parte de él y quiero conocerlo por completo"