El fuertecito con su gran barba el escote que lo hace perfecto.
El de los ojos café pero que no consume café, que va a bares esos que suelen haber siempre en las plazas de las ciudades.
El que no le gusta comer solo, que prefiere dar la mano y hacer increíble el desayuno, almuerzo, cena.
El carnívoro especial que no come pavo, cuy y chancho.
El que prefiere ser negro que blanco para no desentonar, el que anda en short y abrigado en el pecho, pero no esconde lo enorme que lleva puesto debajo de su pecho izquierdo para que nadie lo olvidase jamás.
El que prefiere la luna llena de estrella en un cielo despejado. Aunque yo quisiera la luna llena en todas mis noches con el azul oscuro tornando bonito el cielo.
El que prefiere el campo en vez de la playa, mientras que yo prefiero ambos porque los amo.
El que pones las manecillas del reloj exacta para cada carcajada.
El que te mira como planeando un viaje, esos de aventureros perdidos.
El que no es bueno con los rompecabezas.
Que si le pregunto que cual es su sonido favorito de invierno y el que prefiere el trap en vez del jazz.
El que me sigue con mis preguntas rápidas para escribir esto.
El que me debe mi cena llena de pizzas, que si cumple de recompensa lo llevaré a lo alto del monte contando las luces de la ciudad.
El que... Este micro poema seguirá, pero mientras la querida dormirá. Good bye
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La luna en tiempos de Primavera
PoesíaPerdone lector, hablar entre versos siempre sabe mejor.
