Viktor Nikiforov es acusado de agredir sexualmente a su entrenado Yuri Plisetsky. Por lo cuál, la gran leyenda del patinaje artístico es puesto tras las rejas en tanto esté pueda demostrar su inocencia. Confundido, angustiado y dolido Viktor espera...
Everything is grey His hair, his smoke, his dreams And now he's so devoid of color He don't know what it means And he's blue And he's blue
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Sabía que no sería un dulce despertar siendo que, ambos no tenían claro que era lo que había sucedido la noche anterior.
¿Qué pasaría ahora? ¿Cambiaria algo?
Como sea, Viktor tenía muy en claro que Yuuri podría reaccionar de distintas formas al despertar. Abrió lentamente sus ojos, topándose con el sereno rostro del nipón, quien dormía de forma placida.
Su corazón comenzó a latir fuertemente en su pecho, de forma que temió despertarle. Viktor mantuvo la respiración fuertemente admirando la forma en la cual los azabaches mechones cubrían sutilmente el blanquecino rostro de Yuuri, dándole un aspecto de ingenuidad que rozaba con la inocencia.
Sus labios se mantenían ligeramente abiertos, dejando escapar sonidos casi inaudibles. Sonrió sin notarlo para llevar una de sus manos hasta estos, deseoso de acariciarlos.
Si lo besaba ahora ¿Se despertaría?
—Yuuri —Le llamo lo bastante fuerte como para despertarlo, palpando el terreno, no se arriesgaría a nada.
Viktor se incorporo lentamente procurando no hacer ningún movimiento brusco. Deslizo las negras sabanas a un lado descubriendo su desnudes, observo con ojos brillosos la suave e encantadora expresión de su amante que dormía profundamente.
Nuevamente el corazón retumbo en su pecho asustándolo.
«Solo quiero probar sus labios, no significa nada » Se recordó a medida que recorría con su mirada el torso descubierto del nipón, añorando cada una de las marcas rojizas que ahora cubrían la pálida piel.
Sus mejillas se calentaron a medida que se acercaba a él durmiente, sus pestañas espesas resaltaban radiantemente sobre su blanca piel debido a su intenso color oscuro.
El aire que este emanaba golpeo su rostro, envolviéndolo en una calidad sensación que se deslizo por todo su cuerpo. Viktor cerró los ojos una vez ambas bocas estuvieron a solo milímetros de rozarse.
Ambos alientos se entremezclaron satisfactoriamente. Los nervios circulando alrededor de su cuerpo le confundían. Solo era un beso...
No había nada de malo en ello.
No significaba nada.
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Click*
— ¿Viktor? — Yuuri murmuro descentrado. Respiro agitadamente, su corazón bombeando violentamente. Su mano fuertemente sujeta a la *Springfield XDm que solía guardar bajo su almohada.
