MONSTER (Liam Dunbar y Tu)

cap 20

-Liam, necesito hablar contigo- deje un mensaje en la contestadora ya que no contestaba mis llamadas

Scott me había dicho que Hayden era una quimera así que tendrían que esconderla en la escuela para protegerla de los doctores del pavor.

Al llegar a la escuela pude ver a Liam llegar con Hayden, sabia que era parte del plan pero aun así no podía evitar sentirme mal con la escena, no me juzguen, Liam ni siquiera había respondido mi mensaje de voz.

Camine hasta la biblioteca para investigar algo más de mi problema.

Al llegar me senté en una mesa sola y saque mi laptop de la mochila, investigue un par de cosas sobre la planta morada que habíamos descubierto pero todos los sitios decían lo mismo que el libro de Masón.

Mientras investigaba, un mensaje de Lydia llego a mi teléfono diciendo que los aparatos que ella y Parrish estaban arreglando para que interfiriera con la corriente estaban listos.

-podremos proteger a Hayden- fue lo ultimo que envió, metí el celular en mi bolsillo de nuevo sin darle importancia, necesitaba concentrarme en lo mio.

Llevaba todo el día buscando y nada, no obtuve respuesta a ninguna de mis dudas.

-te esperaremos en la escuela hoy en la noche para que nos ayudes a cuidar a Hayden- todo el maldito día había recibido mensajes de los chicos diciendo lo mismo, estaba harta de que todos estuvieran viendo lo de Hayden, no quiero sonar egoísta pero de verdad ella no es la única afectada con lo de los doctores

-____, estarás con Liam y Hayden en los vestidores esta noche- hablo Scott el cual no vi cuando llego

-de verdad, ya basta- el me miro confundido- estoy harta de que todos hablen de Hayden, se que esta en peligro pero no es la única- al fin había explotado- sabes Scott ya no soy mujer lobo, alguien me arrebato ese poder, no se si fueron los doctores o quien pero no he tenido el apoyo de ninguno para descubrirlo mas rápido, Masón es el único que se ha preocupado, el y Brett el cual ni si quiera es de esta escuela y ha sido de mas ayuda que ustedes- tome mis cosas y salí hacia la casa de mi tía, no quería ver a nadie.

Arroje todo sobre el sofá y me arrodille en el suelo clavando mis uñas en mis manos por la impotencia que sentía, solté un grito desesperado, cada día que pasaba me sentía tan vacía, no tenia padre, ni parientes cercanos y ahora tampoco tenia mis poderes.

Cerré mis ojos un momento y al abrirlos vi a dos de los doctores parados frente a mi.

-la primera fase se ha completado con éxito- hablo uno de ellos con voz robótica, no podía moverme, ni gritar o tan solo hablar, se acercaron a mi amenazantes con una aguja gigante en su mano.

Desperté en el mismo lugar donde había visto a los doctores, pero nada parecía extraño, todo estaba en su lugar, no me sentía mal, pero están muy alterada.

Subí a mi antigua habitación para verme en el espejo completo y comprobar que todo estaba bien conmigo.

No había rastros extraños ni nada para preocuparse, pude ver el reflejo de la luna en mi espejo, en ese momento volví a tener la sensación de mareo que tenia con cada luna llena, me acerque mas al espejo al notar que mis ojos eran de un tono gris, me estaba espantando demasiado pero no sabia que hacer, no iba a llamar a los chicos.

-Brett, por favor ven a mi casa, necesito hablar con alguien- fue la primera persona que se me ocurrió

-¿estas bien?- negué pero al recordar que estaba al teléfono hable

-no, ven es urgente- colgué rápidamente

Espere por unos minutos a que llamaran a la puerta pero no llegaba.