MONSTER (Liam Dunbar y Tu)

Cap. 48

Al llegara a casa de Scott todos parecían bastante nervioso dos, era entendible su comportamiento pero yo no podía olvidar lo que acababa de pasar hace unos minutos, al parecer mi estado fue obvio para Mason ya que en cuanto cruce la puerta se acercó a mí preocupado.

–Tardaste demasiado ¿Dónde estabas?—Exclamó con preocupación.

—Pasó algo de lo más extraño, encontré una de mis camisas a la ventana— Entramos a la casa mientras hablábamos.

—Así funciona la ropa Liam, si querías tener algo exclusivo...

—No me refiero a eso— Lo interrumpí— Hablo de que en una casa cerca de aquí estaban vendiendo unas cosas, entre ellas ropa y cuando me acerqué tenían una camisa, mi camisa, lo sé por una reparación que le hice.

—Espera ¿Una casa con puerta roja con garabatos pequeños en ella? ¿De dos pisos?— La descripción sonaba bastante detallada para nunca escuchar de aquel lugar.

—Si ¿Por qué?

—Cada vez qué pasó por ahí tengo una sensación, algo como un Deja Vu, es extraño de explicar.

Me quede en silencio unos momentos pero antes de que pudiera responder ya estábamos junto a los demás en la sala donde habían ocurrido los hechos la noche anterior. Había una mancha enorme en el techo del salón, estaba quemada por completo dando a entender que el rayo había golpeado ahí.

—¿Así fue como entró?—Preguntó Corey.

—¿Que es?— Mire el techo algo confundido.

—Un punto de impacto de un rayo, usualmente hay lugares así quemados en el suelo después de una tormenta de rayos violenta—aclaró Mason.

—Así entró el jinete fantasma, montando el rayo—dijo Scott girándose hacia mi.

—Si pueden usar rayos para cruzar el serbal...

—No hay lugares seguros—completó el alfa.

—¿Y el resto? Es mi culpa que estén marcados—dijo Corey.

—Hallaremos cómo protegerlos—lo tranquilizó Scott—A todos.

El mayor parecía cargado de esa confianza tan característica en él pero pelear contra seres que podían hacerte olvidar todo en un instante era nuevo para nosotros y los humos de aliento se sentían bastante bajos a estas alturas.

Sino varias ideas de cómo podríamos ayudar a los demás pero nada parecía suficientemente bueno, necesitábamos algo perfecto y cuando menos nos dimos cuenta ya debíamos ir a clases.

—Deberíamos de buscar alguna pista respecto a lo qué pasa— Dijo Mason luego de que le explicara a Corey lo que estaba ocurriendo— Los pendientes y la playera no pueden ser coincidencia.

—¿No crees que si fuera tan importante no lo hubieras olvidado?— El silencio se apoderó del ambiente luego de lo dicho por Corey— O tal vez si debas de buscar más.

Estaba claro que el chico no entendía del todo lo que estaba sucediendo pero tenía que apresurarme a descubrirlo antes de que el misterio me consumiera.

(...)

Al llegar al instituto cada quien fue a su clase correspondiente, quedamos que en la hora libre nos encontraríamos para resolver lo del jinete de la fiesta pero si no queríamos perder más materias (qué en realidad no me importaba demasiado) debíamos cumplir primero.

Había decidido guardar unos libros en mi casillero para no cargarlos todo el día pero mientras hacía esto sentí un empujón detrás de mi provocando que me golpeara contra los casilleros, me di la vuelta rápidamente topándome con uno de los amigos de Nathan.