Rose

149 13 14
                                    

Capítulo 17

Daniel

Ya estábamos en el auto en camino a casa de Memo. Habíamos pasado por su hermano pequeño a su escuela.

- Danny... - Me habló Memo dirigiéndome una mirada mientras manejaba.

- ¿Si?

- ¿Podrías poner en el reproductor ese disco que está ahí? - miró a la guantera.

- Si, por supuesto.

La abrí y busqué entre las cosas, no se veía a simple vista, metí mi brazo y sentí un cuadrado de plástico comprimido hasta el fondo y lo saqué. Quedé totalmente sorprendido.

- ¡No puede ser¡ - casi me desmayo de emoción - ¿Cómo sabías que quería el "Blue Neighbourhood"?

- Quería darte un pequeño regalo, y recordé que una vez Dulce me dijo que en serio querías ese disco.

- Gracias, este es el mejor álbum del mundo. Amo a Troye.

- ¿Aún más que a mí? - hizo in gracioso puchero de bebé que me mató de ternura.

- ¿Estás celoso?

- Claro que no - se cruzó de brazos.

- ¿Seguro? Te estás poniendo rojo.

- ¿Qué? ¡No es cierto! - era como un tómate furioso.

- Eres un mal mentiroso, creí que era yo el que se sonrojaba fácilmente.

Mientras él echaba humo por los oídos yo no paraba de reír.

- Bebé - Dije mirándolo - vamos, sabes que te amo más que a nadie.

- ¿Lo prometes?

- Lo prometo.

Desabroché mi cinturón para acercarme y darle un pequeño besó. Tal vez no fue sólo uno, tan pequeño, ni tan corto.

- ¡Hey, chicos! - Alex fingió una tos - ¿Recuerdan que estoy aquí y que puedo ver lo que hacen y en dónde ponen sus manos, cierto?

- Si quieres puedes ir en la cajuela todo el camino y así ya no tendrás que vernos - Dijo Memo haciendo una sonrisa sarcástica.

- Creo que mejor me voltearé.

Al llegar a su casa Alex bajó corriendo y saltando del auto, aunque pareciera  maduro para su edad, siempre se veía como un niño pequeño.

Cuando Memo y yo salimos me quedé confundido. Mi hermana estaba en la puerta principal.

- ¿Eli? ¿Qué haces aquí?

- Daniel... necesito que hablemos - Sus ojos estaban rojos, salían lágrimas de ellos.

- ¿Qué pasa?

- Es mamá... ella tuvo un accidente, y está muriendo.

Miré a Memo. Sentí como si toda la sangre de mi cuerpo se pasara a mi cabeza, mi cuerpo empezó a pesar demásiado y no lo aguante, así que caí.

□ □ □ □ □ □

Cuando abrí los ojos, me encontraba adentro en la sala, acostado en el sofá, Eli y Guillermo estaban sentados a mi lado.

- Te desmayaste por 30 minutos - Habló Memo - ¿Estás bien?

- Eso creo, me duele un poco la cabeza.

- Te pegaste muy fuerte cuando caíste al piso, seguro tendrás un moretón.

- Eso creo - me tallé

- recordé lo que había pasado justo antes, me giré a mi hermana - ¿Qué le pasó a Mamá?

Estuvo seria por un momento, tenía la mirada pérdida, hasta que habló.

- Estábamos en casa esta mañana, hablábamos de tí, le decía que tenía que dejarte volver, tenía que aceptarte ya que eres su hijo, entonces empatamos llorar y a gritar, los vecinos nos escuchaban. Ella no quiso seguir discutiendo, salió por la puerta e intenté seguirla, estábamos tan enojadas que no nos dimos cuenta hacía dónde veíamos - Pausa. Se secó la lágrima que corría por su mejilla - Y entonces un auto venía muy rápido e iba a atropellarme y... mamá me se dió cuenta y corrió para empujarme. Entonces la atropelló a ella. Los vecinos se dieron cuenta y llamaron a una ambulancia, el auto sólo huyó.

Fue como si mi corazón se detuviera, el aire me empezó a faltar y las gotas de lágrimas no tardaron en salir.

- Llevame a verla - dije en el tono más serio que pude emitir, sentí que sílaba me quemaba la garganta.

Eli solo asintió.

□ □ □ □ □ □

Guillermo nos había llevado en su auto. Todo el camino me la pasé sin decir una sola palabra, de echo nadie dijo nada, ni si quiera se escuchaba el ruido del motor.

Llegamos al hospital, lo primero que hice fue preguntarle a la encargada por la habitación dónde se encontraba mi madre.

- Disculpe, estoy buscando el cuarto de Rose Owen.

- Es la habitación B16 - señaló con su brazo a su izquierda.

Agradecí con la cabeza. Mi hermana se quedó en la sala de espera mientras que Memo me acompañó hasta la puerta del cuarto.

Entré, estaba entubada, tenía conectado un tanque de oxígeno, parecía estar inconciente. Tenía moretones y heridas por todo el cuerpo.

- ¿Mamá? - me senté a un lado de la cama.

No daba señal de estar despierta, no sé si me escuchaba pero intentaría hablarle de todos modos.

- Escucha, siento mucho que estés así - tomé con mis dos manos la suya - Siento que no puedas aceptar cómo soy, pero está bien, a pesar de todo te amo, y sé que en el fondo tú no has dejado de amarme, porque tú eres mi madre y no puedes cambiar algo así - las lágrimas volvían, pero no me importó y las dejé salir.

- ¿Recuerdas hace 10 años? - continué - Cuando tenía yo  5 y papá murió, tú y Eli lloraron mucho, pero yo no, era muy pequeño y no entendía lo que era morir. Me acerqué a tí y te dije "No llores mamá, aún me tienes a mí" y me abrazaste. Pues ahora entiendo lo que es la muerte, y no quiero perderte, y aún quiero tenerte a tí.

Oí pasos que se aproximaban a la sala, sequé mis lágrimas y me levanté. Un doctor entró en la habitación.

- Disculpa, no puedes estar aquí. No está en condiciones de visitas.

- Ella es mi Madre - sentí algo de frío - ¿Se pondrá bien?

- Sufrió mucho daño, se fracturó los huesos de la cadera y los brazos, además de las cortadas en todo el cuerpo con las que llegó y los golpes en la cabeza; si el coche hubiera ido un poco más rápido probablemente no seguiría con vida. Le hicimos una cirugía para detener la hemorragia. Por el momento está estable, lo mejor que puedes hacer es ir a casa y rezar para que se recupere.

- Gracias por ser honesto.

Salí del cuarto y me dirigí a Memo que estaba esperando.

- ¿Qué sucedió?

- Está muy dañada, si el accidente hubiera sido un poco peor hubiera muerto. No quiero que se vaya, no quiero que me deje.

Guillermo me abrazó, mientra yo lloraba; al menos lo tenía a él, necesitaba a alguien que me abrazara como eĺ lo hacía, alguien que me hiciera sentir bien cuando nada lo estaba.

- Tranquilo, Danny, eso jamás pasará.

Si El Destino Lo Quiere...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora