V

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Una vuelta, dos, tres... una mirada al reloj en la mesita de noche, simplemente conciliar el sueño le era imposible, finalmente se había dado por vencido y miraba hacía el techo.

Y pensar que en menos de dos horas debía levantarse para ir al trabajo, con todo aquel griterío de escándalosos adolescentes, si ya tenía un tremendo dolor de cabeza, no quería imaginarse como sería cuando estuviera allá. Pocas veces le ocurría esto, cuando sus innumerables pensamientos le quitaban el sueño y no hacían nada más que confundirlo.

"¿Con qué cara voy a mirar a un alumno que ayudó en un asalto justo en frente de un prostíbulo, y que más encima luego invité a mi casa."

Aquello no paraba de darle vueltas en la cabeza.

"De seguro pensó que eres un maldito pervertido, claro, cualquiera se pensaría eso."

No le parecería extraño que el azabache no volviese a dirigirle la palabra. Si no hubiera sido por su gran descubrimiento de la noche no le hubiese importado tanto, pero no, ahora le carcomía la idea de que el azabache no le hablase.

Y es que, la extraña relación de alumno-profesor que había forjado con el pequeño, era una de las tantas razones por las que se levantaba cada mañana.

Sí, muchos podrán pensar que suena dramático, pero es que para Erwin, quién es un hombre muy amistoso y se lleva bien con todo el mundo, le cuesta realmente encontrar a alguien con quién sentirse verdaderamente a gusto. Por eso es que sus amigos se pueden contar con la palma de su mano.

*ring, ring, ring*

-No puede ser...

Antes de apagar la alarma pasó una de sus manos por su rostro y bostezó con ganas.

¿Y si llamaba para decir que se había enfermado?

No, no podía huir de su realidad, iría a la escuela e intentaría actuar lo más normal posible.

****

-No iré.-Repitió por tercera vez a la chica de lentes.

-¡Por favor! Es por una buena causa, anda, no seas aguafiestas.-Hanji no se daría por vencida, debía lograr que Levi asistiera aquella fiesta de la que se había hablado tanto durante la semana, y es que Petra le había pedido que le convenciera, finalmente se había armado de valor para admitir sus sentimientos hacía el azabache.

-¿Buena causa? Podría considerarlo si me dices.

-No puedo... ¡pero vamos, ya sabrás cuando estés allá!.-Exclamó animada golpeando su espalda.

-Agh, no, no pienso perder mi valioso tiempo en esas estupideces.

-Tú te lo pierdes enano aguafiestas.

Y sonó el timbre.

****

Andaba con un humor de perros, su cabeza dolía intensamente y sentía que faltaban años para ir a casa.

Le tocaba clases con el tercer año, y lo único que deseaba era no encontrarse con Ackerman.

Estaba sentado en la primera fila, y con una pequeña sonrisa burlona en su rostro, él simplemente le miró de vuelta con el ceño fruncido. ¿Acaso quería molestarle?

Gracias al cielo todo transcurrió con normalidad, ni ganas tenía de hablar ni levantarse, es por eso que mandó a sus estudiantes a hacer un pequeño ensayo.

-Despierta, hey.

-¿Mmh?

-Tsk, estúpido, ¿cómo puede quedarse dormido? ¡Hey!

Levi golpeo el brazo con el que Erwin estaba afirmando su cabeza e hizo que con un fuerte golpe despertara.

-¡Mier-... Levi ¿Qué pasó?

-Hace diez minutos te quedaste profundamente dormido y todos se fueron, agradece a que amenacé a los que te tomaron fotos.

-Gracias...

-¿Mala noche?

-Terrible.

-No habrías venido.

-No es tan fácil como tú crees mocoso, no soy como tú que falto cuando quiero.-Respondió irritado, algo de lo que Levi percató de inmediato.

-Tsk, allá tú viejo.-Y se fue.

Erwin intentó no darle tanta importancia y luego de un rato se fue a la sala de profesores.

****

"Claro, como si venir a este lugar no fuera una maldita pérdida de tiempo." Pateó una piedra.

¿Por qué le daba tantas vueltas al tema? Después de todo no era primera vez que un profesor le trataba mal, pero sí la de Erwin. Y odiaba el hecho de que le haya afectafo aunque sea un poco.

-¡Oyeeee! ¡Enano! ¿Cómo estamos para la noche?

-¿Qué parte de "no iré" no entendiste?

-Sólo te diré que aún hay tiempo para arrepentirse.

-Yo nunca me arrepiento de lo que digo.

-Bueno, bueno.

A veces Levi se preguntaba porqué era amigo de aquella chica, si es que así podía llamarle, ella una vez le dijo que era una persona interesante.

¿Qué tenía él de interesante?

Difícil saberlo, pero bueno, ya se había acostumbrado a la presencia de la cuatro ojos, y aunque jamás le diría, Hanji le agradaba.

Sumido en sus pensamientos finalmente tomó una decisión.

-Quizás considere ir.

-¿En serio? ¡Yeii!.-No pudo evitar lanzarse a abrazarlo con fuerza.

-Salte antes de que me arrepienta.

-Ya, ya, me tengo que ir ahora, debo ir a hablar con alguien.-Hanji se retiró dando pequeños saltitos de alegría.

Todos sabemos quién es ese alguien.

De verdad no sabía por qué había aceptado.

_______

¡Hola! ¿Qué tal?

Volví de nuevo :D

Dejen sus votos y comentarios, nos vemos <3

Corrígeme. [ eruri ] CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora