Parte 1

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Yoo Youngjae no era nada especial. Todo el mundo lo sabía. No tenía ningún rasgo o talento especial, no participaba en actividades o clubes, no tenía amigos. Era un chico normal, con notas ordinarias y una vida normal. Si él se describiera a sí mismo, con decir 'monótono' y 'aburrido' seria suficiente. 

'No deseado'. 

Eso es lo que pensaba. 

Incluso ahora nada especial estaba sucediendo. El aula estaba inusualmente tranquila. Todos miraban hacia abajo o hacia el reloj, esperando que el tiempo pasara. 

Youngjae estaba golpeando su pluma contra su escritorio suavemente. Había renunciado a tomar notas después que los primeros diez minutos de clase habían pasado. De todos modos, era sólo por hoy. Mañana prestaría más atención. 

Incluso si él quería hacer lo que se suponía que debía hacer como estudiante, no podía. Su concentración no estaba enfocada en el maestro o la pizarra que estaba llena de ecuaciones matemáticas. 

Los oídos del muchacho se alzaron ante un ruido repentino. Podía oírlos reír, reírse de algo. No sabía qué y realmente no quería saber. Todo lo que podía oír era su risa, el silencio de los otros estudiantes y el constante "tick tock" del reloj. 

Podía sentir esos ojos atravesando la parte posterior de su cabeza. Dejó de mover su pluma mientras sentía que el malestar crecía dentro de él.Miró el reloj, deseando que la campana sonara pronto. Sólo quería ir a casa. 

La impaciencia creció en él y comenzó a jugar con la pluma en su mano. ¿Era su imaginación o la risa se hizo más fuerte? No, no más fuerte.Podía sentir que se acercaba. Cerró los ojos, sintiendo el ruido justo al lado de su oído ... 

El timbre de la campana despertó a Youngjae. Él metió todo lo que estaba en su escritorio a su mochila con una velocidad inhumana. Salió corriendo del aula mientras luchaba con la cremallera de su mochila. 

Hizo girar el objeto alrededor de su hombro y lo sujetó sobre su espalda. Cogió las correas mientras trataba de salir del pasillo lleno de estudiantes. Cuanto antes saliera de allí, mejor. 

Corrió apresuradamente a la puerta y abandonó el recinto escolar.Una vez fuera, exhaló un profundo suspiro de alivio. Caminó sobre el pavimento vacío, mirando ocasionalmente detrás de él. 

Eran los primeros días de primavera y el aire frío del invierno todavía se detenía alrededor. Había algunos montones de nieve por ahí, pero la mayoría se había derretido. Los árboles estaban tratando de regenerar las hojas que habían perdido hace meses, mientras que las flores estaban tratando de crecer y florecer. La atmósfera fría, sin embargo, no los dejaba. 

Youngjae acurrucó su rostro en la bufanda demasiado grande que había envuelto alrededor de su cuello. La primavera y el otoño fueron sus estaciones favoritas. No había demasiado calor ni demasiado frío. El invierno no era necesariamente malo, mientras que el verano era definitivamente el peor.En el verano no era fácil ocultar las magulladuras y las cicatrices; él no fue a ninguna parte en las vacaciones, se quedó en la seguridad que su casa podía ofrecer. Pero cada vez que quería comprar algo en la tienda de conveniencia o simplemente dar un paseo por el parque (en la noche por supuesto) tenía que llevar camisas de manga larga y pantalones. 

Fue una mierda. 

Youngjae se perdió en sus pensamientos y su ritmo se hizo más lento sin que él se diera cuenta. 

Y entonces lo oyó. Sus ojos se abrieron y su aliento se detuvo. Reconocería ese sonido en cualquier parte. Se quedó paralizado. 'Ese odioso sonido'. Tragó el bulto que se había formado en su garganta. 'La risa'

Obsesionado [DAEJAE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora