No sé que es lo que pasa en este momento por tu cabeza, pero espero que no escuches mis pensamientos, estos que siempre se agitan al escuchar tu voz.
Que hipócrita, sin embargo.
Que estúpido, en todo caso.
Tus entrañas en una mano, tus ojos en la otra. Tus vicios en los míos, tu alma en mis trampas. Tu dosilidad, tu indomabilidad atrapadas en cápsulas que pretendo algún día probar.
Quiero tu sangre cubriendo mis heridas. Quiero tus armónicos manchando mis cuerdas, tus manos moviendo, asesinando mi voluntad. Quiero tu hipnosis y tu dolor. Quiero tu indiferencia y tus alientos y suspiros.A puñalazos pretendo quitar tu significado de mi mente.
No puedo evitar pensarte vulnerable, débil.
Dame tu amor y tu toxicidad.
Dame tus lágrimas y tu inocencia.
No deseo quererte, deseo corromperte.
Deseo drogarte hasta que no sepas tu nombre.
Deseo tu melodía, tu alma y tu belleza. Dame tu vida.
Dame tus obsesiones para convertirlas en mías.
Dame tu movimiento, tu cadencia y tus pasos.
Desármate, desmonta toda esa capa que no hace nada. Demencia, dame tu demencia.
Tu corazón, tus palpitaciones y tu electricidad.
Te quiero a mi lado, muerto cuanto antes.