Efímero

Lo que fue, lo que es, lo que será

Aunque no lo diga, aunque no lo demuestre, cada día te extraño, cada día te pienso,

No sabes lo difícil que es estar sin ti, no sabes el dolor que siento al no estar a tu lado y verte sonreír. Sí, no es imposible, pero preferiría que las cosas fueran como antes, increíbles.

Mirarte, sentirte, olerte, lo que más extraño, lo que desde abril he anhelado. Esos recuerdos llegan a mí, tal cual una estrella fugaz, pero eso son, simples recuerdos, los cuales ya no volverán, los cuales siempre he de cargar.

Que rápido pasa el tiempo, pero sin importar qué, mis sentimientos no ceden, te prefieren, no por necesidad, sino por felicidad.

Sí, peculiares fuimos, pero eso lo hacía bien, nos amábamos, pues aun te amo; eres el amor de mi vida, la mujer con la que soñaré el resto de mis días.

Lo que nace en pecado muere en pecado, tal vez eso fue lo que nos ocurrió, quizás ese fue nuestro amor, ¿Pero quién dice que no fuimos felices? Lo certifico, emanábamos amor, nuestros ojos resplandecían con gran ilusión.

Aún lloro, solo cuando lo necesito, un poco por tristeza, un poco por admiración.

Desde lejos te he visto, en lo que te has convertido; sonrió al hacerlo, la felicidad que siento es extraordinaria, verte crecer es mi alegría de día a día.

Prometo algo, pero tranquila, espero cumplirlo, uno de nuestros tantos sueños: caminar  el camino de Santiago de Compostela. Sé que no lo haremos juntos, pero te juro que cada pisada será pensando en ti, en todo lo que me toca vivir.