Al final

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Sasuke iba todo lo que daba hacia el hotel para poderle contar las atrocidades que querían hacerle, simplemente no podía permitirlo. Corrió hasta la suite del Rubio y toco contadas veces.

-¿QUÉ DEMONIOS QUIERES? -Abrió el Rubio, quién se veía horrible con una mascarilla verde. -Creí que llegarías más tarde, vete a tu cuarto. -Ya estaba dispuesto a cerrarle la puerta en la cara.

-¿No puedes desvelarte solo un poco? Esto es importante, en serio -detuvo la puerta.

-¡POR DIOS NO! Ya me dirán mañana mis fotógrafos que hiciste con Ino, así sabré si colgarte de los huevos o no, si me permites, ¡BUENAS NOCHES! -Iba a volver a cerrar la puerta

-¡Maldita sea deja de hacer eso! -se apoyaba mas en la puerta- ¡Es precisamente de Ino de quien vengo a hablarte, y aunque no lo creas hay mas personas involucradas hazme caso!

-¡Oh genial! Vienes aquí a declararte culpable de una mega orgía con Ino, buenas noches. -Azoto la puerta en su cara, era claro que si tenía una invasión de celos extrema.

-¿Mega orgia? -le tomo un momento reponerse del portazo- ¡Oye que mierda! -empezó a golpear con mas fuerza e insistencia la puerta- ¡Abre de una maldita vez! ¡Estoy preocupado por ti! ¡Maldito idiota!

-Mañana hablamos -Abrió la puerta- no hay nada más importante que mi sueño reparador, ser el jefe de miles de incompetentes es agotador, vete a dormir, tienes la mañana libre.

-¿Me estas llamando incompetente? No, espera, eso no es lo que importa aqui...no quiero la mañana libre quiero que me des unos segundos de tu sueño reparador, ¿Puedes?

-THATS ALL -azoto la puerta.

-¡MALDITA SEA! -siguio golpeando- ¡Te van a quitar el trabajo oh poderoso tirano! ¿Eso no te importa? -incluso pateaba la puerta.

A pesar de que pateara, golpeara y gritara, Naruto ya no escuchaba nada de eso, sólo volvió a su cama, se puso unos audífonos para escuchar música clásica, eso lo relajaba y des tensaba.

A la mañana siguiente, Naruto despertó tan fresco como una lechuga, se puso sus mejores galas, se perfumó de Perry Ellies, unas mancuernillas de oro, y sus zapatos de charol negros bien boleados. Abrió la puerta de su suite dispuesto al desayuno, pero se encontró con un estorboso bulto en la entrada.

-Ugh... -Lo pateo y siguió su camino, Sasuke sólo se limitó a un pequeño bufido y siguió durmiendo en el incómodo suelo.

Mas o menos media hora despues Sasuke desperto, lo primero que hizo fue levantarse para patear de nuevo la puerta, y solo descubrio que al parecer Naruto ya se habia ido...vio su reloj y si, era obvio que se habia ido y el iba tarde. Corrió hacia su habitación para arreglarse casi a la velocidad de la luz y bajar a la dichosa celebración, solo esperaba que no fuera demasiado tarde.

La fiesta estaba completamente amena, por todas partes había anuncios de Asuma, y por supuesto Naruto tan espléndido charlando cómodamente en su mesa y para su sorpresa con Itachi, a veces Naruto puede llegar a ser tan hipócrita, pero con esa sonrisa tan particularmente suya, todos podrían jurar que disfrutaba de la compañía de Itachi.

-¡Sasuke! -Lo llamo Naruto. -Ven.

-¿Ya podemos hablar? -le dijo en voz baja en cuanto lo tuvo cerca.

-Te equivocaste. Pusiste a tu hermano a mi lado. -Le susurro sin quitar la sonrisa de su rostro

-¿Que? Pero recuerdo haber escrito sobre su nombre, lo se porque en ese momento estaba...-hizo memoria un momento- oh maldición quite el de otro...eso es tu culpa fue en ese momento en que tu ya sabes -le respondió haciendo énfasis en las últimas palabras.

The Kyubi Wears PradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora