Capítulo #7 Sólo eres una prostituta que se cree asesina.

111 13 1
                                    



Podía ver por el retrovisor que no Noah venía en un auto Lotus Elise Series 2; era de color amarillo, algo... sencillo para su personalidad, pero se veía muy bien. Mi Celular no dejaba de sonar por mensajes de señor Caputo, me tenía mamada con sus mensajitos cursis como...

"Te extraño cariño"

"No dejo de pensar en ti"

"Nos vemos hoy a las 7:00 PM en goût pour votre goût"

"Quiero hacerte gritar como aquella noche"

¿Este pendejo no sabe diferenciar entres fingir y de verdad? Pensé; volteo mis ojos al seguir escuchando mi celular sonar, así que me decidí en ponerlo en silencio; cuando cojo este veo mensajes del jefe, miro por un momento la carretera para no chocar y abro el chat del jefe

Jerfecito

-Todo salió al plan, parece que el alcalde hará lo que sea por cuidar a su hija; buen trabajo Bladenaches, me siento orgulloso de ti Rubia

4:30 PM

Moria de la felicidad, mi plan sale a la perfección y el jefe se siente orgulloso de mí, nada puede quitarme esta felicidad; suena mi teléfono, miro y es Caputo. Bueno... si puede a ver algo que me quite mi felicidad y es este mamarracho, polvo de gallo.

Al llegar a mi casa veo que mi mejor amiga no ha llegado, así que tomo la opción de que si lo perdonó "mucha pendeja..." dice mi mente. Al cerrar la puerta siento algo que lo impide y es el pie de Noah.

Noah: - Ni creas que te dejaré solita, mi trabajo es cuidarte. – dice sonriendo mientras pasa por mi lado.

Aria – No necesito de tus cuidados, puedo cuidarme yo solita, Gracias... - digo con cara de fastidio; al ver que no sale de mi casa, me resigno cerrando la puerta y quitando me las botas y dejándolas a un lado.

Noah – Si fuera así mi padre no me hubiera dicho que te cuidará, niña tonta – Este hijo de su jodida madre... ¡Pues claro! Si la mama es una sonsa y su marido y la mosa se la pasan por la galleta, como no iba a sacar este chimpancé esa parte. Le hago una sonrisa forzada mientras entro a mi cuarto.

Noah - No te demores, tu casa es muy aburrida y quiero que esto de cuidarte se acabe. –

Busco que ponerme, algo fresco y cómodo, que como me quite la ropa sea fácil ponérmela y salir corriendo de ahí en mi auto. Escogí unos shorts de tiro alto de color azul, un camibuso corto, manga larga color blanco que se pegaba a mí abdomen; también unas sandalias de plataforma color blanco.

Me di una ducha de cuarenta minutos, no me había bañado en la mañana y quería estar fresca. Lave mi cabello, depile ciertas partes que eso no les debería de importar, pero pueden imaginarse cuales; al salir de la ducha busque ropa interior color blanco, tenía que combinar para que no se fuera a ver con el camibuso.

Secaba mi cabello con el secador cuando escuché cierto ruido afuera, apagué el secador por un momento para escuchar con más atención, pero solo escuché la puerta cerrarse de un buen portazo; sonreí como loca, por fin se había ido el cabeza hueca

Me hice una coleta alta, pinté mis cejas y ojos, polvo, rubor, delineación de mis bellos ojos, un lindo labial rosa pálido matte, una deliciosa fragancia que me destacaba entre todos, olor a fresa y mango; me veía al espejo y me sentía hermosa, mi sonrisa duro poco al saber que no era más que para estar presentable en un trabajo que odio.

Al salir del baño, escucho la puerta de mi cuarto abrirse, cojo mi arma y con cautela me acerco a la puerta de mi cuarto para abrirla y ver quien es

"ya llegué" escucho a Stefanya decir, me relajo y busco entre mi desorden mi celular para mirar la hora.

"Ya me voy" escuché tras la puerta cerrarse. Esta mamona ni entro a ver si estaba viva, muerta, andaba follando, nada... pero me va a oír cuando vuelva, anda muy relajada desde que anda con ese man que tiene de novio. Vuelvo a escuchar la puerta abrirse, ahora si le diría a Stefanya que se quedará en casa; al salir veo a Noah con su ceño fruncido, mirando hacía el suelo con las manos hechas puños. De estas salía sangre, pero ¿qué pasó ahora?

Aria - ¿Chimpancé que hiciste? – me acercó a él para poder ver que tenía sus manos y poder curarlas, pero Noah me aparta de bruscamente de su lado

Noah – No me toques... eres una cualquiera, y odio que me toquen, así que no me toques ni me dirijas la palabra – Miro sorprendida

Aria - ¿Qué animal te picó pendejo? A mí me respeta, mucho problema se me va de mi casa – señalo la puerta

Noah - ¿Qué no eres unas cualquiera? Pues mira como me recibes, en poca ropa; antes eras un amor y mucho más, pero veo que te convertiste en una fácil. Sólo eres una prostituta que se cree asesina. – En todo el corazón, sabía cuál era mi punto débil, pero no voy a dejar que me pisotee, no otra vez, no más de él. sus ojos mostraban odio, rencor, celos, furia, deseo, pero aun así mantuve mi compostura y lista para atacar sabiamente.

Aria – No voy a pelear contigo, por favor te retiras ahora mismo de mi apartamento, no quiero que un burro me venga hablar de orejas, cuando las tiene más largas que yo – di la vuelta para volver a mi cuarto cuando escucho un puño en la pared.

"te amo y a la vez te odio" escuché mal o... Noah dijo que me ¿amaba? No puse atención; al llegar a la entrada de mi cuarto siento sus brazos, como me abraza, su respiración en mi cuello; su abrazo se volvió más fuerte, mis ojos se volvieron cataratas. Me solté feo de él, no lo quiero cerca, ni que me toque, nada que venga de él.

Aria - ¡SUELTAME MALDITO IMBECIL! NO ME TOQUES, NI ME HABLES NI NADA – dije súper enojada, que hacía tratándome mal para luego venir a tocarme y todo eso. – TE SALES DE MI CASA AHORA MISMO, Y SI ÉL JEFE TE QUIERE TENER COMO MI PERRO GUARDIAN ESPERAS AFUERA DEL EDIFICIO EN TU AUTO. – estaba muy alterada, pero me daba más coraje que estuviera con cara de pendejo sin mover un músculo, así que lo saque de mi casa, pero fue extraño que no se moviera ni protestara.

Entré a mi cuarto, me vestí, limpié rastro de lágrimas y retoqué mi maquillaje; no dejaba de pensar en todo lo que acababa de pasar, algo tan simple y no salía de mi mente. Bajé y saludé al chico que cuidaba el edificio, cuando miré para el auto de Noah este miraba feo, pero no a mí, sino que al chico.

¿Será que anda...? No, él dijo que nada de nada con una "prostituta" ¿pero si anda sintiendo todavía algo.? Tengo que confirmarlo

Holaaaaaa <3 <3 "corazones verdes" perdón por la demora, pero ando con poca inspiración.

Voten

Comenten

Seguir

Añadir a biblioteca

Besos

Amor de prostitutaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora