CAMPAMENTO DE YOUTUBERS

CAPITULO 113: PREGNANT

No entendía el rostro de Samuel, pasaron como 2 minutos y el todavía no decía nada, su cara era de ¿Enojo? ¿Shock? ¿Tristeza? ¿Felicidad?, este hombre me va a matar con sus hormonas, aun estaba parada enfrente de el esperando alguna respuesta, ¿Sera como Jack que ira a tomar con su hermano?, estaba algo nerviosa, ni yo me lo creo pero ayer lo comprobé en la noche, ademas de que los síntomas eran claros pero quería ser discreta.

¿Desde cuando lo sabes? -Estaba aun sorprendido y al fin se digno a hablar-

Ayer lo confirme -Mierda, mis manos estaban sudando-

¿Quien mas lo sabes? -Seguía con la expresión-

Solo tu y yo -acaricie mi vientre-

Soltó un suspiro y se sentó un rato, creo que decírselo así de golpe no es una buena idea.

¿Todo esta bien Samuel? -Estaba preocupada con su reacción-

Aquí es donde me manda a la mierda por arruinar su vida -Pensé- 

Ven aquí -dijo dándome la mano-

Me jalo y quede enfrente de el parada, mi mano temblaba por los nervios y el miedo me ahogaba.

Perdón por ponerme así, yo me imaginaba cosas que no quería, tengo miedo a perderte -agarro mi mano- ¿Por que estas temblando? -frunció el ceño y me miro-

Tengo miedo a que digas que he arruinado tu vida -evite su mirada-

Hey mírame -decía dulce- Nunca haz arruinado mi vida, tu eres lo mejor que me ha pasado y no me imagino otro futuro con alguien mas, y este bebe a super mejorado mi vida por que es de la mujer que amo y que sabe que ella es quien me robo el corazón desde aquel campamento -decía acariciando al bebe-

No podía con la lagrimas que salían, cada palabra era hermoso, malditas hormonas. Me atrajo a el y me abrazo, quito mis lagrimas y dejo un beso en mis labios también en mi vientre.

Te amo Samuel -acaricie su mejilla-

Te amo ___ -dejo otro beso-

Ahora que los tengo a los dos, los protegeré demasiado, y no dejare que les hagan daño, y mas a este pequeño o pequeña -no soltaba mi panza-

Estaba en las piernas de Samuel y me recosté en su hombro oliendo su perfume muy varonil, estaba cansada, estaba muy feliz por este momento, ahora  se que todo acabara muy bien.

¿Quieres que te lleve a la cama? -me susurro  mientras acariciaba mi cabello-

Quiero estar solo contigo -me apegue mas a el-

Debes descansar, mejor dicho, los dos tienen que descansar -empezó a moverse -

Se acomodo y me cargo hasta la cama, me acomode agarrando almohadas para así sentir una sabana taparme.

Descansen -dijo desde el marco de la puerta-

Sonreí y cerré lentamente mis ojos, sintiendo una gran relajación.

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A la mañana siguiente Samuel no dejaba de acariciar el vientre pero no me molestaba, al verlo sus ojos soltaban un brillo, estaba tan ilusionado de ser padre. estábamos aun en la cama, no me quería mover, estaba cansada  pero no tenia sueño.

¿Ya quieres que te traiga el desayuno? -Sus ojos chocaron con los míos-

Samuel, te amo, pero ya es la quinta vez que me preguntas esos, todavía soy capaz de ir a buscar el desayuno -reí -