Capítulo 23: POR LA CUERDA FLOJA

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Lucy's POV:

Seguía grabando como Noa jugaba en el columpio junto con su padre.

-Ya deberían haber llegado- Me dijo Louis preocupado por aquellos cuatro-. Ya es de noche. ¿Y si les ha pasado algo?

En ese momento a Louis le sonó el móvil que le di en la casa del pueblo. Lo sacó corriendo sabiendo que sería uno de ellos.

-¿Dónde estáis?- Preguntó Louis.

-No creo que tardes en vernos- Oí a Isa con la voz acelerada.

Louis y yo miramos dirección al bosque, por donde se habían ido, hice un poco de zoom con la cámara del móvil y pude ver a Oliver, Isa, Elliot y Sandra corriendo mientras salían del bosque, pero no me esperaba ver que detrás suya les seguía como un centenar de zombies hambrientos.

-¡Pero que cojones...!- Exclamó Louis con el móvil en la oreja.

-Calculo cinco minutos para coger las cosas y pirarnos- Dijo Isa.

Alan, que lo vio, bajó a Noa del columpio y sin decir nosotros nada, tan solo con la mirada lo dijimos todos. No dudamos en correr dentro de la casa y avisar a los demás, la abuela no tenía ni idea de lo que pasaba pero no tenía intención de dejar la casa, le explicamos que se acercaban cosas, cosas muy malas y que nos matarían si no nos íbamos ya. Cogimos nuestras mochilas y las armas.

Tina's POV:

-¡Quita bixo!- Escuché decir a Sandra que estaba fuera.

Eso significaba que ya estaban aquí, ya no hay tiempo, nos piramos ya sin despedirnos de la granja. Cuando iba por el comedor para dirigirme a la salida Simón me empujó en el momento en que un zombie rompió un cristal y entró abalanzado, él le pego un tiro en la cabeza. Si no hubiera sido empujada, hubiera sido devorada. Miré a Simón fijamente.

-Un gracias no es mucho pedir.- Dijo.

Rodeé los ojos levantándome del suelo y saliendo con él de la casa y con Lucy que apareció. Simón abrió la puerta principal, pero la cerró igual de rápido o más, ya que toda una manada quiso entrar, dimos media vuelta pero muchos de los zombies entraron por la ventana que había sido rota y no nos quedaba otra opción que subir por las escaleras. Sentía como los zombies me rozaban mi atmosfera. Nos metimos en una de las habitaciones y cerramos la puerta pero no nos dio tiempo a poner nada para asegurarla, tan solo salimos por la ventana que llevaba al tejado mientras los devora hombres entraban en la habitación.

-¡Vamos, por aquí!- Señaló Simón una cuerda que llevaba al granero.

Él se colgó como un perezoso en un árbol, Lucy y yo hicimos los mismo antes de que los zombies subieran al tejado, los que se encontraban debajo extendían los brazos para intentar alcanzarnos pero la única posibilidad que tenían de cogernos era si la cuerda se rompía. A medida que pasábamos por la cuerda dejaba de estar tensa por culpa de nuestro peso pero, por suerte pudimos pasar a la parte de arriba del granero. Cuando llegamos vimos a Isa, Sandra, Elliot, Oliver, Noa, Alan y el perro.

-¿Habéis visto a Sergio y a mi hermano?- Preguntó Isa con la katana de Louis en la mano y al ver que nadie más pasaba por la cuerda.

Negamos los tres con la cabeza. Se escucharon a los zombies golpear por todas partes del granero, pareciera que lo echaran abajo con nosotros dentro.

Isa's POV:

-¿Qué hacemos ahora?- Preguntó Simón.

-¿Y si nos escondemos bajo la paja?- Propuso Lucy mientras seguía grabando.

-Tal vez nos descubran, no sabemos si también se guían por el olor aparte de por el sonido.

-Todo es probar, no podemos quedarnos aquí sin hacer nada- Dijo Lucy.

-Pues luchemos- Dijo Alan.

-¿Has visto cuántos son?- Dijo Elliot.

Mientras discutíamos qué hacer se comenzaron a escuchar disparos de una ametralladora, me asomé y vi que era Sergio conduciendo un tractor mientras aplastaba a los zombies que podía como si fuera un tanque mientras que Louis disparaba para despejar el granero para así poder escapar. Bajamos a la parte de abajo y aprovechamos para salir, cuando me giré pude ver una montaña de zombies tapando el tractor.

-¡Papá!- Gritó Sandra.

Mierda... Louis, no.

Elliot cogió a Sandra para alejarla de esa escena, al igual que yo sentí la mano de Oliver coger mi muñeca y llevarme lo más lejos de ahí. Corrimos sin parar y cuando ya no se escuchaban los gruñidos y el alboroto de los zombies Sandra pidió parar, pero la manera en que lo dijo no sabría decir si lloraba o estaba agotada, pero luego cuando se tiró de rodillas al suelo lo supe, lloraba. Ver así a Sandra me hizo llorar a mi, sabiendo que mi hermano y su padre han dado su vida para salvarnos, pero lo que me mata es saber que el estúpido de Louis ya no va a estar para consolarme o para insultarme o para protegerme.

Sandra y yo parecíamos dos magdalenas de tanto llorar, ahora mismo nos consolaban nuestras lágrimas y nuestro llanto.

Esto no es algo que nos debilite, sino algo que nos hace más fuerte.

High School Zombie ApocalypseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora