Luciana [EN CREACIÓN]

día 40

...En algun lugar del basto occidente. 1953

A pesar de la  tormenta que azotaba la fría noche de ese 7 de enero, los troncos de los árboles aún no se habían desplomado junto con sus ramas por el fuerte soplar del viento que se avecinaba con agua granizada y su paso dejaba un zumbido espectral que recorría la carretera .El zumbido se hacía pequeño al filtrarse por un angosto agujero que yacía en la ventana medio cerrada del automóvil de la Dra Elena.
Mientas el guardabarros​ del auto se llenaba de pantano y hojas que los árboles abandonaban por culpa del agresivo viento que las arrancaba de sus ramas  y que las llantas del automóvil se encargaban de triturar  cual moledora de carne; Elena, con un pañuelo,que  horas antes había probado la sal marina de sus propias lágrimas, limpiaba el exceso de humedad en el parabrisas, el cual permanecía dando visibilidad por unos cuantos minutos hacia el sublime paisaje perfectamente aterrador que atrajo la mirada de Elena quien,  hipnotizada observaba como la curva cerrada se alineaba con el borde del barranco que conducía no solo al abismo, sino a una muerte segura.
Elena,  de repente a se detuvo y toscamente colocó el freno de emergencia. Acto que no hubiese sido mala idea realizar kilómetros antes. Sumida en su propia prisa había pasado por alto su cordura misma, en un vaivén de sentimientos encontrados en los que predominaba la ira y la impotencia , dejó de lado su característica tranquilidad.
En medio de la tormenta eléctrica que solo dejaba a la vista el auto que solía ser color blanco , ahora repleto de pantano y hojas adheridas al parabrisas y  por absolutamente todas las placas metálicas que lo componían, el fuerte destello de luz que emanaba los faroles del mismo daba tranquilidad , pero a la misma vez viese quien lo viese , temor, ya que era lo único de emitía luz en medio de la oscura noche.
Elena retiró de su cuello un hermoso pañuelo  de seda y estampados de rosas color ocre, con  sus manos que parecían porcelana. sobre el lienzo de sus delicados dedos se encontraba un muy elegante diseño de manicure que , en aquel entonces, solo las damas adineradas podían darse el gusto de poseer. Elena llevó las manos hacia  la delicada  cutis de su rostro y con sus dedos índice realizó un paseo desde los lagrimales hasta el extremo de sus grises ojos ,que por circunstancias desconocidas dejaban brotar un torbellino de agua mezclada con maquillaje que se  esparcía  por su  rostro color canela. Unos 8 segundos después y sin aún disminuir la agitada ventisca  , se desprendió de su garganta un quejido desgarrador de como si le estuviesen arrancando el alma. Cabizbaja , dejando que el suave flequillo rozara sus cejas , golpeó fuertemente con su brazo izquierdo el volante del auto dando así paso  al seco sonido de la bocina.

Mientras tanto en las instalaciones del  CREH.

- Procedan a la transportación del paciente 901 hacia la sala de crisis-
Diciendo esto, La voz de una mujer se manifestó por un intercomunicador que inundó con un tenue eco los pasillos del ala este.
7 hombres limpiamente uniformados con ropajes blancos que les cubrían hasta la cabeza y calzado del mismo color , marchaban de dos en dos , encabezados por un sujeto que vestía el mismo patrón de ropa , con un detalle meramente marcado sobre los demás. Sobre su hombro derecho yacía una marca significativa , un círculo color rojo que denotaba liderazgo sobre los demás , este hombre , según se podía apreciar, lo que le hacía falta de altura , le sobraba en autoridad. Después de caminar por un pasillo medianamente amplio  , el que encabezaba dicha marcha giró sin restricciones  hacia su lado izquierdo encontrándose con ahora un pasillo de unos 15 m de longitud , y como si de su propia casa se tratase, se sacó de su bolsillo derecho una tarjeta blanca con franja violeta   la cual deslizó por la ranura de un dispositivo rectangular que estaba pegado a la pared de  una puerta color gris , la puerta se abrió por la mitad dejando sonar un leve pitido emitido por aquel dispositivo que , dio paso a Frederick y a la banda de lacayos que le seguían fielmente.