Mi corazón latía a mil por hora, mis manos ya estaban empañando el teléfono que había tomado porque no paraban de sudar. Mis ojos brillaban. Mi piernas temblaban y ¿Mi mente? Totalmente bloqueada, dando vueltas sin parar.
Ya lo podía ver, era él. Era Cameron Dallas sonriendo. Sentado en el escenario viéndome directamente. Lo había visto tanto en el show, pero Jamás tan cerca, como para ver de que color rosa eran sus labios, en las fotos, tiende a ser diferentes colores.
- Oye, no soy una estúpida. A cualquiera le puede suceder, ¿No? - dijo Cameron, es lo que puedo recordar de la primera vez que hablamos. Bueno, fue la primera vez que él me habló y yo me desmaye.
«Desmayada resulte y en su camerino desperté»
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No fue un sueño.
RomantikFue así como el sueño se volvió realidad. Conocí al verdadero Cameron y ahora sé que si todos lo conocieran como yo, sería mejor la idea de él.