Era la mañana del domingo. Algunos rayos del sol entraban por las pesadas cortinas de la habitación de Shiroki. El despertador sonó haciendo que el peliblanco despertara.
-Aaagh... Maldita luz –dijo mientras giraba su cuerpo para quedar acostado de lado- Me pregunto si aún habrá curry para el desay-... -Shiroki no pudo evitar pensar en lo ocurrido el día anterior, pensar en Takumi - Un momento –pensó- ahora él y yo somos..¡¿ pa-pa-pareja?!.. ¿o quizás yo me hago ideas raras?...
Llegó el lunes, Takumi como de costumbre ya se encontraba en el salón. Miró su reloj y observó que ya eran 7:55-
-pff –suspiró- seguro que hoy también llegará tarde. Ahora que lo pienso, no hemos hablado desde el sábado.
El joven castaño decidió salir un momento del aula de clases para ver si podía ver a Shiroki llegar. Caminó por el pasillo hacia las escaleras para dirigirse hacia el patio frontal de la escuela mientras con la mirada trataba de encontrar a su amigo.
Siguió caminando por un momento y cuando se estaba dando por vencido, dio media vuelta y pudo alcanzar a ver que entre unas jardineras, un bulto no muy grande se movía. Takumi se dirigió hasta aquél punto y ahí pudo ver a Shiroki leyendo un comic.
-¿Qué crees que haces? –dijo Takumi sorprendiendo al peliblanco-
-A-AH!, Takumi!
-¿Llegaste hoy temprano?, ¿por qué no has entrado al salón?
-Oh... bueno... me gusta el aire fresco hahaha –respondió Shiroki un poco nervioso-
-... Ah, vale. El timbre de la escuela está por sonar, deberíamos entrar ya a nuestra aula o nos pasará lo mismo del primer día.
Ambos entraron a la clase, durante esta, Shiroki evitó a toda costa cualquier intercambio de palabras o miradas con Takumi a pesar de que sus asientos se encontraban uno al lado del otro.
Llegó el almuerzo, como de costumbre Takumi y Shiroki subieron a la azotea de la escuela para comer, pero la situación seguía casi igual ya que solo habían intercambiado escasas palabras en el transcurso de lo que iba del día.
Al llegar a su lugar de comer, los dos sacaron sus almuerzos. Hubo un silencio incómodo hasta que...
-Shiroki –dijo Takumi-
-D-Dime
-¿Por qué has estado evitándome?
-Ah... ha-hahaha ¿de qué hablas Takumi?
-Es evidente que lo has estad haciendo.
-Nada de eso, solo-...
-¿Qué somos Shiroki? –interrumpió Takumi-
-No sé a qué te refieres –respondió-
Sin pensarlo dos veces, Takumi tacleó a su amigo quedando sobre él y a la vez clavando una mirada fija.
-¡waa!, ¿qué demonios hace-..
-Descuida, nadie puede vernos desde aquí. Shiroki, dime, ¿fueron verdaderos esas cosas que dijiste el sábado? Puedes arrepentirte si quieres.
-Yo... Takumi, yo... -Shiroki guardó un silencio absoluto-
Takumi creyó entenderlo todo. Se levantó, tomó su caja de obento y continuó diciendo:
-Está bien. Creo que debo irme, lamento todo lo sucedi-..
-¡Takumi! –replicó Shiroki- ...No... no me has dejado contestar!, idiota.
Para el castaño fue una sorpresa ver que el rostro de su amigo luciera tan rojo como la luz de un semáforo en alto. Tomó de nuevo asiento a un lado del peliblanco y lo escuchó.
-Yo... no soy bueno para estas cosas. No puedo ser tan sincero como tú, Takumi. Supongo que soy un fiasco para el tema del amor hahaha. Lamento haber estado así durante estas horas.La razón de mi comportamiento de hoy... bueno... por alguna razón, no pude evitar estar nervioso con solo pensar que hoy te vería, no tenía el valor suficiente para entrar al salón por la mañana y saludarte. El corazón me latía tan fuerte que sentí que se me saldría del pecho. Yo... Takumi lo sient-..
Takumi interrumpió a Shiroki con un beso en la frente mientras que con su mano izquierda acariciaba su mejilla.
-Gracias, Shiroki. Esto es suficiente.
-Takumi... idiota.
-¿Uh?, ¿por qué me llamas así?
-Porque tan solo con un beso como ese, con una caricia así, haces que mi corazón se tranquilice...AH!, de nuevo me haces decir esa clase de cosas!!
-No hay de qué avergonzarse. Me haces muy feliz.
El timbre de la escuela sonó para anunciar el fin del almuerzo y dar inicio a las clases nuevamente. Ambos caminaron hacia las escaleras hasta que de pronto Shiroki se quedó parado.
-¿Qué pasa? –Preguntó Takumi-
-Bueno, con todo esto, yo... quisiera saber si tú y yo... somos... no-no-no-..
-¿Novios?
-Sí.
-Bueno, creí que estaba claro. Lo somos, ¿o no quieres eso?
-Claro que sí...
-Entonces ya no lo dudes más. –dijo Takumi quien se acercó a Shiroki para esta vez darle un beso en los labios- Después veremos lo de la boda.
-¡¿BODA?! –gritó Shioki-
-Hahaha, shh! No grites, es un chiste... aún.
Shiroki guardó silencio unos segundos y luego dijo:
-Aunque el blanco no te quedaría mal
-¿Ah? –dijo Takumi-
-Hahaha nada, vámonos.
Continuaron su camino hasta el aula y antes de entrar ambos se miraros y se sonrieron el uno al otro.
¿Al fin el inicio de esta relación?
ESTÁS LEYENDO
Destellos del Corazón
FanfictionTakumi y Shiroki, dos grandes amigos de la infancia se encuentran por iniciar el segundo año de preparatoria, sin embargo, nunca se imaginaron que durante ese momento florecería un nuevo sentimiento que ambos llevaban escondido. -Deberíamos besarno...