El internado de los lobos - Jung Hoseok

×Capítulo 11×

Ya era sábado, me desperté para ducharme y vestirme, a las 10am los chicos pasarán a por mi para desayunar y jugar el partido.
Desayunamos tranquilamente y fuimos hacia el gimnasio para elegir los grupos y jugar.
El primer grupo era Nam, Hoseok, Tae y Jungkook.
El segundo era Jin, Suga, Jimin y yo. Teníamos a Suga así que llevábamos algo ventaja.
Ya estábamos a la mitad del partido, íbamos ganando por dos puntos, Hoseok pasó por mi lado con el balón sonriendo ladino, no logré quitársela, era más rápido que yo, estaba demasiado desentrenada. Antes de que Hoseok canastara en nuestra canasta Suga se la consiguió robar, Jin me dijo que cubrieramos para que no pasaran los demás y Suga pueda canastar a su canasta tranquilamente, no me di cuenta de que Suga había dicho mi nombre y dos segundos después vi el balón a un centímetro de mi cara, caí de espaldas y perdí el conocimiento unos segundos.
Los chicos no paraban de decir mi nombre y por lo que pude ver en la ralla fina de mis casi por completos cerrados ojos Hoseok no paraba de agitarme con desesperación.
Al minuto reaccioné por fin y con mareo me senté.

-Ah... Dios-Me quejé llevando mi mano a mi cabeza.

-‎Joder, June lo siento muchísimo, a sido sin querer, yo no...-Se disculpaba Suga.

-‎Tranquilo Suga, sé que no era tu intención.

-‎¿Estás bien June?-Preguntó Jin preocupado.

-‎Sí, creo que debería irme a mi habitación y tumbarme a descansar con algo frío en la frente.

-‎Va a ser lo mejor, ayudadme a montarla a caballito en mi espalda-Dijo Hoseok y todos lo ayudaron y con cuidado me montaron encima de el.

Llegamos a mi habitación y Suga fue a por hielo, después de unos minutos ya me encontraba mejor pero seguía mareada.

-Ya está mejor, puedo encargarme yo, vosotros podéis iros a jugar-Habló Hoseok.

-‎La dejamos en tus manos Jhope, si necesitáis algo llamarnos-Dijo Nam cerrando la puerta de mi habitación.

-‎Vaya golpe te has llevado princesa, tenías la cara roja por el balón.

-‎Ya... Seguro me veía horrible, sudada y roja.

-‎Para mí siempre estás bien-Sonrió y yo también-Además te veías muy sexy-Sonrió esta vez de lado.

-‎¡Hoseok!-Me puse aún más roja por lo que acababa de decir.

-‎Mira, estás igual de roja que antes, yo diría que más-Cogí el cojín que mantenía mi cabeza y se lo lancé, se rió-Es broma.

Se hizo un silencio, incómodo pero a la vez no.

-¿Ya tienes una respuesta? Ya sabes, de mi propuesta-Rompió el silencio.

-‎Creo que sí, aunque no me consigo aclarar bien, cada sentimiento es nuevo para mi así que no se si es bueno o es malo... Pero creo que más o menos lo entiendo.

-‎¿Entonces?-Se oía impaciente.

-‎Creo que me gustas Hoseok.

-‎No sabes lo que me alegran oír esas palabras de tu boca-Sonrió, le devolví la sonrisa-Entonces significa que podríamos llegar a ser algo ¿no?

-‎Sí, pero tiempo al tiempo Hoseok.

-‎Claro, esperaré todo lo que tenga que esperar-Le hice un lado en la cama y indiqué que se tumbara a mi lado a lo que lo hizo en un instante, lo abracé con fuerza y minutos después me quede dormida sobre su pecho.

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Ya era domingo por la noche, en la mañana jugó Jaebum o como lo llamaban los amigos JB que por lo visto era el líder del grupo de Jackson contra el grupo de Shownu cual conocía solo de vista o de hablar muy escaso en alguna clase en la final, ganaron Jaebum y los demás y después lo celebraron.
Ahora estaba cenando con los chicos, mañana empezaba la luna llena y estaba de los nervios, tanto que ni probé bocado de mi kimchi. Después los chicos me dejaron en mi habitación.

-June, ten mucho cuidado estos tres días, si necesitas ayuda grita lo más fuerte que puedas, intentaremos no estar muy lejos-Me intentaba tranquilizar Nam.

-‎Sí, si tengo algún problema me transformaré, no os preocupéis.

-‎Nos vemos el jueves June, descansa-Dijo Jungkook y todos se despidieron y marcharon menos Hoseok.

-‎Bebé, por favor si necesitas ayuda no dudes en gritar mi nombre. De todas maneras no creo que ninguno de los alumnos vayan a hacer nada aquí, pero pueden entrar lobos peligrosos de fuera.

-‎Si cariño, no hay problema.

-‎Espero verte el jueves sana y salva-Asentí y me besó la frente, según yo la relación iba bien pero Hoseok no tenía mucha confianza y iba despacio, pero a este paso nos iban a dar las campanas. Me puse de puntillas, no me sacaba mucho así que no era un gran trabajo acercarme a su cara y lo besé en los labios durante unos segundos, me miró sorprendido después de el beso pero sonrió, me volvió a abrazar y se fue agitando su mano contento y algo rojizo.

Ya me podía preparar porque estos tres días iban a ser un completo aburrimiento, seguro hablaría con Ale, estaría con el móvil jugando ya que Tae me había recomendado algunos juegos, viendo animes y dramas que me había puesto Jungkook en una lista y sobretodo dormiría.