Love me ❥Creek [PAUSADA]

❥Capítulo 3; Miedo

Ya era Lunes por la mañana, y nuestro quedó rubio estaba rumbo a la escuela, por fin sus padres le habían permitido reanudar sus clases, con la condición de no dejar de tomar su medicamento claro.

Al llegar fue directo al salón de clases, aún era temprano por lo que no había mucha gente que digamos, de hecho, solo estaba Wendy. Ella siempre llegaba temprano puesto que es la presidenta de la clase y su deber es asegurarse que todo este en orden para cuando lleguen sus compañeros de clase.

-Hola Wendy.- Saludó el rubio a la par que entraba al aula.

-¡Oh, Buenos días Tweek!- Exclamó con su actitud positiva de siempre.-Que sorpresa verte tan temprano

-A-Ah si, hoy no quería llegar tarde.- Dejó su mochila en su respectivo asiento y se acercó a Wendy para mirarla con curiosidad.-Eh, Wendy. .

-¿Si?

-¿Q-Qué le haces a la banca de Eric?

-¡Oh!- Se reincorporó de golpe y soltó una leve risa.-Digamos que en la clase pasada discutimos sobre un tema muy serio, pero como siempre él me llevaba la contraria, y esto no se va a quedar así.-Una sonrisa maliciosa se formó en su rostro.

-Ese hijo de puta me las va a pagar.- Frunció ligeramente el ceño y apretó los puños, haciendo que Tweek retrocediera, a veces Wendy le daba miedo.

-Bueno. . Yo debo ir al baño, ¡Nos vemos!- Salió del aula para comenzar a caminar por los pasillos, sin un destino en particular.

Los pasillos estaban casi vacíos, realmente había llegado temprano. Soltó un suspiro y se dirigió a los baños. Al entrar se miró en el espejo; Su piel pálida y sus ojeras debajo de sus ojos delataban su falta de sueño. Suspiró y tras llenar sus manos con agua la puso en su rostro.

-Bien Tweek, calmate. Tomaste tus pastillas, eso significa que no habrá alucinaciones.- trató de tranquilizarse, a veces solían darle ataques de pánico y no quería aquello apenas iniciando la mañana.

Luego de secarse la cara con papel, salió del lugar para volver al aula, al entrar, pudo notar que varios chicos ya habían llegado, entre ellos; Kyle, Jimmy, Bebe y Kevin.

Los saludó como todos los días, con la excepción de que Kyle se acercó para ver porque había faltado tanto a clases, Tweek se limito a decir que estaba enfermo (Cosa que no era mentira) No quería preocupar a sus amigos, porque sí, Kyle es al único del team Stan al que le habla, bueno, a el y a Kenny.

-Oh bueno, me alegra que estés bien.- El judío le dedicó una ligera sonrisa y palmeó su hombro.-Bien, nos vemos luego, siento que alguien me fulmina con la mirada.

El rubio ladeó la cabeza solo para poder ver a un Craig parado solo unos metros tras de Broflovski.

-Todo tuyo amigo.- Dijo Kyle con su típica sonrisa mientras pasaba por un costado de Craig.

-¡Gah! C-Craig. . Buenos días. .- El pelinegro sin decir nada se sentó en el pupitre delante del de Tweek, luego de prácticamente dejar caer su mochila al suelo, dio media vuelta sobre su asiento para quedar frente a frente con el rubio, mirando fijamente las orbes verdosas del joven.

Un escalofrío recorrió la espalda de Tweek al sentir aquella fría mirada, comenzando a sentirse intimidado.

-Eh. . ¿C-Craig?

-Buenos días, Honey.- Y de un momento a otro, aquella penetrante mirada se ablandó y una ligera sonrisa ladeada adorno el rostro del pelinegro.

Una expresión de alivio se formó en el rostro de Tweek.-¡No vuelvas a hacer eso, estúpido! P-Pensé que estabas molesto por algo!-Exclamó con los ojos cerrados, dándole un leve golpe en el hombro a Craig, el cual, rió ante aquello soltando un simple "Lo siento"

-¿Como estas?- El pelinegro recargó su cabeza en la palma de su mano, sin apartar en ningún momento la mirada del rostro contrario.

-¡Oh! Yo estoy m-muy bien, ¿y tú? - Claramente el rubio mentía, "bien" era la palabra menos indicada para describir su situación.

-Hum. .- Arqueó una ceja no muy convencido-Bien.- Sin más, dio media vuelta, acomodándose en su pupitre, dejando confundido a Tweek, aveces Craig era todo un misterio.

Pocos minutos después la campana sonó y los demás alumnos entraron al aula junto con el profesor, la primera clase era química, aburrida para la mayoría y Tweek no era la excepción.

[. . .]

Solo faltaban dos horas para que las clases terminasen, el receso fue como siempre, se sentó con su team en la cafetería y charlaron sobre temas irrelevantes. Nada fuera de lo común. Su mirada se desvío hasta el reloj situado arriba de la pizarra, lamentablemente esa clase era la de Historia, y Craig estaba en Geografía, eran las únicas materias en las que no coincidían, así Tweek no tenía con quien mandarse papelitos.

De hecho, lo único graciosos que pasó en el día fue el hecho que Cartman se quedara pegado a su silla y al intentar levantarse su pantalón se rompió, es divertido verlo enojado mientras maldice a todo el mundo por burlarse.

Las horas pasaron lentas, pero en cuanto el bendito timbre sonó un suspiro de alivio escapó de sus labios, minutos mas encerrado allí y seguro terminaría por dormirse.

Sin perder tiempo se encaminó a la salida, o bueno, eso planeaba. Los dolores punzantes en su cabeza se hicieron presentes y Tweek negó repetidas veces con la cabeza. No ahora, por favor.

-Ngh. .- Un quejido de dolor salió de su boca y llevó una mano a su cabeza, cosa que llamó la atención de algunos chicos que pasaban por ese pasillo por lo que a paso rápido fue hasta los baños.

Luego de cerciorarse que no haya nadie, se paró frente al espejo y abrió al grifo, estaba por mojarse la cara de no ser porque a través del espejo comenzó a ver como todo detrás de el se tornaba oscuro y una silueta conocida para él estaba parado detrás, mirándole fijamente con sus ojos vacíos. Un escalofrío recorrió todo el cuerpo de Tweek y por reflejo volteo rápido hacía atrás. No había nada. Miró de nuevo al espejo y tampoco había nada.

-Oh Jesús - Nuevamente el miedo lo invadió, no era la primera vez que alucinaba, pero normalmente solo escuchaba voces. Cerró el grifo que aun yacía abierto y un suspiro tembloroso salió de su boca.

Se comenzó a sentir mareado así que optó por sentarse en el suelo, abrió su mochila e intentó sacar el frasco de pastillas. Al parecer tomar solo una ya no era suficiente. Llevó una a su boca con las manos temblando y bebió agua de su botella.

Pero la pastilla antes de ayudarle en algo solo hizo que se sintiese peor, se levantó del suelo con dificultad, apoyándose de la pared para no caer de bruces contra el suelo. De la nada comenzó a sentirse presionado, como si las paredes se comprimiesen, haciéndolo sentir sofocado. Su vista se tornó borrosa y aquellas sombras aparecieron, mirándolo desde un rincón. Se recargó en la fría pared, comenzando a resbalarse por esta hasta quedar nuevamente en el suelo.

Sentía que iba a morir, tenía miedo, mucho miedo.

Lo último que pudo divisar fue a alguien entrando por la puerta del baño y luego sintió como era sacudido por los hombros. No pudo distinguir de quien se trataba, en ese momento no sabia que era realidad y que no. Y sin previo aviso, terminó por cerrar los ojos y caer desmayado en los brazos ajenos.

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Agarrense porque en el próximo capitulo se viene el dramaaaaa