La princesa de Negan• (Editando)

C08 "Puedes dejar de gritar"

Al despertar ya que me sentía un poco mejor decidí recorrer el lugar.

Abrí la puerta, ya que no había nadie vigilando salí y fui a caminar por ahí.

La verdad ni idea a dónde iba pero yo seguía caminando como si conociera el lugar.

Atravesé la puerta, veía hombres a lo lejos matando errantes. Aprovechando que ninguno me vio me senté en el pasto. Disfrutando de el aire y la vista.

De pronto vi muchas personas juntándose en lo que sería la entrada del Santuario. Entre esas personas estaba el hombre del bate.

Me acerqué un poco y pude escuchar perfectamente que decía.

- Salgan a buscarla, ahora. - ordenó.

- Señor, ya van a salir dos grupos a buscarla. - le informó uno.

- Salgan más grupos, ahora.-
siguió ordenando, al parecer es el líder.

- ¿A quién buscamos? - preguntó uno de sus hombre, desorientado.

- A la joven que llegó ayer con el jefe. - le contestó otro.

¿Me busca a mí?

- Salgan ah...-.

Lo Interrumpí. - Podrías dejar de gritar, estás espantando a los pajaritos. - le dije sonriendo.

- Con que ahí estabas.- dijo acercándose con su sonrisa.

- Si tanto espectáculo ¿porque no estaba en la habitación?.-. Pregunté riendo por la situación.

Hizo una seña con su mano y los hombres que estaban a punto de ir a buscarme comenzaron a entrar de nuevo al edificio.

- ¿Qué haces afuera de la habitación? - preguntó

- Quería tomar aire fresco... - le contesté comenzando a caminar al lugar donde estaban antes.

- Debes descansar.-

- Ya me cansé de estar acostada.- no sé porque razón soné como una niña pequeña.

- Entonces sígueme pequeña. - dijo con su típica sonrisa y comenzó a caminar.

No sé porque razón lo comencé a seguir. Estábamos entrando de nuevo a la fábrica, ya estando afuera me fijé bien en el lugar.

- ¿Hace mucho están acá? - pregunté, simplemente me daba curiosidad todo.

- Algo así. - respondió.

- ¿Siempre fuiste el líder? - pregunté.

- ¿Y quién más lo sería sino? - dijo ya con su extraña sonrisa.

- ¿Qué haremos? - cuestione ya me estaba molestando la herida.

- ¿Te duele? - veía mis gestos.

- No, solo me molesta. - le contesté.

- Negan. - lo llamo un tipo de baja estatura y un poco relleno llegó a su lado cansado.

- ¿Qué pasa gordo Joey? - le pregunto sonriendo.

- Eh.. tenemos un pequeño problema. - me miraba sin disimulo.

- Habla ahora. - ordenó serio, ¿se habrá dado cuenta?

- Una de sus esposa se quiso sacar la vida y ahora está amenazando a sus otras esposas. - hablo rápido.

Esposas.

- ¿Y qué quieres que haga?.- al parecer le daba gracia lo que pasaba. Se dio la vuelta y se dirigió hacia mí. - Acompáñame.

- Mm no gracias. - dije dándome media vuelta y comencé a caminar, hacia donde sea.

Alguien sostuvo mi brazo.
- Dije que me acompañes nena. - sentía su respiración en mi cuello.

-❤️-

*Editado*

Luana, cambio y fuera. -.