TU

6

Duran demasiado los dias cuando no tienes ilusión, duran demasiado las tardes cuando nadie te espera con una copa, duran demasiado los minutos cuando no te importan.
No he escrito mucho cuando  unas gotas mojan mi cuaderno haciendo que me levante de la plaza y me dirigí corriendo hacia el bar mas cercano, lo cual me lleva un poco y en ese lapso de tiempo acabo empapada.
Entro de golpe en un bar con apariencia antigua con muy poca gente a la cual no me paro a mirar, solo quiero un cafe americano para que mi cuerpo se caliente. En la barra se encuentra un hombre ya mas adulto y se lo pido con mucha amabilidad y me dice que me lo traerá a la mesa. Me dirijo a una mesa situada enfrente de una lumbre y me acomodo para continuar mi escrito.
Duran demasiado los dias o a lo mejor duran demasiado poco, duran lo suficiente para que el tiempo que necesito mantenerme en este mundo  sea lentamente tortuoso.
No tarda mucho el camarero en traerme el cafe y se lo agradezco, pero otra vez me han interrumpido mii escrito y ahora el hilo  de lo que escribía lo he perdido, así que me dedico a mirar a la chimenea que hace formas que embrujan mis ojos y me llevan a esos dias donde me tocabas la guitarra esos dias en los que te preocupabas tanto por mi temperatura, esos dias. Había vuelto y no sabia si buscarte o dejarte con tu vida, con esa vida que yo había decidido abandonar en su dia, ¿cuantas veces me dijiste que eras tu el que había vuelto y que te quedarías toda la vida?, ¿que pasaba ahora que había sido yo la que se había ido ? Tenia claras muy pocas cosas no sabia lo que quería, ni si eras tu al que busque, nadie te espera en los aeropuertos para siempre, esa era una verdad que dañaba mis pensamientos y los hacia tristes y sobrios, ya no recordaba esa risa que me  provocabas ya no quería sentir ese frío en mi corazon.
Se oía aun la lluvia caer fuera, se sentía el calor que te daba la chimenea al quemar los troncos  y había una mirada que llevaba posada en mi persona mucho tiempo y yo no sabia por que. No me ose mirar ni quise reconocer los sentimientos que se despertaban en mi. En ese momento mi teléfono vibró dejándome ver un mensaje < ¿donde estas?  No tardes en volver que se hace de noche >. Pensé que realmente había pasado mucho tiempo y tenia que marcharme así que deje el dinero que me costaba el cafe y me levante, pero por el rabillo del ojo pude captar una imagen, un fantasma que en su dia fue mi ángel de la guardia sentado en una silla observando mis movimientos. No tarde en salir agitada de ese bar y me volví a encontrar una lluvia que mojaba mi ropa y me daba frío, así que corrí hacia el hotel con un sentimiento de dejar algo sin resolver ahí atrás.
No tarde en llegar asique me dedique a cenar en mi habitación tapada hasta arriba del edredón y observaba en la tele un programa al que ya hacia como media hora o mas que no le hacia ni caso, pus por mi mente no dejaban de pasarse imágenes que trasformaban mi estado de animo, el dia iba tocando a su fin y desde la gran ventana podia ver como las negras nubes se iban transformando en mas negros y empezaban a aparecer pequeños destellos de luz acompañados de estruendos que sacudían todos los sentimientos posibles, la lluvia empezaba otra vez a hacerse mas fuerte y golpeaba agitadamente los cristales, para mi era una vista tan bella que encogía mi corazon y por fin después de tanto tiempo le causaba cierta felicidad, en mi refugio me mantenía caliente y por mi cabeza pasaban imágenes de la gente corriendo al estar cayéndole tal chaparrón pero por mi cabeza apareció su nombre (Rafael) pensé en buscarlo en facebook para saber com se encontraba, asique cogí mi móvil y teclee su nombre y lo encontré, sonriendo con ese traje tan típico suyo de abogado, seguí mirando fotos y no se le veía mal, se le veía mas mayor con ciertas canas en su pelo, con las expresiones algo mas marcadas en su piel, pero aun veía esos ojos verdes que tanto me habían gustado, ese color de piel tan Moreno y tan suyo, ahi estaba y aqui estaba yo, de vuelta al lugar donde un día había llorado tanto que mi alma se había partido en mil pedazos y nunca mas pude reconstruir.
Mi cena constaba de una sopa de cebolla rica y calentita y un plato de pasta  con tomate y queso derretido por el.
Cuando termine de cenar quise darme una ducha para despejar todos esos pensamientos que tenia y en el espejo del baño observe una mujer cambiada con el cuerpo marcado de dibujos perennes con una cara mas fina y unos rasgos mas marcados, se podia ver en mi que tambien el tiempo había  pasado por mi, entre en la ducha y deje que el agua caliente pasara por toda mi piel y la calentara, no tarde en salir y ponerme el albornoz que había colgado de una percha cerca de la ducha, cuando me seque decidí sentarme a observar como la noche se había apoderado de la cuidad y como la plaza se  encontraba lleno de gente corriendo hacia todos lados intentando no mojarse , esto me hizo mucha gracia pues  se encontraban como pequeñas hormigas, pero delante de esa imagen algo capto mi atención un hombre con un traje un andar tan característico un porte tan estudiado y aprendido, capto tanto mi atención que daba la apariencia de ser alguien que ya conocía y que lo conocía muy bien, te giraste y ahi estabas, el amor de mi vida ahi se encontraba, el .