Gabriela
-Perfil y apagar
Murmure y cuando por fin vi la pantalla de apagar cuando colgué mi celular después de la llamada con Liam, me sentí como una cobarde por no haberlo hecho en persona, pero la verdad había entrado en pánico. En la hora del almuerzo me entró la curiosidad y se me ocurrió teclear su nombre en Google, y ¡oh por Dios!, sí que había información acerca de él. Su biografía era tan malditamente larga que ni siquiera alcance a leer todos los apartados. Lo busque en Twitter y casi escupo mi café al ver que tenía 16 millones de seguidores ¡16! Yo solo tengo 120 y no hace falta decir que de esos 120, 20 son familiares. Había como un número sin fin de imágenes de él, desde que era un puberto hasta ahora que tiene 24 años, al menos es de mi edad. Pero eso no viene al caso, el caso es que es demasiado popular, yo pensé que era un famoso inexistente, de esos de los que pueden seguir teniendo casi una vida normal. Pero no, Liam Payne no es un hombre normal. Y la verdad es que como no escucho ese tipo de música, no estaba consciente del éxito que tiene la banda. Son como los malditos Back Street Boys del año 2014. Es como si de repente fueran los 90’s y estuviera saliendo con Nick Carter ¡NICK CARTER! Eso es ridículo, claro que no estoy preparada para eso. Si mi intención era mantener este embarazo lo más discreto posible, salir con Liam no va ayudar a completar ese cometido. Si la estúpida de Maggie no hubiera llegado tan tarde anoche y no se hubiera despertado tan tarde en la mañana, hubiera podido platicare y ella me hubiera dicho en lo que me metía. ¡Haa! Quería darme unas cachetadas a mí misma por ser tan estúpida pero en ese momento entra la Srita. Boyle en el baño de maestros donde me escondía y hago como si me estuviera arreglando el cuello de mi camisa. La Srita. Boyle es la maestra de ciencias, todo el mundo la respeta y no le discute dos veces las cosas, algunos dicen que es por su eminente cerebro y otros dicen que es por su horrible aliento a tabaco que puedes percibir a 2 metros de distancia. Sin exagerar.
-Hoy luces mucho mejor que ayer querida –me dice mientras se lava las manos en el lavabo y yo saco el antibacterial de mi bolsa para oler algo mejor que su aliento.
-Sí, gracias, de seguro solo era uno de esos virus que entran y salen por si solos –le digo riéndome nerviosamente
-Sí, estoy segura que solo fue eso. Hoy tu color ha regresado a tus mejillas y los ojos te brillan de una manera especial. ¿No me digas que estás enamorada? –abro y cierro mi boca varias veces mientras escojo sabiamente las palabras para contestarle y tratando de no respirar muy profundo porque podría vomitarle en sus zapatos.
-No, no, claro que no –le digo moviendo mi mano para no darle importancia a su comentario- debe ser que estoy feliz porque hoy me siento mucho mejor –le digo oliendo despistadamente el olor del antibacterial de fresas que me puse en mis manos
-Claro, debe de ser eso –sonríe y le sonrío de regreso y sin querer alargar la incómoda conversación, me disculpo del baño con la excusa de que voy tarde a mi clase de Español.
Las clases se habían pasado en un abrir y cerrar de ojos, cuando cheque la hora en el reloj del salón, me di cuenta que faltaban 30 minutos para el timbre de salida. ¡Bingo! Al menos algo estaba saliendo bien en mi día. Cuando llegara a la casa iba a esperar a Maggie para regañarla por no haberme dicho que tipo de estrella era con la que estúpidamente me acosté hace casi 2 meses. Para matar el tiempo mientras mi alumnos realizaban un ensayo sobre el capítulo del libro que les toco leer. Decidí pedirles los trabajos del portafolio para empezar a vaciar la información antes de aplicar el primer parcial de este semestre.
-Katherine, ¿puedes traer tu portafolio para revisar tus trabajos? –mi alumna asiente y me trae su portafolio, se queda al lado de mi por cualquier duda que tenga en sus trabajos. Cuando termino con ella viene la siguiente en la lista y así me enrolo en una actividad de revisión sin prestar atención a nada más, más que a la revisión de portafolios. Lo que más me gusta de este colegio es la disciplina de los alumnos. Mientras los tengas con trabajo, ellos no se paran de su banco ni empiezan a hacer desorden, solo se escucha un leve murmurar de sus pláticas. Habían pasado 10 minutos y estaba revisando el portafolio de Olivia cuando escucho un golpe en la puerta.
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The Pop Star & The English Teacher
FanfictionGabriela corre de su pasado en América y trata de hacer una vida nueva en Londres, donde todo es más grande, más exótico y más ruidoso. Una noche decidida a dar un paso para dejar atrás el pasado, conoce a un famoso cantante de una de las bandas juv...