Mi Tentación, Mi Perdición.

Capítulo V

Ambos chicos se dirigen a la parte trasera de la escuela, ahí había una pequeña casa de madera; ellos se iban acercando hacia el lugar. La joven se sintió como una niña con su juguete nuevo, sentía una emoción indescriptible, observaba como Andrey introducia la llave que anteriormente había sacado de la bolsa de su pantalón, al abrir la cerradura del candado; empuja la puerta.

-Después de ti- hace un ademán con la mano, haciéndose a un lado.

Inna rápidamente entra y se sorprende con lo que ve. Era un invernadero, en el que había diferente tipo de vegetación.

-¿Cómo es que hay todo tipo de plantas?- pregunta la chica con asombro.

-Le puedes llamar magia- le guiña el ojo y toma la mano de la pelirroja.

Inna no puede ignorar lo frío de sus manos y esta vez no se queda con la duda.

-¿Por qué tienes frías las manos? Se justificaría si estuviésemos en invierno, pero es verano.- lo mira fijamente a los ojos.

-Quizá en otra ocasión pueda confiarte ese secreto- responde y sin apartar los ojos de la joven, lleva la palma de su mano a los labios, donde deposita un beso.

-Pareces un caballero del siglo pasado- se burla ante el acto que el chico acababa de hacer.

-Podría ser- sonríe de medio lado.

Inna sintió un cosquilleo ante esa acción y no puedo evitar sentirse nerviosa.

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-¿Y bien?- Habla un hombre con mirada penetrante, quien tenía a un hombre del cuello; mismo que apenas y podía tocar el piso.

-No t-te voy a d-decir nada- responde con dificultad.

-Te daré una última oportunidad, ¿Donde está la chica?- con la mano que tenía libre se rascaba la mejilla.

-Vete al infierno- logró decir.

-Creo que hoy, será otro quien lo visite-

Dicho esto atraviesa el pecho del hombre con la mano y lo suelta; el hombre cae de rodillas y no obstante aquel que lo había atacado le corta la cabeza provocando que el cuerpo degollado comenzara a hacerse polvo.

-Hay noticias señor Simon- habla un sujeto que aparece de la nada.

El hombre lamía los restos de sangre que había quedado en su mano y se voltea para quedar frente a un joven de cabello azulado y ojos negros; alto y delgado.

-Espero que sean buenas noticias Ian- sonríe de manera siniestra.

-Los rastreadores me han informado que los vieron en Rusia- informa.

-Si, eso es verdad... Voy a necesitar a alguien que esté cerca- Lo mira fijamente. -Quiero que salgas mañana a primera hora, si la encuentras; me mantienes informado- dicho esto se aleja.

-Si señor Simon- dice por último y desaparece.

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-¿Qué te pareció el recorrido?- pregunta Andrey con una sonrisa.

-Todo me pareció magnífico- sonaba muy emocionada.

-Me alegra que te haya gustado-

-Creo que valió la pena el habernos saltado la clase anterior- aparece un ligero rubor en sus mejillas.

Los chicos ya se encontraban dentro del aula, extrañamente para Inna; Andrey estaba en todas las clases en las que ella estaba.
Cuando por fin finalizaron las clases, todos los alumnos toman sus cosas y comienzan a vaciar las aulas, Inna se sentía emocionada pues había hecho amistad con Rossela y Margaret; dos chicas que venían de Inglaterra.
La pelirroja aún se encontraba guardando sus pertenencias, en eso suena su móvil.