Viaje interminable.

Capitulo 1

Después de un largo, mejor bien dicho larguísimo, viaje ya habíamos llegado a Londres. Mi querido Londres, como lo había echado de menos.

Cata y yo habíamos hablado de todo lo que le diria a Liam y por mucho que le pudiera doler (no creo que le importe mucho lo que pienso yo) se lo diria igual. Mis palabras podian sonar un poco crueles pero eran pura verdad.

Estábamos buscando el coche de Cata, el cual hacia cuatro dias que estaba aparcado aquí, al encontrarlo pusimos las maletas en el maletero y subímos dentro para ir a su casa donde pasaria una temporada.

Había dormido dentro del avión pero seguia cansada, en Londres estaba cayendo el sol eran las 07:00 pm, así que podria ir a dormir después de la visita a Liam.

Cata empezó a conducir mientras yo contemplaba por la ventana el precioso paisaje tan familiar y a la vez tan olvidado de esa preciosa ciudad.

-Sigue igual que siempre, sabes.

-Lo se, pero lo he echado mucho de menos, ahí todo es tan diferente.

Seguimos nuestro viaje.

La verdad es que Cata conducia muy bien para hacer tan poco que se había sacado el carned.

Pasado cinco minutos empezamos a ver esas calles que para mi eran tan familiares y que tantas veces habia corrído y patinado por ellas.

Giramos un par de veces pasando de largo la casa de Cata.

Los nervios me subieron a la garganta al volver a ver esa casa, parecia como si nada hubiera cambiado, como si todo fuera igual que antes y nunca me hubiera ido.

-Para el coche aquí.-le dije cuando estubiemos a tres casas de la de Liam, y antes tambien mia.-prefiero que no te vea directamente, dentro del coche no te reconocera y así no sabra donde estoy.-le expliqué luego de que ella frenara.

-Estas segura de que quieres hacerlo?-asentí convencida de mi misma-Pues, mucha suerte.

-La necesitaré-respire fuertemente y salí del coche.

No mire atras pues sabia que si lo hacia me meteria corriendo dentro del coche otra vez.

Caminé decidida la casa hasta quedar frente a ella, volví a respirar y toqué el timbre.

Esperé unos segundos y  escuché unos pasos que se acercaban a la puerta lentamente y al pararse  esta se abrió dejandome ver así a ese chico de ojos avellana.

La cara de Liam al verme no fue nada más que pura sorpresa y confución.

-Judit...

Evidentemente, eso era todo lo que podia decir luego de seis largos meses, pero lo preferia así, yo hablaria por los dos.

-Sorprendido Payne?-no esperé respuesta y continue- Ya han pasado seis meses, quien lo diria? Parecia ayer cuando yo vivia aquí contigo, cuando me dijiste que me esperarias y que me querias. Que ironia, no has podido cumplir con ninguna de las dos.-reí-Te llamé y esperé a que me contestaras algun mensaje, pero no, no respondiste. Al principio pensaba que era algo normal pero a las tres semanas me cansé y lugo recibí esa llamada... La única llamada tuya y era para decirme que ya estas con otra. Pues te diré una cosa, el chico que estaba conmigo era Adam, el hijo de Marta, y no es mi novio, pero el si sabe cumplir sus promesas cuando le dice a alguien que jamas le dejara. Me hiciste sentir como una mierda, al principio pensaba que había hecho algo mal, pero no era así. Lloré por ti y no se porque, porque tu no vales la pena. Al final me he alegrado de que Marta ganara el juicio, así he podido ver la clase de persona que eres.-me di la vuelta y empecé a caminar pero luego recordé otra cosa-Por cierto, esto es tuyo-le lancé las camisetas que le había quitado y volví a mirarlo, parecia como si estubiera aguantando las ganas de llorar yo en cambio no llore todo lo que tenia era rabia hacia el.-Esto ha sido lo único con lo que he podido contar de tu parte.

Ahora si, era hora de volver con Cata.