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Milena observaba a su novio salir del baño y prepararse mientras ella se cruzaba de piernas en la cama y lo miraba con sorpresa, no terminaba de creer lo que él le estaba pidiendo

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Milena observaba a su novio salir del baño y prepararse mientras ella se cruzaba de piernas en la cama y lo miraba con sorpresa, no terminaba de creer lo que él le estaba pidiendo.

—A ver, Gerar, creo que no estoy entendiendo bien esto que me estás diciendo. ¿Quieres que finja ser la novia de un personaje famoso por un año? —inquirió mientras negaba con la cabeza.

—Mile, amor, necesito alguien de confianza, es un proyecto muy grande y nada puede salir mal. Si no funciona estaré hundido, ¿lo entiendes? —dijo Gerardo mientras se colocaba el bóxer negro y los calcetines.

—Lo entiendo, pero entonces, ¿para qué te metes en una cosa así? ¿Si hay tantos riesgos? —inquirió la muchacha.

—Porque cuanto mayor es el riesgo, mayor será la ganancia, Mile. ¿No lo entiendes? Si esto sale bien seremos millonarios, podré renunciar y crear mi propia agencia y tú serás la modelo principal. ¿Lo ves? El sueño de ambos se hará realidad —afirmó acercándose para besarla en la frente.

—¿Y qué es lo que se supone que tengo que hacer? —preguntó Milena ante la jugosa idea de ser una modelo famosa.

—Solo fingir que eres la novia de Luciano Armele, tomaremos fotos y las subiremos a una cuenta de Instagram que ya he creado —comentó mientras se ponía una camisa celeste y se iba prendiendo los botones.

—¿Luciano Armele? ¿Dices que voy a conocer a Luciano Armele? —inquirió con emoción.

—Exacto, no solo lo conocerás, sino que fingirás ser su novia —añadió con una sonrisa—. Serás la envidia de todas las mujeres del país, qué digo del país, ¡del mundo entero!

Milena lo pensó, era cierto, Luciano Armele era hermoso por donde se lo viera, y la verdad era que la sola idea de estar cerca de él le generaba cosquillas en el cuerpo.

—Pero, ¿y nosotros? Si pretendo ser novia de Luciano, deberé estar con él, acompañarlo a lugares públicos y esas cosas, ¿no?

—Cierto. Y tendremos que sacrificarnos por un tiempo, bebé, todo sea por un futuro prometedor para ambos, mucho dinero y el trabajo de nuestros sueños. Luciano está dispuesto a pagar lo que yo le pida, y si sale bien, podré incluso pedir más. Además, tú cobrarás también tu parte, te harás conocida y tendrás un lugar en el mundo del modelaje que tanto ansías. ¿Lo ves? El plan es perfecto, Mile. Y no  dejaremos de vernos, solo nos cuidaremos para que nadie nos descubra —añadió con un guiño.

—No sé, no estoy muy convencida —dudó Milena—. ¿Y si no funciona? ¿Y si no nos llevamos bien?

—Mile, tranquila, ¿sí? Haremos que funcione. ¿Acaso no eres actriz? Solo finge que estás en una gran obra de teatro o una buena película —añadió—. Y disfruta de la fama.

—¿No te molesta que finja ser la novia de otro hombre? —preguntó entonces la muchacha.

—Es homosexual, Mile, no hay ningún peligro —rio con ironía.

La pareja IMperfectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora