Pov: NAMI
Ya no me decías nada cuando nos cruzábamos y si yo intentaba acercarme te limitabas a dar media vuelta como si no me hubieras visto.
Yo no quería sentirme como una idiota detrás de ti, Zoro, preguntando por tu inexplicable cabreo pero... no soportaba lo que me estabas haciendo. ¿Qué te hice para merecer ese trato? Porque en mi planeta a eso se le llama Ley del Hielo. Y eso es de capullos. ¿Oíste?
Y si fuera poco, las pocas y necesarias palabras que dejabas salir de tu boca con las que te dirigías a mí me golpeaban como si mi nombre no mereciera ni mención, y eso me hacía sentir tan inferior y tan poco importante en tu vida... Qué ingenuidad por mi parte, ¿verdad? Pues yo aparte de considerarte uno de mis queridos nakamas, te idolatré por ser uno de mis valientes héroes que me liberaron de Arlong, desde siempre, en silencio...
Hipócrita. ¿Cómo que dejaste de mirarme? ¿Acaso fuiste tan ingenuo al pensar que yo no sabía acerca de esas miradas lascivas con las que antes no dudabas en recorrer mi espalda cada vez que me daba la vuelta?
Lo culminante fue cuando Robin, mi amiga, me comentó sobre vuestros encuentros carnales.
Qué tan impresentable te volviste.
Todo se hizo un cúmulo en mi interior. El estómago se me revolvía. Alguna lágrima me surcaba las mejillas cada noche que Robin abandonaba el camarote de chicas. No entendía nada, por más que intentara me era imposible. Temblaba de la humillación... Me llamaba la atención el tono con el que te dirigías a ella, lo cordial, y aunque suene inverosímil, lo caballero que se te notaba con ella en ocasiones.
¿Por qué tanto contraste conmigo?
Fuiste el epítome de la ruina humana por dentro y por fuera.
Me hiciste sentir de lo peor, dejaste de hablarme sin dar motivos algunos, me reemplazaste por mi amiga y de verdad de la buena me hiciste creer que yo tuve la culpa de... ¿de qué exactamente?
Ya no había lugar para esas bromas que hubo entre nosotros, esos cálidos abrazos que nos dimos que seguramente para ti solamente fueron un elenco más de camaradería pero que para mí significaron algo más. Gracias a esos antiguos momentos, ordené paso a paso mis sentimientos, algo que me costó orgullo y tiempo. Había creído que tal vez tú y yo... Claro que ya no, porque ya toda esa admiración la echaste tú solito por la borda, nunca mejor dicho.
Mis ojos se acostumbraron a no llorar más por ti. Para mi alivio, en esos días Luffy quiso estar casi todas las horas a mi lado.
Yo podía hacer de mi capitán alguien tan especial como tú hiciste de Robin. No por venganza, sino por darle una oportunidad a quien llenaba mis días de alegría.
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AMARGA RELACIÓN (ZoroxNami)
FanfictionConfesiones y memorias sobre el amor tan desgarrador por el que vivieron. No es un cuento de hadas, esta es la verdadera historia entre la navegante y el espadachín. Donde hubo amistad y fe ahora solo permanecerán la pena y el dolor. Todo por celos...