Seremos Idiotas, Pero No Estamos Infectados | SIPNEI ｢CANCELADA」

Día Z+1 0:12 A.m.

Narra Fede:

Ya es de noche y todavía no hay ni rastro de mis amigos. Me refugié con las dos chicas en el techo de una casa.

-¿Estás seguro de que están vivos?-Me preguntó Alex.

Yo la miré bastante enojado.

-Juan está bien, estoy seguro, y el grupo ya debe de haberse encontrado con él.

Miré hacia la escuela, y ahí estaban los zombies, caminando por el patio. ¿Por qué se fueron?

-¿Vamos a buscarlos?-Me preguntó la peliverde.

Yo miré la calle del otro lado de la escuela y sonreí.

-No, yo voy a dejar que ellos me busquen a mí.

-¿Sos estúpido?-Me preguntó Alex muy enojada.

-Si, soy estúpido, pero no estoy infectado-Le respondí con una sonrisa inmensa.

Alex seguía enojada, me miraba de brazos cruzados.

-¿Qué vamos a hacer hasta que nos encuentren?-Preguntó Gumi.

-No se, pero puedo decir otra cosa-Le respondí riendo.

-¿Qué cosa?-Preguntó Alex sin cambiar su expresión de enojo.

-Que estás más plana que una tabla-Dije riendo.

Alex se acercó y me dio un cachetón del que me voy a acordar toda mi vida. Y continuó pegandome.

-¡Perdón! ¡Tregua! ¡Paz y amor!-Empecé a gritarle para que dejara de pegarme.

Gumi no paraba de reírse, se nota lo "buena" que es para ayudar.

-Baka-Dijo Alex cuando se calmó.

-No soy una vaca-Dije riendo.

-Baka de idiota, con B y K-Me aclaró Gumi.

-Esas cosas de raritos no van conmigo, de eso hablan con Juan.

Gumi me sonrió, pero Alex seguía enojada.

Abrí la mochila y saqué el paquete de galletas. Las chicas comenzaron a mirarme como leonas apenas lo vieron.

-¿Tanta hambre tienen?-Les pregunté.

Ambas asintieron y me arrebataron el paquete.

Me quedé mirandolas, hasta que escuché unas voces que venían de la calle, por lo que me acerqué a escuchar.

-¿El chico ése va a sobrevivir?-Preguntó un hombre.

-Sí, parecía débil pero seguro que se las arregla-Le respondió una mujer

-Más le vale devolverme mi bate, estúpida amabilidad-Se metió un chico.

Me asomé y pude ver al trío, un hombre pelinegro de unos 40, una mujer castaña de la misma edad y un chico pelinegro de 18, más o menos.

Y entonces Gumi se apareció de la nada.

-¡Hola!-Los saludó.

Las tres personas nos miraron extrañados, pero al ver a la cosplayer se relajaron.

-¡Hola! ¿Podemos subir?-Nos preguntó el chico.

-Sí, suban tranquilos.

Aquél pequeño grupo se nos unió, y todos comían galletas, excepto yo, yo estaba excluido.

Miré hacia abajo, y no había ningún Zeta cerca, buena señal.

Juan debe de estar seguro, o éso espero.