Capitulo 2

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Harry

El vuelo a Seattle lo pasé durmiendo como un tronco en el avión. A pesar de ser un jet valorado en varios millones de libras, los asientos no eran muy cómodos para dormir durante horas, pero estaba tan cansado que ni me importó. Igual que el tiempo, que se me pasó volando. Aunque estábamos en el otro pico de Estados Unidos, me pareció como si estuviésemos prácticamente al lado

-Harry, Harry-empezó a moverme el hombro-Venga, Harry. Ya hemos llegado

-Pero quiero dormir un ratito más...-yo me removí en el asiento

-Dormirás cuando vayamos al hotel, ¿vale?-yo seguí sin hacer caso a Paul-No me obligues a levantarte como a un niño pequeño

-Hazlo si quieres...

En ese momento, noté cómo me elevaba en el aire. Paul me había cogido en brazos, pero todo aquéllo duró muy poco porque, al segundo, me dejó caer, dándome un buen porrazo contra el suelo enmoquetado del avión

-Pero, ¡¿qué haces, Paul?!-me molesté bastante-Desde luego, si querías despertarme bien, lo has conseguido-me levanté y me masajeé mi dolido culo

-Te dije que te levantaría como a un niño pequeño, no que fuera a cargar contigo como tal-se rió levemente y después me ayudó con las maletas-Anda, que algunas fans os esperan allí afuera

Paul cogió parte de mis maletas y salió detrás de Niall y delante de mí, cuidando de que no nos pasara nada a ninguno de los dos, que éramos los que más cansados estaban. Caminábamos casi como zombies

Paul tenía razón. Había bastantes fans esperándonos, pero nada que no pudieran controlar nuestros guardaespaldas. De camino al bús, me hice un par de fotos con fans y firmé algún que otro autógrafo. No sé por qué querían tener una foto conmigo. La cara de sueño que llevaba no era precisamente muy fotogénica

Cuando subí, lo primero que hice fue desplomarme en el sofá de cuero rojo que había en el piso de abajo. Estaba muy cansado, pero no quería dormirme porque el hotel estaba muy cerca y no quería que Paul me tirara al suelo de nuevo así que saqué mi móvil

Al principio, pensé en llamar a ________ pero aquí era de día así que, en España, sería ya muy tarde y no quería interrumpirla por los estudios ni agobiarla llamàndola cada dos por tres. Que estuviésemos separados por muchos kilómetros no significaba que debía estar todo el santo día pegado al teléfono con ella. Aunque ganas no me faltaban. En eso, ambos estábamos de acuerdo

Al final, empecé a navegar por Twitter. Contesté algunos tweets de las fans y puse algún que otro tweet de los míos (o sea, raro y sin sentido). Después, cotilleé un poco en general hasta que me topé con un usuario del que ya creía haberme encargado, pero aún así, me daba la lata. Bueno, a mí no. A ________

Es verdad que había muchas fans a las que no les caía muy bien _______ y que empezaban a decirle cosas un poco ofensivas, igual que a Eleanor, Perrie o Sophia, pero esta chica (o chico) no paraba de insultarla hasta tal extremo de, incluso, meterse con su familia. Yo y los chicos ya le habíamos llamado la atención, pero ella seguía en sus trece. El colmo fue cuando leí un tweet diciendo que ella no valía para nada y que la vida sería mucho mejor sin ella. Los cinco la bloqueamos en Twitter de inmediato pero, aún así, no se cortaba un pelo con ella. En ese momento, me alegré de que ________ no tuviera Twitter ni se interesase por las noticias o rumores sobre nosotros. No sé cómo hubiera influido aquel horrible comentario en su vida. Sobre todo, contando con el hecho de que hace años ella intentó suicidarse porque, precisamente, ella creía lo mismo que esta chica. Que no merecía vivir

El sueño se me había pasado, pero estaba empezando a cabrearme de lo lindo al pensar en esta "persona" por llamarla de alguna manera. Me dio un poco igual el horario y marqué el número de _______. Necesitaba oír su voz para poder tranquilizarme y relajarme

Conectada a ti 2: ¿Para siempre? (Harry Styles y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora