Narrador Kuroko
La semana ha pasado sin tantos problemas, la entrenadora y Hyuga-sempai nos suspendieron a Kagami y a mi hasta que arreglemos nuestros problemas, por lo que creo que ni el ni yo volveremos al club en mucho tiempo, después de todo ninguno de los dos está dispuesto a disculparse con el otro.
En cuento a los miembros de la Kiseki no los he visto pero bueno. De alguna manera esta situación me recuerda a mis primeros días en Teiko, creo que se me había olvidado lo que es estar solo. Ahora mismo estoy sentado en la azotea de Seirin simplemente dejando que me invada la tristeza, el corazón se me rompe cada que recuerdo que mi mamá ya no me espera en casa para cenar cuando no trabajaba, que mi padre no volvera a jugar básquet conmigo, extraño a Kagami-kun ser su sombra y su amigo, a veces quisiera sentir los abrazos asfixiantes de Kise o las charlas con Midorima, me gustaría que Murasakibara me regalara dulces de vainilla y salir con Aomine y que decir de Akashi-kun, hay mi pelirrojo daría lo que fuera porqué vinieras y dijeras que todo fue un malentendido, que te equivocaste y tal vez yo sea un estúpido, pero te perdonaría sin dudarlo y te diría que no importa, que hiciéramos como si no hubiera pasado, tu me contestarias que vas a buscar la manera de compensarme el mal rato y yo insistiria que no hace falta después iríamos a tu mansión a ver películas y a hablar, te contaría lo de mis padres y lloraria a más no poder mientras tu me abrazas y me dices que todo va a estar bien, que tú estás conmigo y no me vas a dejar nunca; para terminar el día haciendo el amor en tú cama. Pero eso no va a pasar, yo ya no soy la sombra de Kagami, Kise no se me ha vuelto a cruzar, Cáncer no se lleva bien con Acuario, Murasukibara no me dará más dulces, Aomine jamás volvera a invitarme por un helado, Akashi no me va a consolar y mis padres no volverán a casa nunca.Me levantó y bajo de la azotea las clases ya terminaron, yo no entré a ninguna pero no creó que alguien se haya dado cuenta de mi ausencia. Al salir de Seirin abro los ojos asombrado al ver a Akashi esperando en la salida, afuera de su limosina con un ramo de flores.
Tanto mujeres como hombres se le quedan viendo y yo siento como mi corazón se sale de mi pecho, pero recobro la compostura y camino como si no lo hubiera visto, al pasar cerca de él, su mano se aferra a la mía y me jala hasta que nuestros pechos se juntan para después envolverme en un abrazó.
-Akashi-kun???- murmuro sorprendido mientras el esconde su cara en la curvatura de mi cuello.
-Lo siento Tetsuya, de verdad perdóname- su voz es apenas un susurro pero lo escucho claramente, mis ojos se llenan de lágrimas y lo abrazó fuertemente.-por favor perdóname mi amor-
- Por supuesto que te perdonó Akashi-kun- me separó un poco y nos miramos a los ojos para después fundirnos en un besó demandante y desesperado dónde le muestro lo mucho que lo extrañé. Nos alejamos por la falta de oxígeno y él me sonríe mientras me da las flores y me abre la puerta de la limosina.En todo el caminó hacia su mansión, no le hemos pasado abrazados y dandonos besos, mi corazón está encantado por estar con Seijuro, hasta hace un momento imaginaba que esto pasaba y ahora se cumplió. Estoy tan feliz.
Al entrar a su hogar Akashi me besó más extasiado, mientras me tomaba por los muslos haciendo que enredara mis piernas en su cintura.
-Seijuro!!!- exclame sorprendido además alguno de sus trabajadores nos podría ver, de por si mi relación con su padre no es muy buena como para que ahora también me tache de exhibicionista.
- Lo siento Tetsuya pero te necesito ahora- su voz estaba enronquecida por la excitación y comenzó a caminar conmigo encima hasta llegar a su habitación donde me arrojó a la cama y se quitó la camisa. Al ver su torso desnudo toda mi cordura se fue al carajo.
Se subió sobre mí y empezó a besarme mientras yo lo ayudaba a desnudarme, dejo un caminó de chupetones y mordidas desde la base de mi cuello hasta mi hombro en tanto una de sus manos se coloba bajo mi boxer e iniciaba un juego con mi miembro.
-ahhg Seijuro-
-me encanta cuándo gimes Tetsuya ¿dime lo haces así con todos tus amantes?- toda la pasión que sentía se apagó al oírlo decir eso.
-Que???- trate de levantarme pero mis manos estaban esposadas a la cabecera de la cama ¿en que momento lo había hecho?
- Te pregunté que si gimes como puta con tus otros amantes así como conmigo- la voz de Akashi estaba teñida de burla y sus manos arrancaron la última prenda de mi cuerpo, mientras yo me removia para que me soltara.
- Por favor sueltame Akashi-kun- suplicaba lleno de pánico al ver como bajaba sus pantalones y boxer para liberar su erección.
-No te preocupes Kuroko te pagare bien- en un rápido movimiento me volteó dejandome en cuatro con mis antebrazos sobre la cama y el trasero al aire para después sin delicadeza alguna entrar en mí. Las lágrimas no tardaron en aparecer y no sabía si era por el dolor de su pene entrando y saliendo o por el último trozo de mi alma desgarrada.
El seguía enbistiendome como poseso y yo solo le dejaba hacer lo que quisiera con mi cuerpo, tratando de pensar en otra cosa, entro 1...2...3...4...5...9...15 veces hasta que se vino en mí interior y volvió a darme la vuelta para seguir profanandome dejando mordidas y marcando sus dedos en toda mi piel blanca mientras yo fijaba la mirada en un punto imaginario de la pared con las lágrimas bajando por mi cara.
- Porque lloras Tetsuya ¿no te gusta como te lo hago? O ¿ prefieres a otro de tus amantes?- ignore sus palabras, a fin de cuentas yo ya no era más que un muñeco en sus manos.
-CONTESTA MALDITA SEA!!!- me gritó para después entrar y salir con fuerza dando directo a mi prostata sacandome un fuerte gemido- AHHHNG- soltó una carcajada
- Lloras pero no eres más que una perra que disfruta ser usada- Akashi siguió dando en ese punto dentro de mi con fuerza, en tanto yo mordia mis labios para callar los gemidos hasta que sin poder evitarlo llegue al orgasmo y después de unas arremetidas más Seijuro también.
Por fin salió de mí interior y de un buro junto a la cama tomo las llaves para abrir las esposas.
Se paro tomo su cartera y me arrojó unos cuantos billetes a la cama.
-Bien voy a bañarme y cuando regresé no te quiero ver aquí- se dio la vuelta y camino hacia el baño- ahhh y esto fue para demostrarte que conmigo nadie juega Kuroko Tetsuya- y si más entró al baño.Me levanté con mucha dificultad, comencé a vestirme y salí de la habitación, al llegar abajo el padre de Akashi me miraba burlonamente, yo solo desvíe la mirada tome mis cosas y me fui de ese lugar.
Llegué a casa y por suerte no me encontré a ninguno de mis abuelos, entre a mi habitación y me metí a la ducha con todo y ropa para dejar mis lágrimas fluir y procesar todo lo que había pasado ¿Seijuro me había violado? ¿Me engañó cuándo me pedía perdón? ¿Tanto me odiaba?
Me arranqué la ropa con rabia y talle cada parte de mi cuerpo con fuerza hasta dejarla roja.
Ya secó y vestido me senté en la cama viendo a la nada y de pronto un sobre arriba del buro llamo mi atención, era algo que me dieron después del partido contra Rakusan cuándo gane un concurso de literatura en ese entonces no me lo planteé pero ahora..... tomo mi célula y marcó un número. Después de unos segundos contestan
-Bueno, quién habla???
- Buenas noches señor.Director, habla Kuroko Tetsuya.
-Ahhhh joven Tetsuya. Necesita algo?
- A decir verdad queria saber si seguía en pie la oferta de la beca a E.U
- Por supuesto Tetsuya, pero debes viajar pasado mañana ¿tienes problema con ello?
- Por supuesto que no señor, ahora mismo alisto mis cosas.
- Muy bien hijo me alegra que aceptaras, mañana ven con tus tutores a firmar unos papeles y por los boletos.
- Gracias señor. Ahí estaré mañana.
- Kuroko puedo preguntar ¿porque aceptaste tan de repente?
-.......
-Sigues ahí Tetsuya?
-Si señor y en cuanto a su pregunta sólo quiero olvidar.Bueno gracias por leer.
¿Qué les pareció el capítulo?
Me costo mucho escribirlo, nada me convencía y creó que se me paso un poco la mano pero ya ni modo.
Espero que les guste y tratare de actualizar más rápido.
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La luz de la sombra (En EDICIÓN)
Fanfic¿Nashkuro?¿Akakuro?¿AllxKuro? Un malentendido hace que la Kiseki no Sedai y Kagami lastimen a su preciada sombra. A su vez Kuroko recibe una mala noticia que junto con el desprecio de quienes creía sus amigos lo llevan aceptar una propuesta que lo t...