- Mía - escucho una voz muy dulce en mi oreja que aunque fue bajita hizo que me despertara- ¿que? - miro a todos lados asustada porque no recordaba que estaba con mateo en su camioneta, o la de su abuelo... Me dí cuenta de que ya era de noche haciendo que me preocupara
- ya llegamos - abre la puerta de la camioneta y se baja cerrandola a sus espaldas, luego se dirige hacia la mia abriendola... Me estira su mano esperando a que la tome para bajarme, y se la doy con un poco de nervios
- ¿donde estamos? - pregunto con los pelos de punta, luego escucho que cierra la puerta
Miro hacia una gran casa muy hermosa y podria decir lujosa junto a un pequeño rio el cual el sonido del agua que llevaba me relajo haciendo que cerrara mis ojos y mis nervios disminuyeran un poco
- en la casa de mis tios - dice ya estando a mi lado con las manos meditas en los bolsillos
Caminamos unos pasos hasta estar un poco mas cerca del rio
- que hermosa - digo abriendo mis ojos con una sonrisa
- si es muy bonita - sentia que me miraba con una sonrisa muy dulce, voltie mi cabeza y era verdad
Su mirada me transmitia un calor a mi interior que hizo que me olvidara por completo de lo que pasaba a mi alrededor, mi sonrisa no se borró, al contrario, creció más al notar que la de el tambien lo hacia, se empezo a acercar hacia mí sin quitar su mirada de la mía y puso sus manos en mis mejillas que ya para entonces estaban muy sonrojadas
- la luz de la luna se ve muy hermosa en tus ojos, más de lo que hubiera imaginado
acerco su cara muy lentamente poniendo su frente junto a la mia, nos miramos un momento y trato de acercarse aún más, en ese momento lo unico que quería era besarlo
Pero no podia hacerlo...
Reaccione y todos mis nervios volvieron
- ¿que pretendes? - digo alejandome de el unos pasos hacia atrás
Se lleva las manos a la cara con un suspiro profundo
- perdón Mía - se quita las manos de la cara para poder tomar mas mias pero me aparto nuevamente
- ¿lo unico que sabes es decir perdón?, ¡dime lo que quieres conmigo de una vez!, ¡pero dime la verdad! - no queria aceptar aún que el habia cambiado realmente
- Mía porque no entiendes que de verdad quiero acercarme a ti con buenas intenciones - su voz suena cansada, ya me lo imagino, viajo por toda una tarde
- ya se, ¿fue una apuesta? O un reto -
- nada de eso - tenía ganas de llorar, solo por impotencia de no saber si era verdad o no
- llevame a mi casa - camino hacia la camioneta, pero me toma de la mano y me vuelve hacia el con su mano en mi cintura dejando que estemos muy cerca el uno con el otro, sintiendo su respiración golpeando mi nariz
- no - esta vez no se trata de acercar
- ¿porque?, ¿me tienes secuestrada? - me suelto de su agarre lo más rapido que puedo
- no Mía, solo que hay unos hombres que te estan buscando para secuestrarte - hace que mis nervios suban aún más...
Siento que mis piernas, manos y brazos tiritan, mi respiración se acelera y comienzo a ver borroso
- ¿quienes son? - siento una lagrima caer por mi mejilla... Estoy tan asustada que mi voz se quiebra
- no Mía porfavor no llores - se acerca para abrazarme, y esta vez no pude alejarme, algo me decia desde mis adentros que lo permitiera... Al abrazarme pude sentir que me caían más lagrimas
Me sentí tan bien que pase mis manos por su espalda abrazandolo de vuelta
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Mi corazón te pertenece
Подростковая литератураMía Miller es una adolescente de 16 años, le encanta la tecnología, pero también le apasiona leer y es una amante de la comida. Ella nunca se ha enamorado ya que hace 3 años un chico llamado Mateo Burrell al enterarse de que Mía estaba enamorada...