Salvación. //NCT~ JohnTen

Día uno

Día uno sin comer. Quiero ver cuánto resisto.

Desde niño me han molestado por mi físico y crecí odiándome, odiándolos, odiando todo. Los niños pueden ser despiadados pero se les perdona, no saben lo qué hacen a esa edad. Pero en niveles superiores la crueldad es genuina a nivel de placer. 

Primero fue por mi sobrepeso. Luego por mi aspecto y al final, me jodían porque soy gay.

Me veía al espejo y simplemente no toleraba mi ser. Me torné un chico escuálido a los que se les ve fácilmente los huesos y a pesar de que mi aspecto mejoró por causas de las pubertad, mi propia repulsión solo aumentaba con el paso de los años. Cubrí todos los espejos que tenía en casa. Dejé de abastecer mi refrigerador y solo podía encontrar fruta, leche y cereal. Luego solo cereal y ya después no me importó. Salía a trabajar pero lo hacía por mera distracción, por la monotonía de la sociedad y la obligación de subsistir. 

En las tardes, solo duermo. Todo lo posible, porque los sueños provocan la misma sensación que la satisfacción de alimentarse. Así mato mi necesidad biológica de comer, con sueños forzados que terminan en trágicas y abstractas pesadillas.