Obstáculos contra el amor (Daniela Córcega y Gabriel Mussi)

Capítulo 16

A la mañana siguiente me levanto y me arregló para irme a atrabajar, suena mi celular y es Gis.

-Hola amiga, ¿estas ocupada?
-Hola Gis, voy al trabajo ¿porque? - le contesto dando un enorme bostezo
-¿Tienes tiempo para ir conmigo a desayunar?
-Si, ahorita en un rato paso por ti
- Esta bien, nos vemos ahorita
Fin de la llamada

Salgo de casa, voy por Gis a su casa y después llegamos a "La cocina de Martha" mi restaurante de desayunos favoritos, pedí unos huevos revueltos con tocino y un gran café y Gis pidió unos huevos rancheros y jugo de naranja.

-Amiga, ¿porque tan pensativa?
-Te contaré algo Gis, pero me tienes que prometer que no le dirás a nadie y cuando digo nadie es nadie
-Si, esta bien, dime, ¿que pasa?

Le cuento lo que paso con Ana en el restaurante y lo que me dijo.

-Pero que se cree esa, ¿y ya le dijiste a Gabriel?
-No, claro que no, no quiero quedar como una chismosa, por eso te pedí que no le dijeras a nadie Gis
-Y yo te dije que esta bien, puedes confiar en mi, somos amigas ¿recuerdas?

Acabamos de desayunar, deje en su casa a Gis y me fui directo a mi trabajo.
Estaba en mi oficina y Jonathan entra.

-Hola hermosa, buenos días - lo dice con una sonrisa picara y sentándose en la silla
-Buenos días Jonathan, ¿que pasa?
-Tengo que salir fuera por unos días, ya le dije a Montse que me ausentare unos días así que tu estarás a cargo de este proyecto - lo dice levantándose de la silla
-Esta bien, ¿y cuanto tiempo más o menos?, digo para saber cuanto tiempo estaré a cargo
-No son muchos días no te preocupes, bueno me tengo que ir, adiós hermosa - me lo dice cerrando la puerta y lanzándome un beso

En un mundo paralelo en la cafetería de Ana.

-Buenos días, esta la dueña
-Si, ¿quien lo busca?

El hombre al escuchar el si se dirigió a la oficina de Ana.

-Ya es hora de irnos - le dice el hombre a Ana mientras espera en la puerta
-Muy bien

Se dirigen a la puerta y se van en un carro negro polarizado.

En mi oficina me encuentro haciendo mis cosas de siempre y al terminar me marchó a casa ya que no tengo planes porque Jonathan salió por unos día, ¿me preguntó a donde fue que ni siquiera me dijo cuando regresaría?, pero bueno yo me las arreglare sola en lo que él viene de su viajé.
Pasaron dos días, Jonathan aún no regresaba y cada vez el trabajo se me hacia más pesado.

En un mundo paralelo en la cafetería de Ana.
-Buenos días, ¿esta mi hija?
-Oh, buenos días señor San Roman, no, no se encuentra, ella hace dos días que no a pisado la cafetería señor.
-Que raro, mi hija es muy responsable y jamás faltaría a trabajar, ¿seguro que hace dos días no viene?
-Si señor, hace dos días que su hija se fue con un hombre en un carro negro polarizado, y desde ese día no a venido por aquí, señor, ¿y si era un secuestrador?
-Pero porque secuestrarían a mi hija si ella no a hecho nada - lo dijo muy preocupado
-Por dinero señor, por dinero
-Esto esta mal y me esta preocupando, pasaré a su oficina a llamar a la policía
-Si señor, adelante

Pasa un rato y llega Gabriel a la cafetería.
-Buenos días, ¿se encuentra Ana?
-¿Para que busca a mi hija? - le dice el señor San Roman que esta bajando las escaleras de la oficina de Ana
-Oh, buenos días señor, soy el novio de su hija, ¿sabe donde esta?, hace dos días que no se nada de ella? - le dice estrechando su mano
-Lo mismo quisiera saber yo muchacho, al parecer secuestraron a mi hija - le dijo aún estrechandole la mano a Gabriel
-¿¡QUE!? - dice Gabriel espantado y con los ojos bien abiertos
-Si, me dijo Mauricio uno de los empleados que hace dos días un hombre se llevo a mi hija en un carro negro polarizado y que no a venido desde ese día.
-Dos señor, eran dos porque otro hombre los estaba esperando en el carro - interrumpe Mauricio el empleado
-No se preocupe señor, traeremos a su hija sana y salva, se lo prometo - le dice muy agitado por la noticia y al mismo tiempo haciendo una llamada

*Ring Ring*, suena mi celular
-Bueno, Dani, ¿estas ocupada? - lo dice en un tono desesperado
-Hola Tuti, un poco, ¿porque?, ¿necesitas algo?, te escuchó un poco asustado - le dije algo extrañada
-Puedes venir con tu papá aquí a la cafetería de Ana, necesitó los servicios de tu papá, es de vida o muerte - lo dice aún más desesperado
-Si Tuti, ¿pero que pasa? - le pregunto un poco asustada
-Ahorita te cuento, no tarden por favor - me dice aún mas desesperado y asustado
Fin de la llamada

Me dirigí a casa y por suerte mi padre estaba ahí.

-¡¡Papá!! - le grito
-¿¡Que pasa mi hermosa!? - lo dice dándome un beso en la frente
-Tuti me llamo y me dijo que necesitaba de tus servicios como policía - le dije asustada
-¿Pero que pasó? - me dijo el asustado
-No lo sé, no me quiso decir, solo me dijo que era de vida o muerte
-Esta bien, vamos

Salimos de casa y nos fuimos directamente hacia la cafetería de Ana.

-Hace dos horas llame a la policía y todavía es hora de que no llegan - lo dice el papá de Ana muy enojado y desesperado
-No se preocupe señor, llame a una amiga y su padre es policía y él podrá ayudarnos, de hecho ya llegaron
-Buenos días, el oficial Córcega a su servicio, ¿en que le puedo ayudar?
-Buenos días oficial, por favor acompañeme a la oficina, ahí podremos platicar mejor

Entramos a la oficina de Ana y ahí su papá le contó a mi papá que él creía que habían secuestrado a Ana.

-Mire calmese, primero necesitó saber todos los hechos - le dijo mi papá sacando una libreta y pluma
-El único que sabe bien los hechos es Mauricio, un empleado de aquí de la cafetería
-Muy bien, lo puede traer por favor para que me cuente con detalle como pasaron las cosas
-Si, por supuesto

Llega Mauricio y empieza a contar todo lo sucedido mientas mi papá anotaba todo en su libreta.

En un mundo paralelo en una casita en las afueras del pueblo.

-Segura que es la cantidad que nos dijo que nos daría
-¡Estoy segura, no estoy tonta si! - algo enojada
-Esta bien, no te enojes - se sirve agua - Mas vale que nadie se haya dado cuenta porque sino estas frita ¿¡me oyes!?
-¡No me grites!, ya te dije que no estoy tonta y que nadie sabe nada, así que más vale que te controles porque ya sabes de lo que soy capaz ¿¡ahora tu me oyes!? - le dice enojada
-¡Si!, esta bien, ahora hay que recoger y meter esto al carro ya para irnos, no quiero que empiecen a sospechar ya que un empleado tuyo vio a mi colega salir contigo al carro, ¡andale ayudame!
-¡Ya voy!, ya te dije que no me grites, esta bien
-Y por favor, corre a tu empleaducho que de seguro ya fue de metiche con tu padre
-¿¡Estas loco!?, ¿y como justificaría su despidió?
-Esta bien, no lo despidas pero asegurarte de que no se vuelva a meter en lo que no le importa, ha, y te inventas algo bueno o sino empezaran a sospechar y entonces ahí si estaremos en problemas
-Esta bien - le dice mirándolo
-Creó que ya es todo, ya vámonos
-Vamonos pues
Se suben al carro y se dirigen al pueblo.