Final

1K 166 120
                                    

5 años habían pasado desde aquel día.

Cansancio y ansiedad, ellos ya no lo podían aguantar.

Necesitaban soledad, estaban cansados de la compañía innecesaria. Sus hijos a ellos ya no les necesitaban.

Goth había triunfado en cada tarea y imprevisto que le había llegado ¿Para que les servían sus padres ya? A los 29 años su vida hecha ya está, sus hijos y su esposo; su única dependencia y necesidad.

Raven, un chico ya de 20 años, casado con Blueprint y con un hijo en camino. Su día a día era entrenar, trabajar y a su esposo cuidar. ¿Para que le servían sus padres ya? Si su vida dedicada a sus hermanos y esposo estaba ya.

Silver, aquel niño ya casi hombre de 17 años, también casado, estaba hecho todo un hombre. Dedicado a su casa y a su esposo, Fury, no se despegaban ni una sola vez. Su día a día era el encierro en su casa para seguir terminandola. Siempre sereno, siempre callado, desde pequeño independiente. ¿Para qué le servirían sus padres ya? Su vida recién comenzaba, y su camino ya decidido estaba. Su nuevo rol como ayudante de su primo Gradient era casi lo único que le importaba.

Shino, aquella pequeña de 15 años ya su futuro estaba planeado. Radier, su novio, le había llevado a vivir con él apenas pudo. Su vida a los 14 tomó un rumbo único y fijo, la pintura se había convertido en su pasión y, junto a su hermano Sorell, no tenían otra opción. ¿Para qué le servían sus padres ya? Ella era independiente, era ya una chica madura y que se había ido a temprana edad, no tenía necesidad de sus padres y odiaba molestarlos pese a amarlos.

Sorell... Sorell junto a su hermana era feliz, su amor secreto por el hermano de Radier no lo dejaba descansar. Su depresión avanzaba, pero él no hablaba. Sus padres... ¿Para que le servían sus padres ya? De mucho, y eso él lo tenía que lamentar.

La ida de Killer y Color de su mente jamás se pudo sacar.

Era su culpa, su culpa, su culpa... O al menos eso decía aquella voz.

Sus ojos inservibles siempre veían esa alma frente a él. Energía mala, un alma negra. Su confianza en ella era plena, esa voz para él era su única compañía. Odiaba hablar con cualquier persona que no fuera aquella voz o su hermana Shino.

Sus brazos ya no daban para más, cada día era un corte nuevo, cada noche era un corte más que curar.

Y cuenta de eso no se daba ni un cercano ni familiar.

Reaper dejó la carta en el comedor y tomó la mano de su esposo para no volver jamás, Sorell observó las almas marchar y él ya no lo pudo aguantar.

Corrió a la casa y cayó de rodillas al entrar, comenzó a gritar y a llorar, pues sabía que sus padres no iban a regresar.

Se sentía solo, se sentía abandonado... Se sentía muerto... Se sentía inútil...

— ¿Por qué se fueron? —Preguntó Sorell al ver esa alma negra al frente de él aparecer.

— Su tiempo de utilidad en este mundo acabó... Es simple, Sorell, si les hubieras dicho como te sientes quizá ellos seguirían acá.

Esas palabras hicieron que Sorell comenzara a llorar, levantó su manga y con fuerza su piel destrozó. Un corte tan profundo un desmayo provocó, pero su tiempo no acabó.

Reaper se sentó en la cama de su templo y lloró en el pecho de su esposo, jamás creyó lo duro que sería su familia abandonar, pero ya era hora que su vida junto a Geno comenzara a dedicar...

Time Out [Afterdeath] - Fallo Laboral 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora