Capítulo 3.

19 1 0
                                    

Narra Aki:

Vi el coche de la madre de Koemi alejarse, pero no podía dejar las cosas así, así que corrí detrás de él, manteniendo una distancia específica para que no me viese ni las perdiese de vista.

La seguí hasta llegar a una pequeña casa, bonita y aparentemente acogedora. Vi a Koemi salir del coche, después de su madre, pero... No podía llevarmela de su casa, eso es secuestro y, no quiero que piense que estoy loco, creo...

“Uf... No tengo ganas más que de raptarla, de meterla en mi cama... Hacerla mía.”

No pude hacer nada... Y se fue.
Volví a casa de Ken, desanimado.
Mi cuerpo tiembla, la deseo, la necesito... Necesito estar en su interior. Mi entrepierna sigue dura, podría decir, incluso, que empieza a doler...

- Necesito un poco de porno... - Pienso en voz alta, mientras me tumbo en la cama.

Cojo mi móvil, busco porno en Google, aunque ya tenga a Koemi en mi cabeza... “Qué daría por verla desnuda...”
Comienzo a ver porno pero, por alguna razón, cambio la cara de las actrices por la inocente carita de Koemi, y me pone más duro aún...
Me toco... Me toco sin mirar el móvil, solo pensando en lo que mi perversa mente quiere hacerle a la chica... Y termino.

Me quedé dormido, unas horas, por el placer y el cansancio de tal duro día. Al despertarme, sentí la necesidad de buscar a Koemi por redes sociales... Pero no sé su apellido.
“Tendré que joderme hasta mañana...” - pensé.

La noche pasó rápida y ya se había hecho la hora de despertar. Suena la alarma:

“Creo que hoy no iré a clase... Supongo que me pondré la alarma para las 2:30, así llegaré para... Buscar a Koemi.” - me dije, mientras miraba la oscuridad de la habitación.

Deseos de un psicópata.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora