Los caballeros

Capítulo 9

Las horas pasaban y ella seguía meditando, cuando de repente lo sintió, un cosmos mas cálido que le mismo sol, mas justo que todas las leyes del imperio. Athena había despertado, los demás lo habían logrado. 

Solo tuvo que esperar unos momentos mas para que aquel cosmos llegara a su casa, acompañada por los demás caballeros dorados, cuando entraron y la vieron sentado, Sakura abrió los ojos, miro a la diosa y sonrió. 

-Tanto tiempo, Kido Saori... No, Diosa Athena... -Corrigió mientras aquella sonrisa no se borraba de su rostro 

-Todo este tiempo estuviste aquí, Seiya y los demás te buscaron desesperados, tanto como para recurrir a mi... -Dijo mientras la miraba y sonreía -Veo que sigue siendo la misma desde bastante tiempo 

-Cambie... Ahora yo, Sakura, caballero dorado de Sagitario te juro lealtad a ti -Respondió mientras se inclinaba -Juro que daré mi vida para protegerte y ayudar al mundo de las fuerzas oscuras... Aun si mi cuerpo no pueda moverse, solo hasta entonces yo ofreceré mi vida voluntariamente... 

-Por favor, indícanos el camino... 

Se levanto y se dirijo de nuevo a aquella pared, su arco se materializo y de su casco saco una flecha dora, apunto y disparo. Quito las piedras con ayuda de los demás caballeros y avanzaron por las escaleras que ascendían a la siguiente casa, la casa de capricornio.  No se sentía ningún tipo de cosmos, cuando llegaron y entraron vieron a Shiru tirado inconsciente.  

Sakura corrió hasta el preocupada, mientras lo movía. 

-Vamos aun no puedes morir, no después de reunirnos después de tanto tiempo... Shiru -Dijo mientras lo colocaba boca arriba -Esta muy débil... 

Saori se acerco y lo calentó con sus cosmos, regresándole la vitalidad que había perdido en su batalla. 

-Sakura... -Susurro sus ojos estaban abiertos -Eres tan hermosa...

-Cállate, no debes de hablar, hablaremos... Todos cuando todo acabe, se los prometo -Respondió sonriendo 

-Nuestra primera promesa no la cumpliste, solo no desaparezcas esta vez...

-Esta bien... No desaparece de nuevo... 

Con ayuda lograron levantarlo para continuar a la siguiente casa, la casa de Acuario. Entraron y todo estaba cubierto de hielo, Hyoga estaba tirado en el suelo, estaba congelado, de nuevo lo había revivido, al llegar a la ultima casa estaba cubiertas de rosas de color blanco y rojo. 

Shun era el único que estaba ahí, con una rosa clavada en el pecho, Saori se le acerco y le retiro la rosa, bañándolo con su cosmos y que este volvía a respirar. Todos estaban bien, aun vivos, los demás caballeros dorados los ayudaban a caminar, por lo que continuaron, la cámara del patriarca ya estaba enfrente. 

Continuaron y un grito se oyó que provenía de ahí, el grito era de Seiya. Sakura no espero mas y con sus alas de su armadura se adelanto a la cámara, estaba totalmente destruida.  Ikki estaba ahí, le tomo el pulso y aun estaba vivo, miro al rededor y oyó mas golpes, provenían de mas cerca. Cuando llego, su hermano estaba tirado en el suelo, con Saga de pie enfrente de el. 

-Hija... -Dijo una vez que la miro -Después de tanto, es momento de que el santuario llegue a un nuevo orden, mátalo... -Ordeno señalando a Seiya -Acaba con su vida...

Ella miro a su hermano, estaba totalmente herido y moribundo.

-No puedo... -Dijo finalmente después de unos momentos -Jamás mataría a mi hermano, menos por una orden tuya... Padre, basta...  Detén esto, Athena esta aquí, solo tienes que arrepentirte y te perdonara la vida...