El abrazo

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Jensen parpadea aturdido pero aliviado de que no sea uno de sus retornos violentos a la vigilia. Le duele mucho la cabeza y se encuentra tumbado en el sofá con los pies alzados por un brazo de Jared. De repente, la cara de  Jared está sobre la suya, muy cerca.

-Bienvenido princesa -dijo sonriente.

-Tienes que recortarte los pelos de la nariz- y como respuesta, la sonrisa de Jared se amplió.

-¿Qué...Qué ha pasado?
-Te has desmayado.
-Mierda. Todos... ¡JODER! -Exclama cuando todo de repente vuelve a su mente.  Se tapa los ojos con un brazo, claramente angustiado.
-Tranquilo schhh, por favor, no te preocupes por eso ahora. No pasa nada Jen, sólo relájate por favor.
-Así que he dado un buen show ¿no?
-Con efectos especiales incluidos, el blanco fantasmal fue muy convincente.

Jared bromea para restarle importancia al asunto, pero lo lamenta cuando parece obtener justo el efecto contrario.
-¡Oh por dios Jared, qué he hecho!

Se pasó la mano por el pelo, parece... Devastado. Se dio cuenta entonces de que continuaba con la toalla debajo de su espalda.

-¿Me acercas una camiseta? -Pregunta con timidez.
-Sí claro, no te muevas, ahora vuelvo.

Jared volvió enseguida con una camiseta y un paquete de toallitas desmaquillantes.
Se sentó y se quitó la camiseta rasgada. La mira con curiosidad, buscando sangre, pero sólo encuentra marcas de sudor. Luego rápidamente se pone la otra. Jared le mira fijamente a los ojos.

El pecoso le echa una mirada rápida.
-No tengo ganas de hablar- dice con hastío.

-No te he preguntado nada. Vamos a quitarte esa mala cara que tienes, ¿vale?

Jared se arrodilló entre las piernas de Jensen y comenzó a pasarle suavemente por la cara la toallita.

-Puedo hacerlo yo ¿sabes?
-Lo sé, pero quiero hacerlo yo. ¿Me dejas mimarte? -Jensen aún no contesta. -Voy a tener que sacar los ojos de cachorro de Sam?

-Está bien. -Contesta el rubio con una suave sonrisa.

Conforme deslizaba la toallita por su rostro, un trozo de piel blanca como el mármol asomaba a su paso. Jared se preguntó por un momento si eso también era maquillaje o realmente era la palidez de su tez. Al tenerle tan cerca pudo observar con detalle su cara. Su frente bañada con pequeñas perlitas de sudor, las pecas de su nariz y pómulos resaltaban como gotas de sangre en la nieve. Los ojos secos, apagados, y las pupilas estaban tan dilatadas que apenas dejaban ver el precioso color esmeralda de sus iris. Luego observó aquellos labios que siempre son rosados, gruesos y brillantes, y que ahora estaban blanquecinos y secos. Su respiración comenzaba a ser otra vez pesada e irregular. Jared se echó hacia atrás separando los labios con pavor.

-¡Tienes muy mala cara! -Dijo de repente, y Jensen pareció aturdido por un momento.

-¡Qué! ¿ya no piensas que soy guapo? -Solo bromeaba a medias.

-Siempre eres guapo, incluso cuando estás hecho mierda. Lo que es injusto para el resto de la humanidad, dicho sea de paso. Pero ahora voy a llamar al médico.- Y sale a toda prisa sin esperar respuesta.

- No, esp...

Oyó la puerta cerrarse, pero no pasó más de 1 minuto para volver a abrirse.
Por suerte el médico ya venía de camino, Kripke le había dado el aviso.

-¿Cómo te sientes? ¿Qué te notas? -Pregunta el Dr. con tono bajo y mesurado, sentándose de lado junto a él.

-Pues...

Mira lánguidamente a Jared esperando que no esté prestando mucha atención, pero rápidamente se da cuenta de que eso es del todo imposible.

-Me duele la cabeza, el corazón late deprisa... Y las manos..., no puedo hacer que dejen de temblar. Por lo demás, estoy bien.

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