Shōto el gato

3

Un mes después.

Te veías más feliz de lo normal.

Sonreias mucho y cantaba partes de distintas canciones. También cuando me veías me acariciabas la cabeza o me cogias y hacías como si bailaramos.

Eres un dueño extraño y cariñoso.

Al final me quede en lo que ahora sé que se llama sofá mirándote desde ahí corriendo de un lado para otro.

Estabas preparando algo.

Por que alguien venía.

❌🐾❌🐾❌🐾❌

Alguien  toco la puerta y tú la abriste con una de tus típicas sonrisas aunque....tus ojos decían lo contrario.

No podía diferenciar si era miedo o emoción.

Nervios o solo...amor.

Por fin abriste la puerta y pude ver ahí a un chico alto y rubio, ojos rojos y se veía que era de un carácter fuerte.

Vi como disimulabas tu sonrojo.

Pero detrás del chico estaba una chica castaña y alegre.

Tu sonrisa desapareció junto al sonrojo que hacía resaltar tus puntos en las mejillas.

Los dejaste entrar con, ahora, una sonrisa falsa.

Yo solo te seguía a donde tu ibas.

Los otros dos se sentaron en el sofá y después tu te sentaste frente a ellos.

- que tal están? Hace tiempo que no nos vemos y me vienen de que son novios.-

Miraste un momento al rubio.

A él si que lo viste antes, verdad?

-si...bueno es que....

❌🐾[...]🐾❌

Te despedirte de la castaña primero.

Creo que tenia que hacer algo.

El otro al que llamas "Kacchan" se estaba poniendo las botas para irse.

-por que no me dijiste?

Tu voz sonaba rota mientras yo miraba.

-decirte que? Uh?- contesto cortante y con voz amenazante.

-que estabas con ella. Tampoco es que me importará pero...podrías haberlo dicho, Kacchan.

Los ojos rubíes destinaban furia.

-Izuku! - te llame para que así "Kacchan" no te mirará con esos ojos.

Te agachaste para cargarme.

- que pasa Shōto?

-Ch...-volviste tu mirada al rubio- ahora hablas con gatos Deku... patético. - escupió - quien querría estar contigo? Con un inútil como tú.

-Hey! No le hables así! - intente advertirle.

Él no te puede hablar así.

Tú, eres mi dueño.

Y aunque los humanos no me entiendan te protegere.

-mira, que tanto dice tu gato?

-fuera...- susurraste.

-que?

-Que te vayas de mi casa! - cogiste su chaqueta se la tiraste, abriste la puerta y lo empujas te afuera- Ni te atrevas a buscarme.

Y cerraste la puerta.

Al ver lo que hiciste suspiraste aliviado y me miraste-yo seguía en tus brazos-

- Bien Shōto habrá que buscar una nueva casa- sonreiste y me llevaste a tu habitación.

Estabas tan feliz.

Ya quisiera que las cosas fueran así de fáciles.