Capítulo 6

969 145 122
                                    


Porque al ver esa fisonomía en busca de auxilio, le provocaron un manojo de sensaciones que todas se agrupaban a lo mismo: angustia.

Si podía decir algo igual de desagradable que ver a Denki con Kyouka, eso era ver ese rostro de dolor en Izuku, el cual se esforzaba para que el pecoso lo evitara.

-¿Qué pasa Midoriya? –lo zarandeo un poco, la paciencia que se acababa al saber porque estaba así le llevaba a ser algo áspero.

-Sólo ya no quiero estar aquí –de manera recóndita, se aferró con desconfianza por no querer incomodarlo, al pecho de Kirishima, para que nadie viera su mal estado.

Kirishima entendió que no quería ser visto por nadie que no fuera él, aprovechando que cada uno de sus compañeros estaba en su asunto, tomo a Izuku del brazo para llevarlo al baño. Era también una suerte que no había nadie en el también.

-Midoriya, ¿qué paso? –al momento de ir al baño, lo tenía apresado en sus brazos para no ser expuesto, pero ya dentro de él lo separo para ver mejor su rostro.

Al estar en un cuarto completamente sólo con Kirishima, no se privó y comenzó a soltar las lágrimas que desde ese momento habían exigido salir, gimoteando con fuerza causando un aprieto en el pelirrojo, ya que no sabía qué hacer en un momento como ese.

-¿Por qué soy el único que le afecta? ¿Por qué Kacchan está sonriendo allá fuera y en cambio yo estoy llorando? ¿Por qué tuvo que besar a Monoma-san? –cada lágrima parecía salir con más intensidad, con un grosor consideraba no era posible, comenzó a limpiarse con rudeza el sollozo que parecía no cesar con las palmas de sus manos, mojando con esto las orillas de su camisa. Queriendo que se detuvieran pero con un nulo resultado.

Para Kirishima era demasiada información, desde que Izuku mencionó el beso con Monoma, se quedó en shock. Ya que su rival tanto como amigo preciado como lo era Tetsutetsu, le hacía sentir mal. Cualquiera que los viera alguna vez pasar por las instalaciones de U. A, se podía apreciar lo enamorado que estaba del rubio, y lo que acababa de enterarse se le hizo muy injusto, si en alguna ocasión se llegara a enterar, por lo pasional que era sin duda le afectaría demasiado, como su amigo se sentía obligado a hacerle saber la verdad pero tampoco era tan fácil como se lo planteaba, en algún momento sabría qué hacer.

Y en cuanto a Katsuki... aún no lo creía, un hombre que tenía bien en claro sus ideales, que nadie capaz con la suficiente fuerza le haría cambiar de opinión, ahora se venía enterado que había hecho algo tan vil como la infidelidad.

Y no dudaba de la palabra de Midoriya, por algo se mostraba tan abatido ahora mismo y comprendía que borrar lo que sentía por Katsuki no sería fácil, él más que nadie lo sabía.

Pero aún no daba nada de crédito por lo que había hecho Bakugou, si tantas eran las ganas de ya no continuar con el pecoso, ¿por qué no se lo hizo saber desde un principio? ¿Por qué tuvo que dándoselo atender de esa manera? Sólo había conseguido ilusionarlo para después botarlo al aburrirse de él, era como lo veía Kirishima.

-Hombre... ¿cómo pudiste? –Kirishima ya había vuelto en sí, a pesar del rato que se tardó en eso, Midoriya no parecía que fuera a tranquilizarse, seguía contra una pelea consigo mismo. Tal escena le estremecía a Kirishima,- ¿por qué alguien tan bueno como Midoriya tiene que sufrir de esa manera? –se preguntó el pelirrojo, que alguien tan inocente como lo era él tenía que pasarlo tan mal por algo que entrego con toda su pureza como lo era el amor.

Se acercó un poco a él, alarmando a Izuku ya que en todo el tiempo que llevaban ahí, Kirishima no había hecho algún movimiento, con los ojos irritados, hizo el intento de verlo ya que sus mismas lágrimas le daban un panorama borroso. Kirishima le dio la señal de que si podía acercarse más, al entenderlo, no se lo negó, permitiéndole el acceso.

Forget.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora