Capitulo 9

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En cuanto vio a su hermana a lo lejos comenzó a correr hacia ella y al alcanzarla se fundieron en un intenso abrazo.

-Tienes que ayudarme, por favor.-dijo con el corazón latiendo a mil.

-Tranquila, ya he movido ficha, déjamelo a mí.-contestó Clary acariciándole el pelo para tranquilizarla.

-Sabes perfectamente que no debes correr por la calle, es muy ordinario.-su madre había llegado al punto donde las hermanas estaban abrazándose.

-Hola madre.-dijo Clary llamando la atención sobre ella.

-Hola Clary, ¿serás capaz de controlarla?

-Claro, puedes irte tranquila.

Nancy confiaba plenamente en su hija mayor, su primera víctima, pero Clary no era para nada como Nancy pensaba, solo había aprendido a decir lo que su madre quería oír y así obtener un poco de libertad, a pesar de que hacía un año se había casado con otro hombre de negocios que le había presentado su madre.

Cuando se quedaron solas Clary le explico a su hermana que había hablado con Luke y que podrían estar un par de horas juntos, el tiempo que se suponía que iban a estar ellas dos juntas.

-Jamás te había visto tan impaciente... bueno jamás te había visto sentir algo en general.-dijo riendo al ver que Malia no paraba de mover la pierna.

-Si lo conocieras me entenderías, no es que yo le conozca mucho, pero lo que sé de él es genial. 

-Me encanta verte así, entusiasmada por un chico, pero... te aconsejo que no empieces a sentir más cosas por él. Sé que no servirá de nada lo que diga, pero sabes que mamá ganará y cuanto más enganchada estés más te dolerá.

Se quedó pensando las palabras de su hermana durante todo el camino, tenía toda la razón, pero aun así quería estar bien con Luke el poco tiempo que pudiera y decidió no darle más vueltas al asunto.

Nunca había recordado estar más nervioso antes, llevaba media hora sentado frente a la puerta, esperando que sonara el timbre y verla de nuevo, era lo único que quería ahora mismo y lo obtuvo.

No hicieron falta palabras cuando abrió la puerta, Malia fue directa a sus brazos y él la recibió encantado.

-¿Como estas?-preguntó abrazándola con más fuerza.

-Ahora bien.-contestó colocando la barbilla en su pecho para poder mirarlo a los ojos.

Sin pedirlo Malia recibió el beso que quería, con el que había estado fantaseando todos estos días que no lo había visto.

-Tenemos que hacer algo, voy a sacarte de esa casa, me da igual lo que cueste.

Esas palabras le hicieron recordar que en una semana estaba planeada la mudanza a otra ciudad y que Luke aun no sabía nada.

Malia se perdió en sus pensamientos y él esperaba una respuesta, solo era capaz de mirarla, con la mirada perdida, sin saber que pasaba por su cabeza.

-Luke yo no puedo escapar de mi madre, ni de mi familia.-comenzó a decir con las primeras lágrimas en los ojos.- al principio venía con la esperanza de escapar, pero ahora me doy cuenta de que es imposible, yo seguiría siendo Malia Riley Edwards, mi madre seguiría encontrándome donde quiera que fuera y tú no te mereces que yo complique tu vida con problemas estúpidos, siempre te voy a agradecer lo que has hecho conmigo, porque gracias a ti ya no soy la misma, lo supe desde el primer momento que te mire a los ojos.-dijo cogiendo su cara entre sus manos para acércasela mas a la suya y ver bien el azul de sus ojos.- sabia que me cambiarías la vida, pero ahora esto solo serán historias que nunca podre contar, decido resignarme, me voy a ir a vivir con Trevor la semana que viene.

Las lágrimas comenzaron a caer con más fuerza cuando dijo esas últimas palabras, no creía que alguna vez las pudiera oír saliendo se sus propios labios, resignarse al fin, porque no servía de nada seguir luchando.

-No...No, ¡claro que no! no te puedes rendir ahora, me tienes a mi.-dijo agarrando sus manos que aun estaban colocadas en su cara.

-No lo hagas más difícil por favor.-las lágrimas se habían pasado de ser transparentes a ser negras, el maquillaje se le estaba destrozando, pero eso era lo de menos, estaba viviendo por primera vez lo que se sentía cuando renunciabas a algo que realmente quieres.- Ha sido un placer conocerte y puedo decir sin temor a equivocarme que eres lo mejor que ha pasado en mi vida, por breve que haya sido.-añadió antes de volver a besarlo y marcharse.

Nada había salido como estaba planeado, se suponía que iban a pasar dos horas juntos, tendrían que haber planeado la manera de huir, pero ahora Malia estaba caminando en busca de su hermana, con dificultad a la hora de ver ya que las lágrimas se lo impedían y Luke se había quedado completamente bloqueado, había perdido algo que apenas había empezado a disfrutar, sus amigos tendrían razón, tenía que haber pasado pagina, no haber empezado a sentir nada por una extraña y ahora su corazón seguiría teniendo todas las piezas correspondientes.

Amnesia  ·Luke Hemmings·Donde viven las historias. Descúbrelo ahora