El Grito (Draco Malfoy)

CAPITULO 2

Con una mueca de lo que los humanos denominarian felicidad, me fui hacia la mesa roja, con un leon por emblema.

Sin dudarlo, me sente en el unico lugar donde no habia mucha gente. Nunca me han gustado los lugares con mucha cantidad de gente.

-Hola.- me habló una castaña, con el pelo enmarañado. Parecia haberse peleado con su gato.- Soy Hermione Granger, y ellos son Ron Weasley y Harry Potter.- mire sin mucho interes, hacia donde estaba Potter. Donde pensaba que iba a ver a un heroe, solo vi a un tipo esprimachado, con gafas, y su famosa cicatriz, a un lado de unos pelos azabaches indomables. 

-¿Eres Harry Potter?- pregunte, con expresion aburrida. El chico asintió, un poco cohibido.- Amelie Morgan.- me presente secamente. No volví a entablar conversacion en ellos, hasta que se fueron por su, propio pie, al darse cuenta de que yo no buscaba amistades. Yo solo estoy ahí, para resolver un problema que ya esta durando demasiado. 

El problema de Voldemort. 

-Oigo una voz.- advirtió Potter, mientras se sujetaba la cabeza, con una mano. Su rayo brillaba, con una extraña luz roja intensa, endemoniada. *VOLDEMORT*

-¿Que pasa?- Weasley parecia espantado, y Granger...¿Que estaba haciendo?

-AUUU.- si, Granger le pego una cachetada a Potter, que al parecer, lo despertó de lo que parecia ser un sueño, o una prediccion. 

-¿Pero que haces, loca?- le chillo Weasley a Granger.

-Lo vi. Voldemort esta buscando a alguien. Desesperadamente. Mystery.- Mis dientes rechinchearon un poco, mientras hacia petar mis dedos, fingiendo estar desisteresada.

*Asi que Voldemort me esta buscando...Que coincidencia, yo lo busco a el tambien.*

-¿Mistery? ¿Habeis dicho Mystery?- se metió en nuestra conversación una chica, alta, de rasgos duros, morena.- Segun me han dicho, Mystery es una joven que trabaja para el departamento de Aurores. Mystery, en los pocos meses que lleva trabajando para los Aurores, ha roto el record de Allastor Moody. Todos los Mortifagos que se habian escapado, o escondido, la mayoria han sido capturados por ella, en soltario.- la gente se fue reuniendo, alrededor de la chica, para oir mejor MI historia.

-A mi me ha dicho mi madre, que Mystery tiene poderes anormales, fuera de lo comun. Hay rumores que intentaron atrapar a Mystery cuando fue a la Reunion de Aurores. El ministro de Magia, supuestamente, queria experimentar con ella, saber de donde saca sus habilidades extraordinarias.- no fue realmente asi, pero si que me tendieron una trampa, esos del Ministerio de Magia. 

Yo, al principo, trabajaba con ellos, pero, enseguida, destaque. Me intentaron parar una trampa, sin exito, y abandone la seccion de Departamento del Consejo del Ministro. Me anote en el Departamento de Aurores, que es independiente del Ministerio de Magia, y me puse al servicio de Allastor Moody. 

-A mi me contaron que iba con una capa especial. Solo se le veian los ojos.- comentó un tipo con un uniforme azulado, con un pajaro en el. 

-¿Y tu? ¿Sabes algo sobre ella?- me pregunto un chico alto, superficialemente guapo. 

Rapidamente, me metí en su mente. Es una cosa que puedo hacer, mientras la otra persona no sepa que le estoy leyendo la mente, o mientras no se resista. 

*Esta buscando tema de conversa. Es un conquistador.*

-Pierdete.- me di la vuelta, dejandole de mirar, y me centre en las especulaciones sobre mi. 

Eran variadas, la mayoria tenian una parte de cierta, pero una pequeña parte de ellas eran chorradas. Nadie sabia nada en concreto. Y eso ya me va bien, muy bien. 

Si nadie conoce nada concreto sobre mi, sera mucho mas dificil que me lleguen a descubrir. 

-Vayan a sus dormitorios.- la voz del Director Dumbedore disipo todo intento de rumor que habia. La mirada de ese viejo, era de total descontento, e iba dirigida hacia Umbridge, la sapo Rosa inquisidora. 

-Ven, Amelie, que te enseño donde estan los dormitorios.- habló Granger, levantandose del banco donde estaba sentada. 

Yo imité su acción, aunque ya me sabía la mayoria de lugares de Hogwarts, al igual que ciertos pasillos secretos, de los que me habían informado con antelación. 

-¿Como es que entras en quinto curso? No es muy normal, por decirlo de este modo...- me preguntó Granger, con suma curiosidad. Esa joven era demasiado curiosa, y por lo que se, también lista. 

-Vengo del mundo muggle, mas concretamente de Noruega. Mis dos padres eran magos, que estudiaron en Hogwarts, pero se mudaron a Noruega con el conflicto de Voldemort. Cuando murieron, el año pasado, decidí yo misma ir a estudiar al colegio donde habían estudiado mis padres.- mentí, con una mentira que llevaba preparando mas de 1 año, con todo el proceso de falsificación de identidades y todos los papeleos falsos que tuve que rellenar. 

-Lo lamento mucho...- Granger me dedicó una mirada apenada. ¿Por que? Si solo estaban muertos... Yo, al menos, los podía seguir viendo, cuando, de tanto en tanto, iba al mundo de los muertos, a hacerles una visita y a que me contaran los rumores que se oían por el Mundo de los Muertos. 

-Cuentame de ti. He escuchado bastante, sobre las aventuras que has tendio junto a Potter y a Weasley. ¿Es cierto que os enfrentasteís a Sirius Black?- actué un poco emocionada, aunque todo era mas falso que una moneda de 3 euros muggles. 

Ciertamente, Black no escapó por si mismo de Azcaban, si no que yo le ayudé a escapar. ¿Por que? Por que mis instintos de médium me lo decían. Y, al final, no me equivocaba, yo. Black era inocente, el padrino de Potter y todos felices. 

Bueno, todos menos los ministros del Ministerio de Magia, quien estaban no precisamente contentos. Mas bien, creo que se estaban cagando el los muertos de Black. 

-Bueno, si. Pero en realidad, no fue para tanto...- por lo visto, a Granger tampoco le gusta echarse flores. 

-He oído que tienes una de las mejores puntuaciones academicas del curso. ¿Me podrías ayudar con todo lo que me he perdido estos cursos?- le pregunté a Granger, con falsa timidez. 

*Tengo que hacerme actora muggle. Trumfaría*

-Claro, me gustaría mucho.- aceptó ella.- Mientras no me impida poder realizar mis tareas de quinto año...- Granger se preocupaba de sus calificaciones, mucho. 

Hablando y hablando, llegamos hasta el que era el retrato de la sala comun de Griffindor, una dama que cantaba opera, segun me habia dicho Moody. 

-Este es el retrato de nuesta casa. Tienes que decirle la correcta contraseña, que cambia cada semana, por seguridad.- me explicó Granger. Yo fingí prestarle atención, cuando solo tenía que antender a la contraseña de la sala comun. 

-¿Cual es la contraseña?- pregunté yo, un poco impaciente, Tenía que comprovar que la sala de Gryffindor fuera tal y como me la habían dicho que era. 

Me habían dado una MUY buena imagen de aquella sala, sobretodo, segun un mensajero que Cleonile, había una habitación, situada en un punto contreto del castillo, donde había una elevada concentración de chakra sobrenatural, lo que me iba de maravilla para hacer mis practicas de Sellos y comunicarme con mis hermanas. 

Recordando ese tema, tendría que habñar con ellas, para informar de mi "problema ROSA", llamado Umbridge.