Quinta Luna

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Estaba viendo la luna 
Pensativa
Con ganas de no pensar en nada
Y aun así pensando en todo. 

- Vamos Darya, apestas a vampiro, ¿Qué te está pasando? - Quería salir del tema con mi padre

- Conseguimos a el que tiene la esencia más fuerte de los wolf - Dije de forma desinteresada. Sin inmutarme o cometer un solo movimiento, pues sabía que si pisaba en falso, no sólo caería yo, caería Neros, y eso si me mataría. 
Por otro lado, sentía una leve necesidad de gritar, de la furia, del fastidio, ya he conseguido con quien estaré para toda mi vida, y aunque no es tan mi tipo, tampoco no lo es... Podríamos tener una buena relación, después de todo, es lo que se debe hacer... 

- ¿Y cuándo lo traerás? - Lo mire con fastidio

- Yo no soy su niñera - Me levante para salir

- Eres su mujer - Me frené en seco y lo mire con tal desprecio que en su cara se reflejo el miedo, Besty, lo estaba viendo esta vez...

- Yo aún no me lo he cojido... Su verga no ha entrado aquí, ni un sí frente el altar tampoco... Por lo tanto... YO NO SOY SU MUJER - Patee la puerta haciéndola explotar mientras salía convirtiéndome en lobo, 

Corrí por el bosque hasta llegar a la frontera, donde el reino de los blood comienza, donde no puedo poner un pie... 

- Incluso aquí, me persigues... Perra Mala - De una patada derribe el árbol y lo tome por la camisa axfisiandolo un poco...

- Que sea la última vez que me llamas perra... No soy una perra - Lo mire con una sonrisa cómplice de pronto- Soy La perra... 

- Eres mi perra - Reí

- No seas nenita... - Dije golpeando su cabeza

- ¿Quieres hacer algo divertido? - Alce los hombros mientras lo examinaba... En el ante brazo, comenzaba a aparecer una luna menguante dando el destello de los planetas alineados... 

- Si... Supongo... Pero, ¿Te tatuaste? - Dije de forma despreocupada y él rió

- No, esto me ha estado saliendo desde hace unos días, no quería preguntarle a mis padres que es... Pero, por lo visto tu lo sabes... Por otro lado, no quiero seguir hablando estoy aburrido... Vayamos a cazar... ¿Quieres? 

- En un hospital psiquiátrico - Dije riendo

- Dónde están los más lunáticos y desequilibrados, enfermos - Reí mientras caminaba con él, Neros estaba cerca... Pero, no era solo Neros el que nos acechaba a lo lejos, entre los árboles, su aura era fuerte, era una chica... Por el aroma entre 20 y 21 años, es una Bloodgy. Una especie de vampiros que pueden usar magia, usualmente sicarios, o guardianes. Sentía a Neros, muy lejos como para pedirle un ataque doble, y muy cerca como para dar una emboscada... 

- ¿Qué ocurre? - Preguntó Abrael... Ya habíamos salido de los límites de los Blood y los wolf... En cuanto sentí una pisada más cerca, me di la vuelta dando un salto y volviendome lobo, derribando de inmediato a la chica rubia de ojos esmeralda que nos perseguía, comencé a gruñirle, y sentí a Abrael cerca de mí - ¿Qué haces aquí, Sussan? Te he dicho que no me sigas...

- Es mi deber seguirte - Dijo está tomándome por el cuello y empujándome contra un tronco, gruñí por el choque en mi columna, pero, me puse de pie rápidamente

- ¿Estás bien Darya? - Dijo él preocupado- Ya basta Sussan

- Es una Wolf... - Le gruñí mientras caminaba en círculos

- Te dije que te detengas, Darya, tu también, vuelve a tu forma humana - Gruñí... Había caído sobre la columna, ella me había tocado y él me pide que no le haga nada. La rubia mostró sus colmillos y creó una esfera púrpura que lanzó sobre mí, ese impacto hizo que cayera sobre mi tobillo, haciéndolo crujir como una ramita que se rompe en dos, no tarde en parpadear cuando Neros ya tenía a la rubia por el cuello, a punto de degollarla... 

- ¿Darya estás bien? - Le gruñí cuando intento tocarme, corrí a toda velocidad sin importarme el dolor de mi tobillo cayendo sobre ella y mordiendo su brazo en el tendón principal, puse mi pata delantera sobre su cara ella, comenzó a gruñir y mostrar los colmillos, no podía moverse, Neros había hecho que se golpeará muy fuerte. - Ya basta las dos... - Me aparto de la rubia a quien miraba con odio - Sussan eres mi guardiana pero ya basta, cuando te diga que pares para... No la vuelvas a tocar, nunca o sabras quien es el verdadero yo...

- Abrael, ella es una wolf - Dijo esta

- Ella es mi wolf - Le gruñí con fuerza- Es una amiga - Seguí gruñendo - Ya deja de gruñir, sabes que eres mía... - Lo mire de una forma que el mismo diablo hubiese temblado - Ya entendí jefa, tu mandas, pero, no quita el hecho de que... ¿Estás herida? - Se intento acercar y Neros que seguía a la defensiva frente a mi que estaba postrada en el suelo - Déjame pasar Neros, puedo ayudarla - Le gruñí mientras se acercaba... Me dolía tanto que comencé a volver a mi forma humana, 

- Te llevaré a casa - Me dijo  y bufé 

- ¿Estás loco? Podrían matarte 

- No lo harán si te llevo en mis brazos 

- No te dejaré, puedo caminar - Dije poniendome en pie, afincada de un árbol, pues no podía afincar el pie izquierdo... 

- No seas Necia - Me cargó y comencé a gruñirle, me dolía a horrores... Imbécil, No llores... No llores, no llores Darya... Me tragué el nudo en mi garganta y miré al cielo con resignación, al pisar la entrada del los wolf, no hubo señas de la camada... Nadie alerta, como si algo cubriera su esencia... Comenzamos a acercarnos a mi casa, pasando por la plaza, donde habían niños jugando, parejas ligando y lo típico... Muchos se nos quedaron viendo, pero, la mirada que más llamó mi atención fue la de Freaile era una mezcla de confusión e ira

- ¿Qué haces tú con mi chica? - Gruño este 

- ¿Disculpa? Pues, no es tuya es mía... Y hago muchas cosas que tu no... - Mire a Abrael con firmeza

Maldita TentaciónWhere stories live. Discover now