Jess MCcall una niña adorable, amable, sencible y de un gran corazón. Fue encontrada tirada en un estacionamiento de un hospital y fue encontrada por Melissa MCcall una mujer que tenía en brazos un niño de 1 año llamado Scott.
Jess tiene un problema...
Estaba en casa de Lydia buscando la ropa que ella se pondrá hoy en la fiesta. Ella me llevo al hospital para darle la comida a mi madre y después fuimos a su casa donde estamos ahora mismo buscando su ropa.
- Lydia me tengo que ir ya son las 7 y ya mismo empieza la fiesta y yo me tengo que vestir.
- ¿Y mi ropa?.
- Lydia elije lo que sea no me necesitas para buscar tu ropa, todo lo que te pones se te ve bien, adiós.
Salí de su casa y fui caminando, no era tan lejos mi casa pero tampoco tan cerca. Ya faltaba poco para llegar a mi casa, pero escuche un ruido de hojas moviéndose haciendo que me alertara. Mire a mi alrededor y no vi nada, así que seguí caminando pero esta vez escuche otro ruido.
"Creo que aquí llegue".
Mire por encima de mi hombre derecho a lo que veo un hombre y pego un grito.
- Tranquila no te voy hacer daño - se acerca y yo solo me alejo rápido.
- Eso diría cualquier hombre pedófilo que quiere violar a una chica - este se ríe y se acerca un poco mas.
- Tranquila no soy ese tipo de hombre - estira su mano a lo que yo dudo si aceptarla o no y el la baja sabiendo que no la voy aceptar - me llamo Chris Argent.
- Por casualidad ¿Tú hija es Allison Argent?.
- Si, ¿Cómo lo sabes?.
- Estoy en la misma escuela que ella y tengo una clase con ella, ya somos amigas.
- Que bueno que tenga amigas nuevas... ¿y como te llamas?.
- Oh perdón, mi nombre es Jess MCcall.
- ¿Hermana de Scott MCcall?.
- Si, ¿Cómo lo sabes?.
- Tú hermano invito a mi hija a la fiesta.
"La fiesta, se me olvido por completo".
- Me tengo que ir tengo que cambiarme la ropa para después ir a la fiesta.
- Te puedo llevar a tu casa y después llevarte a la fiesta no me molestaría.
- No, gracias por la oferta.
- Vamos, si no podrías encontrarte con otra persona menos amistosa que yo y además... hoy es luna llena - miró a la luna igual que el, era muy grande y linda - y ya sabes, se vuelven más locos cuando es luna llena.
- ¿Cómo lunáticos?
- Exacto.
Acepto y nos montamos en el auto.
................. - ¡Mamá!.
Entro a mi casa y lo primero que escuchó es a Scott gritando por mamá. Subo las escaleras y lo veo sentado en su cama y mamá a mi lado.
- ¿Es esto una fiesta o una cita? - pregunta mamá a lo que yo contesto rápido.
- Tal vez ambos - digo guiñando un ojo a Scott y este se sonroja.
"Omg Scott esa carita de perrito mojado tierno aaw".
- Y su nombre es...
- Allison.
- Allison. Bonito.
Saca las llaves del carro de su bolsillo y se las tira a Scott
- Gracias.
- No necesitamos tener una charla, ¿verdad?.
- Mamá, no quiero tener la charla de usar protección.
- Oh, Dios mío. No, era mantener el tanque lleno. Dame esos de vuelta.
Solté una carcajada por la cara de mamá y también la de Scott, no puedo creer esto. Scott dile adiós al auto.
- ¿Hablas en serio?.
- Puedes apostar tu trasero que lo digo en serio. No voy a terminar en un programa de televisión de realidad con una embarazada de 16 años. ¡Venga! - No aguante la risa y me reí otra vez. La mejor familia que e tenido en esta vida - y tu señorita - me señaló a lo que yo dejo de reír - tampoco quiero que tengas una noche loca tienes 15 años así que controlen sus hormonas.
Ella se va a su cuarto a lo que yo me río otra vez.
- Buenos yo me voy a cambiar.
Me cambie y me puse esto:
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Salí de mi cuarto y vi a Scott bien vestido este me mira y sonríe a lo que yo alzó los pulgares como aprobación.
- Te vez bien Scott, me tengo que ir tengo un poco de prisa. ¡mamá ya me voy te quiero!.
Salí prácticamente corriendo y me monte en el auto de el papá de Allison.
- Perdón por la tardanza es que gracias a mi hermano por poco nos dan la charla - se me escapa una risa y me tapó la boca, miró al señor Argent y este tenía la mandíbula apretada y los nudillos blancos de lo fuerte que estaba apretando el guíe.
"Jess eres idiota es su hija y le acabas de decir eso".
Si lo soy.
- Tranquilo señor Argent mi hermano sería incapaz de tocar ni un solo pelo a su hija, no sería capaz de hacer esas cosa. Como el y yo no tenemos experiencia en esas cosas.
Veo que suelta un poco el guíe y se relaja un poco mas. Después de un rato ya habíamos llegado a la fiesta.
- Gracias señor Argent le debo una.
- No hay de que no me debes nada y me puedes decir Chris no me molesta.
- Está bien Chris, nos vemos.
Me bajo de su auto y cierro y este baja el cristal de su carro.
- Cuídate, no hagas locuras - sonreí melancólica ya que siempre quise un padre, si tengo al papá de Scott pero el nunca nos dio el amor de un padre.
- No prometo nada - sonrió y doy media vuelta y me dirijo a casa de Lydia.
