Capítulo 10

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      El estaba tan lindo, llevaba puesto unos Shorts y una remera blanca con cuello en v, me miró, no sabía que hacer, sólo me acerqué, estábamos a pocos centímetros, podía sentir su hermoso perfume, era una fragancia fabulosa, podría estar todo el día sintiéndola. El se acerca a mis labios y me roba un beso, y yo, decidida, le devuelvo la acción de la misma forma, el agarra mi cintura y posé mis brazos en su cuello.

        Piiim, piiim, piiim, piiim, suena mi despertador.

      Ya eran las 9:30 de la mañana, al abrir mis ojos, lo primero que hice fue apagar el detestable sonido de mi celular, algún día cambiaría ese odioso ruido que cada mañana cumplía la función de despertarme, pero era el único que podía hacerlo, los otros sólo sonaban y no los percibía.

       Estuve unos minutos sentada en la cama intentando recordar mi sueño, no podia hacerlo, pero se que estaba Nash del otro lado de la cubierta, y ahí es cuando todo se nubla, no recuerdo que pasa luego.

       Tenía que levantarme, era hora de desayunar. El desayuno se servía en el comedor todas las mañanas desde las 8:30 hasta las 10:30.

        Lo primero que hice fue cepillarme los dientes, luego busque mi cepillo, y peine mi cabello, tarde unos minutos en hacerlo, eataba muy enredado, pero al final logré hacerlo. Me puse un bikini, y un Short con un top de color negro, junto a mis super cómodas crocs.

     Agarré mi tarjeta, y mi celular, y salí de mi  habitación, por suerte Nash no se encontraba en el pasillo, con lo que ocurrió la noche anterior no me gustaría para nada encontrarlo en todo el día. El piensa que lo que pasó fue un accidente, pero no fue así, lo hice a propósito.

      Cuando salí de mi camarote, no supe hacía que lado dirigirme, elegí hacía la derecha, camine por unos segundos, y me encontré con un pasillo que no tenía salida, tuve que volver.

      Cuando estaba por llegar al pasillo de mi camarote, vi que Nash salía del suyo, no supe que hacer, me escondí detrás de una pared, nunca estuve tan nerviosa, espere a que el se fuera, y lo seguí, sabía que si lo hacía no iba a perderme.

     Lo seguí hasta que se paró frente al ascensor, sabía que iba a ir hasta cubierta, entonces tome las escaleras, subí por ellas hasta que llegue al último piso del barco, cuando llegue, no supe hacia donde dirigirme.

      Nada no estaba por ningun lado, no lo veía. Siento que alguien me toma del brazo, asustada me doy vuelta para ver quien era, me encontré con mi padre.

-Hola hija, parece que te asuste.

- Hola papá, si no pensé que podías haber sido tu.

-¿Ya desayunaste?

-No- le digo al mismo tiempo que me pongo a caminar a su lado- ¿vos ya desayunaste?

-No, todavía no lo hice- me dice acelerando el paso.

- Vamos juntos- le digo apresurandome para alcanzarlo.

     Llegamos al Bufet y nos dirigimos al patio de comida, agarramos un plato cada uno, y fuimos a servirnos, yo agarré tambien un pasillo hondo, me servi un sándwich de jamón y queso, una tarta de chocolate, y frutilla con crema.

     Fuimos con mi padre, y nos sentamos en una de las mesas que estañam disponibles, no veía a Nash por ningún lado, al parecer estaba sentado del otro lado.

      Fue un desayuno muy agradable, hace mucho no desayunaba junto a mi padre. Hablamos de muchas cosas, me pregunto si más tarde quería jugar al pool con el, le dije que si, siempre salíamos a jugar al pool, me encantaba ese deporte.

       Cuando terminamos de desayunar, me dijo que iría a despertar a mamá, me pregunto si quría ir junto, pero le dije que no, no quería arruinar sus momentos de intimidad.

       Nos despedimos con un beso en cada mejilla, y el se fue directo a su camarote.

       No sabía que hacer en ese barco, había demasiadas cosas para hacer, no me decría por ninguna, entonces decidí que podía hacer un poco de ejercicio.

       Me encamine a mi camarote, tarde en llegar, pero lo hice, cuando termine de vestirme para ir al gimnasio, mire la hora de mi celular, ya eran las 12:24 del mediodía, no podia creerlo, había pasado tan rápido el tiempo, no hice nada en toda la mañana, sólo puede desayunar con mi padre, aunque estuvimos más de una hora hablando, y sólo pude volver al camarote, aunque tam bien ten go que admitir que me perdí un par de veces hasta llegar. Pude vestirme con un conjunto deportivo, y cuando mire la hora de mi celular, vi que Tenía un mensaje, era de mi Nash.

-Ven a el Bufet, estamos todos esperándote, vamos a almorzar todos juntos.

-Estoy en camino.

     Salí de mi camarote, y me dirigí al Bufet, esta vez no tarde tanto, ya casi me sabía el camino de memoria, cuando llegue a la entrada del mismo, pude ver que estaba Nash, sus  padres, y los míos.

    
 
     

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