Cartas a la nada

Día 1

Hoy hace un mes.
Un mes, 31 días, 744 horas, 44640 minutos, y no te digo los segundos para que no pienses que te extraño mucho.

Llevo un mes sin pensar en ti, y déjame decirte, que no me he muerto por no tenerte en mi mente, pero entonces, apareciste de la nada, del olvido, de los recuerdos que olvide en un pasado, o creía haberlo hecho...

Es extraño como una cosa tan simple como una canción nos recuerda a una persona que ha significado tanto sin darse cuenta de ello, y por esa razón, no tuvo miedo de marcharse y dejarte con el corazón confuso.

La verdad es que nunca quise admitir que hubo algo especial en ti, algo que llego a este corazón de hielo, derritió una parte de este y lo tocó para volverlo loco. Nunca quise admitirlo, pero ahora no tengo opción.

Dejame decirte que esa canción que me cantabas porque la tenías en la cabeza y que tanto me gustaba escucharla con tu voz, tantas sonrisas que me sacastes con esa canción y hoy, después de tantos días, no he podido evitar escucharla y tampoco he podido evitar que las lágrimas brotaran de mis ojos al recordar tu sonrisa al mirar mi imagen en la pantalla de tu teléfono, era hermosa, lo admito, me encantaba y, a quién quiero engañar, me sigue gustando como el primer dia.

Dime, ¿Que le has hecho a mi corazón?

Atentamente, una chica rota.