Un-happy

Capítulo dos

Harry

Di vueltas en la cama, cerré los ojos y pensé , pero nada podía quitar de mi mente la preciosa cara de Abby en el momento en el que mencioné cuan patético me parecía la carencia de contactos en su móvil

Me senté en la cama, mirando a ambos lados, no se muy bien que hacer, son las siete de la mañana, es lo más temprano que me he levantado jamás.

Pasé mis manos por mi cara y me puse de pie.

Un baño me vendría bien.

*

Mierda, mierda y más mierda, ¿Qué hago aquí?

Cerré la puerta del auto y subí las escaleras hacia la gran casa Miller.

Toqué tres veces y estuve tentando a irme pero abrieron la puerta.

Un hombre en la edad dorada , aproximadamente, me recibió con una sonrisa.

-Joven Styles, pasé por favor- me dejo entrar

-Si, gracias....

-Fred

-Claro Fred-sonreí y busque con la mirada pero no vi a nadie más por allí -¿Está Abby?

-Si, la señorita Abigail está en el patio trasero, puede ir si quiere- él me dijo y yo asentí. Me indicó como debía ir y así lo hice.

Abrí la puerta de vidrio, y a lo lejos, en la piscina , la vi.

Ella estaba sentada en la orilla de la piscina, sus jeans doblados hasta las rodillas para no mojarlos, su cabello atado en un moño alto y en sus manos sostenía un libro.

No se dio cuenta de mi presencia hasta que carraspeé cuando llegué a su lado.

Subió sus hermosos ojos verdes conectandolos con los míos.

-Hola-su voz sonó sorprendida, cerró su libro marcándolo con un gancho de cabello. Sonreí

-Hola-me senté a su lado colocando mis piernas de manera mariposa para no mojarme.

Sus pequeños pies pálidos chapotearon un poco en el agua de la piscina y ella con su mirada fija en las gotas que generaban.

-He venido a disculparme -dije antes de arrepentirme. Abby frunció el ceño.

-¿Disculparte?-Preguntó y yo asentí -¿Por qué?

-Fui grosero, dije cosas ofensivas acerca de lo patético que es tener poca gente en tú agenda, no quise hacerlo, no eres patética, me estás ayudando con ésta mierda que se le ocurrió a mi padre, lo lamento-la miré y ella se sonrojo, sonreí.

-Está bien- contestó y volvió a mirar sus pies.

-Me gusta tu tatuaje-dije mirando como su brazo estaba girado de manera que su codo quedaba hacia atrás .

-No es gran cosa, pero gracias-se quedo mirando aquel número diez un rato y luego volvió a mirar la piscina.

Joder.

-¿Te gustaría salir?-Pregunté y ella levantó rápidamente la mirada.

-Si, claro, ¿Adónde?

-Umm, no lo se, ¿Al cine?- Afirmé/pregunté

-¡Genial!- Saco sus pies rápidamente generando chispas que ni siquiera llegaron a tocarme -La última vez que fui al cine, fue con mi madre, tenía como ocho vimos esa película donde ...- Se quedo callada y mi sonrisa se esfumó al ver un pequeño dolor en sus ojos -Lo siento, voy a cambiarme ,¿Puedes esperar?