Tempestad

1.7K 179 13
                                    

Lamento la demora, tenía problemas ❤️ las amo, caóticas. Bienvenidas las nuevas, esta historia recién está comenzando <3

Su voz era ronca, profunda e inclusive más intimidante que la de Negan.

-Dixon...-probé su nombre en mis labios y traté de apartar cualquier señal de temor-...suena a nombre de boxeador, ¿lo es, señor Dixon?

El silencio me responde y por ende no me queda más que suspirar, lo único que quería hacer era distraer mi mente un instante.

Me acuesto sobre la cama, girando en dirección a la pared carente de color.

-Bien, déjame intentarlo de nuevo...¿piloto de carreras?-otra vez no respondió-¿ex convicto drogadicto en rehabilitación?

Quise bromear pero para él al parecer fue todo menos eso, un bufido se escucha del otro lado, de esos que darías cuando te han tocado los cojones.

-Debe ser una puta broma-le oigo decir entre dientes.

Tragué saliva y cualquier señal de diversión se esfumó de mi rostro.

-¿Eso es un sí?

No responde.

-Lo tomaré cómo un sí-digo más para mí que para él.

-¿Te callas alguna vez?-gruñe.

Me quedé en silencio, jugando con el dije en el brazalete de mi muñeca. El hombre del otro lado de la pared tampoco dijo nada, creo que había entendido el mensaje; si él no quería conversar yo tampoco lo haría.





Una semana después...

Me gustaría decir que los días en el Apocalipsis son entretenidos ó que al menos fui a una expedición y vi un montón de putrefactos, pero no. Los días en el Santuario son largos y tortuosos, sobretodo después de la llegada de aquel hombre llamado Dixon. Había notado cómo había mucho más movimiento que antes en los pasillos, podía escuchar la suelas de sus zapatos y sus murmullos yendo y viniendo más veces de las que podía contar. Negan le ha hecho visitas casi diarias al prisionero y estoy segura que lo han estado maltratando, porque escuché cuando hablaban acerca de una comida para perros y que él se encargaría de la limpieza.

Y que decir de esa canción, de esa estúpida y horrorosa sinfonía de comercial televisivo. Sonó durante casi toda la semana, por más de 3 horas al día hasta que tuve que rogarle a Dwight porque apagase esa idiotez. Según él era para torturar al prisionero pero de pasada me estaba perjudicando a mí.

-¿Cómo te has sentido? ¿Ya patea?-me pregunta Dwight dejando la bandeja con comida sobre el escritorio, niego con la cabeza.

-Es muy pequeño, pero el doctor dice que todo marcha bien.

-¿El doctor Carson se lo ha dicho a Negan?

Lo miro espantada.

-¡Claro que no, no debe saberlo!-dije.

-En algún momento lo sabrá, esa barriga ya se está notando-me dice señalando mi panza con su dedo índice.

Me levanto de la silla y doy varias vueltas por la habitación antes de hablar.

-Sí, sobre eso...yo...necesito que...

-Oh no, ya hablamos de eso, Lilian. Tú no sabes lo que está pasando detrás de estas paredes, no tienes idea las cosas que pasan por la mente de Negan y sus secuaces, está mierda nos está hundiendo con ellos, ¿Supiste que Sherry se ha distanciado de mí? Porque eso pasó y ya nose qué hacer...

Él sigue hablando, es cómo si acabase de explotar y no pudiese retener lo que ha callado por mucho tiempo, sus dudas y temores. Lo escucho con atención mientras me dirijo al baño y él me sigue por detrás, me inclino hacia el lavamanos y saco desde atrás el papel mal enrollado.

The Shadow (Daryl Dixon) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora